Diana, Princesa de Gales

Yo tenía casi 16 años. Llegué de bailar, me bañé, me acosté. Al mediodía me llamaron a almorzar en familia y vi la noticia en tv. No "caía". Me parecía que tenía que ser un error.
Cuando eres adolescente, tienes esa extraña sensación (que recién de adulta identificas), de que los ídolos de masas no mueren ni envejecen.
Luego con el pasar de uno o dos días sí, fue una tristeza total.
 
Yo tenía 29 años, me había casado en febrero y en agosto estaba embarazada de dos meses. Como soy periodista despertaba y encendía el televisor para ver noticias. Era domingo por la mañana. Decir que me quedé de piedra es poco. Amaba a Diana (con sus defectos) porque irradiaba luz. Todo el día como en un loop no pude parar de ver noticias. Hoy en día le muestro a mi hija de 21 años las fotos de Diana y me sigue sorprendiendo el carisma que tenía. Cada tanto veo la película La Reina y me conmueve lo que provocó su muerte.
Toda mi admiración a ella.
 
Parecía que había fallecido un amigo cercano, un familiar. Se sentía una tristeza en el ambiente.
Recuerdo cómo las señoras le pidieron a la reina (cuando se acercó a ver los ramos de flores); por los niños, que cuide a los niños (por William y Harry) todo era muy demasiado conmovedor.
 
Ese verano cumplí 21 años y, en esos días, me estaba preparando para viajar a Francia pues haría mi cuarto año de universidad en un intercambio en París. Me faltaban tal vez 3 ó 4 días para irme. Vivía con mi prima y en esa época todavía era muy común recibir el periódico en la puerta. Como he dicho otras veces, siempre he seguido mucho los temas de realeza, aún a esa edad, porque mi tía y mi abuela compraban el Hola y yo era una niña muy tímida y tranquila que me enseñé a leer a los 4 años precisamente con esas revistas Hola. Por lo tanto, cuando Carlos y Diana se casaron, ya yo sabía leer, igual cuando nacieron los niños, etc. y con eso me entretuve por muchos años en sus casas.

A mi prima siempre le ha gustado dormir hasta tarde y esa mañana yo fui la que abrí la puera para recoger el periódico. La foto de Diana ocupaba toda la portada, con el anuncio de su muerte en letras grandes. Fue un gran shock y tristeza porque la seguía mucho, había sido, en cierto sentido, parte de mi vida y la admiraba.

En esos días me fui a Francia y el día después de llegar me fui a reportar al programa de intercambio y ahí concidí con otra niña del programa, rumana pero residente en Canadá y comentamos el tema. Decidimos llegarnos hasta Londres para presenciar el funeral, que era no al día siguiente, sino el próximo. Fuimos en tren hasta Calais, pernoctamos en un hostal, en la mañana agarramos el barco hasta Dover y de ahí un bus a Londres. Merodeamos, fuimos hasta los portones de Kensington y dejamos unas flores y de ahí nos ubicamos por donde pasaría la procesión. Vimos el ataúd, y a la familia real caminando detrás. Al final del día volvimos a hacer el camino a la inversa.

Muy emotivo todo, muy triste. Presenciar un pueblo compartir un dolor tan grande fue muy impresionante. Verdaderamente impactante.

Para mi tanto las angustias como la felicidad colectiva es muy emotiva. Por eso en el 2013, que estaba estudiando una maestría en Lisboa y tenía que regresar a EEUU brevemente a dejar mis perras que las tenía conmigo, al regreso paré por un día en Amsterdam y presencié la investidura de William y Máxima. Los vi salir al balcón con Beatrix y luego vi algunos royal llegando a la iglesia en traje de gala. Muy hermoso ver al pueblo celebrando ese momento.
 
Pues lo siento, pero a mi me pareció la mayor ida de olla del pueblo británico en toda su historia. La reacción a su muerte me pareció penosa, y comprobé cuanto daño habían hecho todas sus reformas (recortes) de la era Thacher en educación. Me pareció ridículo. Y el teatro de funeral un circo para alimentar a la masa.
 
Era un domingo por la mañana. Yo estaba en el primer piso de la casa preparando el desayuno.
Mi esposo dice a los gritos desde el segundo piso: "Sube, sube... ha muerto la princesa Diana!!!!"
Y yo que no me lo creía... pero ante su insistencia subí y me quedé como en shock ante el televisor.
Se quemaron los huevos revueltos en la cocina.
Terminé de preparar el desayuno llorando aunque Diana no era ni es de mis afectos pero esas cosas me emocionan y me entristecen. Pensaba sobre todo en Harry, tan apegado a su madre.
Luego, se me estrujaba el corazón ver a los dos niños marchando detrás del ataúd de la princesa.
Esa carita de pena de Harry no la olvidaré nunca.
 
Pues lo siento, pero a mi me pareció la mayor ida de olla del pueblo británico en toda su historia. La reacción a su muerte me pareció penosa, y comprobé cuanto daño habían hecho todas sus reformas (recortes) de la era Thacher en educación. Me pareció ridículo. Y el teatro de funeral un circo para alimentar a la masa.
El pueblo siempre ha tenido necesidad de referentes.
Diana era más afín al común de las gentes que a la realeza y creo, además, que muchas mujeres se sintieron identificadas con su historia de desamor y su sufrimiento por la infidelidad de Carlos.
Luego se han sabido muchas cosas. Entre esas la inestabilidad emocional de Diana, lo cual la llevó a esas reacciones exageradas y a esas declaraciones desafortunadas (creo yo) sobre su drama personal a nivel público, totalmente justificadas podría decirse pero incompatibles con su rol dentro de la monarquía inglesa.
Vamos, que era la madre de un futuro rey y se esperaba que hubiese manejado su situación de otra manera al menos dentro de un círculo más intimo.
Pero lo que ya escribí: la masa necesita ídolos y mientras más cercanos los sienta más los idealiza y los idolatra.
No es gratuito que la conozcan como "la princesa del pueblo"... igual que a otra por ahí aunque nada que ver.
 
Última edición:
Recuerdan dónde estaban y qué estaban haciendo cuando se enteraron que Diana había muerto?

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https://elpais.com/elpais/2019/08/30/gente/1567159314_794282.html
Yo estaba en el ejército, precisamente en el cuartel ese día. Y todos hablaban de ella. Yo tenía 19 años, nunca había escuchado hablar de ella. En el diario estaba su rostro. Me llamo la atención su mirada. A partir de ahí empecé a admirar a esa mujer. Que con sus errores pago con su vida. Me compre un libro y después el otro de Andrew Morton. Y otro de sus mejores fotografías, tan linda era. Tan dedicada a la gente enferma. Y ese amor q les dio a sus hijos. Tan joven se fue. Hoy a punto de cumplir yo 42 años siempre en esta fecha se me viene a la memoria esa mañana. Un día después de su entierro el 7 de septiembre cumplí 20 años.
 
Vivía a una diferencia de -9 horas, respecto a UK.
Era sábado en la tarde, había quedado esa noche. No decidía qué ropa ponerme.
Para despejar la mente, encendí la tele.
Todos los canales lo tenían como noticia única.
Me impactaron mucho las imágenes de un joven, llorando desesperadamente, golpeando con los puños unas verjas, que imagino ahora, serían las de Buckingham.
Recuerdo que las flores de gran parte del mundo, se agotaron.
 
Pero lo que ya escribí: la masa necesita ídolos y mientras más cercanos los sienta más los idealiza y los idolatra.
Así es. Y el hecho de que muriera joven y tan inesperadamente contribuye a esa idealización. A saber cuál habría sido su trayectoria de vida, su relación con sus hijos, su madurez, las parejas que tuviera...Creo que por ejemplo no se tuvo mucho tiempo para asimilar su relación con Dodi, tipo de nebulosa reputación y musulmán, cosa no muy aceptable para cierto sector británico.
 
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