Nada como desayunar salado para mí, y si es con aceite de oliva virgen extra ya me da un orgasmoFrío para como me gusta a mí el café, allí acostumbrar a tomar el espresso que es café pequeño que se toma en un solo shot, de un trago y lo ponen a una temperatura media, a mí me gusta tomar el café pausado en taza mediana y tener el café caliente desde el primer sorbo hasta el último y claro en pequeñas cuidades del norte era imposible encontrar algo que me cuadrara a excepción de los capuchinos. Imagina que me desayuné un cafe caldísimo (que el camarero me miró con cara de esta está loca) y una focaccia con prosciutto porque yo con dulce no puedo desayunar y allí las tostadas que no sean de mantequilla y mermelada no existen, es cuestión cultural. En los desayunos a medida que voy subiendo al norte lo paso fatal, aquí en el sur el concepto de desayuno en la mayoría de casos es salado y con pan y en cuanto pasas de Badajoz y Despeñaperros ya empiezan con la bollería y la mermelada, cada vez hay más sitios pero no es lo mismo, lo digo para mí que a lo mejor lo hay pero yo no desayuno a gusto. Seré arroina en ese aspecto.