Pues nada, que quiten la carrera de psicología, la psiquiatría y todos los peritos de campo, que con un par de observadores ya sabemos lo que hay.Si eres observador sabes cómo es la persona, no se diga la mirada, por algo dicen que los ojos son el espejo del alma.
Lástima que ninguna víctima en el mundo haya sido observadora para saber si alguien podría matarlas solo con mirarles a los ojos