menuda perogrullada que suelta esta tía. Pues claro que no es normal, tonta'lculo, pero a la mayoría no nos queda más remedio si queremos trabajar por cuenta ajena fuera de casa, cocinar nuestras comidas (y no las chichimierdas), tener nuestra casa limpia, entrenar en el gimnasio y cuidar de nuestro/s hijo/s y/o mascota/s.