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Viernes, 06 de diciembre de 2013
Buscan a una adolescente mendocina de 15 años que desapareció en España
Malén Zoe Ortiz Rodríguez (15) falta de la casa de su padre en Mallorca desde el lunes en horas de la tarde. Fue a visitar a su novio enfermo pero nunca llegó. Varios testigos la vieron en el camino que lleva a la casa de él.
La mendocina desaparecida en España.
La Guardia Civil Española ha reiniciado la búsqueda de Malén Zoe Ortiz Rodríguez, una adolescente mendocina que está con paradero desconocido en España desde el lunes por la noche. Debía llegar a casa a las 21. Su familia sigue buscándola. “Me pongo en lo peor porque Malén es una adolescente normal, no es una chica que haga cosas así. La relación conmigo y su hermano es buena”, son palabras de Alejandro, su padre, a mallorcadiario.com. “Estoy desesperado y sobre todo, con una sensación de impotencia tremenda”.
Explica que la joven se bajó del ómnibus en la Rotonda de los Piratas, en Magaluf, y caminó en dirección a Son Ferrer. Allí vive su novio, quien le había propuesto comer juntos. Nunca llegó a su destino. El último sitio en el que testigos declaran haberla visto es en la zona del vivero y la estación de servicio BP que están en la ruta que conecta con Son Ferrer y El Toro.
Alejandro confiesa que en todas estas horas se le ha pasado por la cabeza multitud de posibilidades. “Desde que se haya ido de casa hasta que se quisiera su***dar, pero ahora ya me pongo en lo peor”.
“Nos han tomado muestras de ADN a mi hijo y a mí, y a su novio, la Guardia Civil lo ha interrogado tres veces. Es doloroso todo lo que está ocurriendo, ya son más de 30 horas sin saber de mi hija”, cuenta. Asegura que es un padre exigente con sus hijos respecto a los estudios pero que todos mantienen muy buena comunicación.
“Siempre les he dejado claro que soy su padre, no su dueño. Por tanto, si hubiese sido una rabieta de querer irse de casa, lo habríamos hablado antes –agrega–. Siempre les digo que me pidan dinero si necesitan tomar un taxi, pero que por favor no lleguen tarde a casa”.
“Uno ve casos como los de Marta del Castillo y siempre se compadece de esos padres. Lo ves todo con distancia. Hasta que la vida te pone en una situación de no saber dónde está tu hija, sin saber qué le sucedió y se te viene todo encima”, concluye el padre de la joven.
Unos 40 efectivos y un grupo de amigos la buscan por tierra y aire. Sin embargo, el Ayuntamiento de Calvià pidió a los vecinos que no interfieran en el rastreo y que mantengan la tranquilidad. No obstante, en la zona, a raíz de este suceso existe una gran conmoción y la tendencia es la de pensar que ocurrió lo peor.
El temor del padre
Alejandro es fuerte, pero teme lo peor. Superó una separación de las que dejan huella hace ahora seis años y desde hace dos lo es todo para sus hijos: padre, madre, amigo y consejero. Presume de tener una buena relación con Bruno y Malén, pero hay un punto en el que se muestra inflexible: es muy escrupuloso con los horarios.
Permite tener libertad a ambos en la medida en la que ellos respondan con madurez, advirtiendo con tiempo de cualquier cambio de planes o del más mínimo retraso en su llegada al hogar de Cala Vinyes, en el que los tres conviven desde que su ex mujer decidiera irse y abandonar la isla, hace ya algún tiempo.
Consciente de ello, Malén avisó el pasado lunes a las 15.30 de que iría a visitar a su novio en Son Ferrer. Daniel no había acudido ese día al instituto porque estaba en cama con fiebre y la joven decidió ir a comer con él. Se bajó del ómnibus en la rotonda del Piratas (Magaluf) y se dispuso a recorrer los dos kilómetros que tenía por delante en su llamativo monopatín de color verde fosforescente, con el que era fácilmente identificable.
Nunca llegó a su destino. Si fue de forma voluntaria u obligada es algo que todavía se está averiguando porque Malén Zoe Ortiz todavía sigue, tres días después, en paradero desconocido. Los esfuerzos de Guardia Civil, Bomberos de Mallorca, Emergencias han sido infructuosos.
Buscan a una adolescente mendocina de 15 años que desapareció en España
Malén Zoe Ortiz Rodríguez (15) falta de la casa de su padre en Mallorca desde el lunes en horas de la tarde. Fue a visitar a su novio enfermo pero nunca llegó. Varios testigos la vieron en el camino que lleva a la casa de él.
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La Guardia Civil Española ha reiniciado la búsqueda de Malén Zoe Ortiz Rodríguez, una adolescente mendocina que está con paradero desconocido en España desde el lunes por la noche. Debía llegar a casa a las 21. Su familia sigue buscándola. “Me pongo en lo peor porque Malén es una adolescente normal, no es una chica que haga cosas así. La relación conmigo y su hermano es buena”, son palabras de Alejandro, su padre, a mallorcadiario.com. “Estoy desesperado y sobre todo, con una sensación de impotencia tremenda”.
Explica que la joven se bajó del ómnibus en la Rotonda de los Piratas, en Magaluf, y caminó en dirección a Son Ferrer. Allí vive su novio, quien le había propuesto comer juntos. Nunca llegó a su destino. El último sitio en el que testigos declaran haberla visto es en la zona del vivero y la estación de servicio BP que están en la ruta que conecta con Son Ferrer y El Toro.
Alejandro confiesa que en todas estas horas se le ha pasado por la cabeza multitud de posibilidades. “Desde que se haya ido de casa hasta que se quisiera su***dar, pero ahora ya me pongo en lo peor”.
“Nos han tomado muestras de ADN a mi hijo y a mí, y a su novio, la Guardia Civil lo ha interrogado tres veces. Es doloroso todo lo que está ocurriendo, ya son más de 30 horas sin saber de mi hija”, cuenta. Asegura que es un padre exigente con sus hijos respecto a los estudios pero que todos mantienen muy buena comunicación.
“Siempre les he dejado claro que soy su padre, no su dueño. Por tanto, si hubiese sido una rabieta de querer irse de casa, lo habríamos hablado antes –agrega–. Siempre les digo que me pidan dinero si necesitan tomar un taxi, pero que por favor no lleguen tarde a casa”.
“Uno ve casos como los de Marta del Castillo y siempre se compadece de esos padres. Lo ves todo con distancia. Hasta que la vida te pone en una situación de no saber dónde está tu hija, sin saber qué le sucedió y se te viene todo encima”, concluye el padre de la joven.
Unos 40 efectivos y un grupo de amigos la buscan por tierra y aire. Sin embargo, el Ayuntamiento de Calvià pidió a los vecinos que no interfieran en el rastreo y que mantengan la tranquilidad. No obstante, en la zona, a raíz de este suceso existe una gran conmoción y la tendencia es la de pensar que ocurrió lo peor.
El temor del padre
Alejandro es fuerte, pero teme lo peor. Superó una separación de las que dejan huella hace ahora seis años y desde hace dos lo es todo para sus hijos: padre, madre, amigo y consejero. Presume de tener una buena relación con Bruno y Malén, pero hay un punto en el que se muestra inflexible: es muy escrupuloso con los horarios.
Permite tener libertad a ambos en la medida en la que ellos respondan con madurez, advirtiendo con tiempo de cualquier cambio de planes o del más mínimo retraso en su llegada al hogar de Cala Vinyes, en el que los tres conviven desde que su ex mujer decidiera irse y abandonar la isla, hace ya algún tiempo.
Consciente de ello, Malén avisó el pasado lunes a las 15.30 de que iría a visitar a su novio en Son Ferrer. Daniel no había acudido ese día al instituto porque estaba en cama con fiebre y la joven decidió ir a comer con él. Se bajó del ómnibus en la rotonda del Piratas (Magaluf) y se dispuso a recorrer los dos kilómetros que tenía por delante en su llamativo monopatín de color verde fosforescente, con el que era fácilmente identificable.
Nunca llegó a su destino. Si fue de forma voluntaria u obligada es algo que todavía se está averiguando porque Malén Zoe Ortiz todavía sigue, tres días después, en paradero desconocido. Los esfuerzos de Guardia Civil, Bomberos de Mallorca, Emergencias han sido infructuosos.