Igual deberíamos ser un poco más empaticas con ella. Cierto es que se puede ir pero a costa de que??
Yo creo que ella no se quiere ir y lo entiendo, porque al fin y al cabo una secta es una comunidad de gente muy unida (unida por unas creencias erróneas, pero unida al fin y al cabo). Dentro de todas las cosas malas que tienen los testigos (que son muchísimas), es cierto que se apoyan mucho los unos a los otros y eso tira mucho, especialmente si tienes a toda tu familia metida dentro y si te vas pierdes el contacto con ellos para siempre.
Marta es hija única y no tiene hijos, pero siendo testigo nunca se quedará sola en la vida. La van a acompañar siempre, incluso cuando sea mayor y le falle la salud. Los testigos jóvenes cuidan de los testigos mayores y no les dejan solos.
Soy la primera en criticar esta secta y siempre lo haré porque he conocido casos brutales cercanos y me he informado bastante de su funcionamiento. Pero una cosa no quita la otra y puedo llegar a entender porque una persona está a gusto ahí y no quiere salir (en este caso Marta).