Por fuerza tiene que hacerlo intencionadamente.
Tras tantos años.
Tras tantos miles de posados en actos de recepciones y saludos, sabe de sobra donde está su sitio. Pero no le da la gana de colocarse correctamente. Enreda al rey con el fin de romperle los nervios.
Realmente Felipe tiene paciencia.
Eso se soporta muy mal. Un día y otro día y otro y siempre tocándome los coj*nes públicamente.
Tras tantos años.
Tras tantos miles de posados en actos de recepciones y saludos, sabe de sobra donde está su sitio. Pero no le da la gana de colocarse correctamente. Enreda al rey con el fin de romperle los nervios.
Realmente Felipe tiene paciencia.
Eso se soporta muy mal. Un día y otro día y otro y siempre tocándome los coj*nes públicamente.