SEÑORONAS DEL BARRIO DE SALAMANCA Y SIMILARES

No es necesario vivir en el barrio de Salamanca para ser señorona. Sin ir más lejos, vivo en un pueblo cercano a Valencia, lo que viene a ser una ciudad dormitorio, donde básicamente vive gente obrera, pues en mi mismo edificio vive una familia que fuera de su entorno pasaría perfectamente como si fueran del barrio de Salamanca.
La señora de esta familia, es de este municipio de toda la vida y a ella y a sus hermanas las conocen otras vecinas desde que eran pequeñas y se hacen cruces de la tontería suprema que tienen todas ellas, porque no se hablan con cualquiera, miran siempre con aires de superioridad, jamás repiten modelito y como se creen superiores al resto, nunca salen con amigas ni vecinas, solamente se relacionan entre las cuatro hermanas.
La gente que las conoce de siempre alucinan porque saben que cuando eran pequeñas vestían con la ropa que les daban y realmente pasaban mucha necesidad, dicen que incluso hambre pues su padre era muy vago, eso sí, muy de iglesia y muy de derechas.
Estas chicas, hoy ya señoras sesentonas fueron guapas en sus tiempos y aprovecharon para casarse unas con más suerte que otras, pero con la idea de no pegar golpe en la vida, los maridos ya jubilados se ocupan de casi todo porque ellas no entienden de bancos ni de trámites ni de nada, su vida es visitarse entre ellas y pasearse por El Corte inglés.
Eso sí, todas tienen asistenta porque desde siempre están fatal de salud, no se sabe que enfermedad padecen pero no pueden hacer absolutamente nada, la que es mi vecina tiene dos nietas y hasta que no han sido un poco mayores no las ha podido tener ella sola en casa porque no puede coger peso......en fin, gente lista, ojo pero no inteligente que no es lo mismo, muy monas y muy acicaladas siempre pero como abran la boca cagada segura.
 
Yo si que conozco a bastante gente. Y son como todo el mundo pero con dinero. Yo te hablo de familias con titulos y mucho dinero. Tengo varias amigas de las que no saben freir un huevo, pero no porque sean tontas o inútiles, si no porque no lo han visto hacer en su vida a sus madres y siempre han tenido servicio. Yo creo que son como podríamos ser cualquiera que hubiera nacido en una familia así. Buenos y malos, simpáticos y antipáticos, listos y tontos...
Si lo que te llama la atención es lo anecdótico, puedo contarte mil cosas... por ejemplo, una amiga de mi madre pasó de camino en un viaje a visitarla, Venía de una boda y se iba a otro compromiso, y le pidió a mi madre, con toda naturalidad, que le guardara las joyas que habia llevado en la boda y que las recogía a la vuelta. Le dió un saquito negro con un montón de cosas y se fue. Cuando abrimos para cotillear, a mi madre casi le da algo... tenía un diamante montado como un colgante (para poder ponerlo en cualquier collar o a modo de broche) que era como una pelota de golf, un collar de perlas australianas impresionante y una pulsera art decó de platino con maripositas de esmalte azul que era ma ra vi llo sa. Un dineral, vamos. Mi madre estuvo con el saquito encima todo el fin de semana, muerta de miedo por si lo robaban o se perdía o habia un terremoto o lo escondía el gato. 😂😂
Me encantan esas historias. Muchas gracias.
Cuenta más si puedes.
 
No es necesario vivir en el barrio de Salamanca para ser señorona. Sin ir más lejos, vivo en un pueblo cercano a Valencia, lo que viene a ser una ciudad dormitorio, donde básicamente vive gente obrera, pues en mi mismo edificio vive una familia que fuera de su entorno pasaría perfectamente como si fueran del barrio de Salamanca.
La señora de esta familia, es de este municipio de toda la vida y a ella y a sus hermanas las conocen otras vecinas desde que eran pequeñas y se hacen cruces de la tontería suprema que tienen todas ellas, porque no se hablan con cualquiera, miran siempre con aires de superioridad, jamás repiten modelito y como se creen superiores al resto, nunca salen con amigas ni vecinas, solamente se relacionan entre las cuatro hermanas.
La gente que las conoce de siempre alucinan porque saben que cuando eran pequeñas vestían con la ropa que les daban y realmente pasaban mucha necesidad, dicen que incluso hambre pues su padre era muy vago, eso sí, muy de iglesia y muy de derechas.
Estas chicas, hoy ya señoras sesentonas fueron guapas en sus tiempos y aprovecharon para casarse unas con más suerte que otras, pero con la idea de no pegar golpe en la vida, los maridos ya jubilados se ocupan de casi todo porque ellas no entienden de bancos ni de trámites ni de nada, su vida es visitarse entre ellas y pasearse por El Corte inglés.
Eso sí, todas tienen asistenta porque desde siempre están fatal de salud, no se sabe que enfermedad padecen pero no pueden hacer absolutamente nada, la que es mi vecina tiene dos nietas y hasta que no han sido un poco mayores no las ha podido tener ella sola en casa porque no puede coger peso......en fin, gente lista, ojo pero no inteligente que no es lo mismo, muy monas y muy acicaladas siempre pero como abran la boca cagada segura.
Es que lo que estás contando es "El quiero y no puedo". Yo me refiero a las auténticas, las que son de verdad.
 

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