La Raquel de Bilbao y la Raquel de Madrid son dos caras totalmente distintas. Aquí en Madrid es donde se ha perdido a Raquel, una que se vino a "estudiar" y menos estudiar, hace de todo. En Madrid es donde ha pisoteado todo lo habido y por haber (ejemplo: amistades, personalidades) para escalar lo más rápido posible y estar por encima de todo el mundo. Una pena