La supuesta donación de 100 millones de $ del rey de Arabia Saudí a Juan Carlos I

Por cierto, estoy ansiosa por escuchar su próximo discurso ¿Dirá igual que su padre que la ley es igual para todos? Jeje.
A la prensa española no se la espera.


La noticia sale en muchos paises de europa, no he leido so9bre otros paises porque tengo que hacer cosas y no puedo entretenerme.
Consulta en : ww.prensaescrita.com, muchos periodicos tienes que estar registrado, pero los titulares de la npticia si salen.
 
Rasguémonos las vestiduras. Todo el mundo sabe que los concursos públicos en Arabia Saudí se adjudican por estrictos méritos técnicos. Jajajajaja...

Hay algunos países donde si quieres obtener contratos públicos, como aquí el del AVE a la Meca, las cosas funcionan distinto. Y para que RENFE ganara el concurso de casi 7.000 millones de euros a la francesa SNCF, además de los méritos técnicos, jugó un papel fundamental la amistad personal de Juan Carlos con el rey saudí. De qué sino.
Una amistad personal muy sustanciosa jajajaja. Con ese escudo protector de intocable, se ha hecho Juan Carlos con una fortuna...que a día de hoy,no sabemos a cuanto asciende.Todo muy ejemplar y honorable.JC sabía donde hacer amigos personales y "hermanos".Con los europeos no había nada que rascar,mejor en los árabes,que esos están forrados aunque estén sometiendo a sus pueblos a la pobreza y sufrimientos,en guerras constantes donde mueren miles y miles de seres humanos..
 
Era un secreto a voces, seguro que el congreso no considerará necesaria una investigación... el pueblo somos tontos, nos roban y aki todavía jaleando al personal
Aunque el Congreso pida una investigación... ni la abogacía del Estado,ni la Fiscalía lo va aprobar.Esa es la consecuencia de ese blindaje que tiene esta monarquía,que en si misma es aberrante,poner a un ser humano por encima del bien y el mal. Lo que tienen que hacer es quitar de una vez ese blindaje.Ante esto...impotencia total.''''Fuera el blindaje a la monarquía !!!
 
LA LEYENDA NEGRA DEL COMISIONISTA
El expediente Corinna: cómo el amor (al dinero) devoró al rey Juan Carlos
La justicia suiza investiga comisiones de 100 millones al Rey emérito y su expareja. O cuando una relación desestabiliza el sistema a golpe de negocios... y todo acaba mal




Foto: Montaje: Enrique Villarino.


Montaje: Enrique Villarino.


AUTOR
CARLOS PRIETO
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CORINNA ZU SAYN-WITTGENSTEIN
REY DON JUAN CARLOS

08/03/2020


Adelantado en

¿Han notado temblores en la estructura del Estado esta semana? Es una réplica del terremoto del 13 de abril de 2012 en el delta del río Okavango (Botsuana). Hay un hilo que une el accidente africano de Juan Carlos I —mientras cazaba con su amiga del alma, Corinna zu Sayn-Wittgenstein— y la actual investigación suiza de una ¿comisión? de 100 millones de dólares de Arabia Saudí al entonces (2008) Rey, que acabaría luego, en parte, en manos de Corinna.

Dicen que los divorcios con niños son más crudos. Pero ¿acaso son más descarnados que las separaciones que ponen en juego la estabilidad del sistema, secretos de Estado y una absurda cantidad de dinero? Bienvenidos al Chernóbil de los divorcios. O al Chernóbil de los negocios. Porque hablar de amor da hasta cosita. "Esta no es una historia de amor, sino de poder y dinero", resume una fuente con acceso a la relación Juan Carlos/Corinna. Una pareja devorada por la ambición y los negocios.


Viaje al fin de la noche
Toda serie de televisión sobre 'España en Crisis' (el ciclo recesión económica, rescate bancario, recortes, accidente del rey, 15-M, zozobra del bipartidismo, abdicación real, corrupción política, nuevos partidos, ascenso de Vox, caída de Ciudadanos e integración de Podemos) debería empezar con esta escena: Juan Carlos I —74 años— tirado en el suelo de una cabaña africana tras un resbalón. Hacia las tres de la madrugada. Sin poder moverse (fractura de cadera) y sin que nadie le atienda durante unas horas. Escuchando (es un suponer) los sonidos nocturnos del Kalahari mientras le pasaba su vida por delante. Insuperable, sí.

Fueron horas de vértigo e histeria. Con un precipitado regreso a Madrid para operar al Rey. Le esperaba en España una ruidosa crisis de Estado: El Pueblo, que tantas veces había jaleado al borbón, se mostraba indignado con sus locas escapadas cinegéticas en plena recesión.

Entonces se produjo una escena menos cinematográfica que la del resbalón africano, más discreta, pero más relevante a largo plazo: los guardianes de la jefatura del Estado empujan a Corinna a abandonar el país. Sin pasar por el hospital donde estaba el Rey. Para mitigar el escándalo. Instalada en el hotel Miguel Ángel, fue trasladada 24 horas después al aeropuerto militar de Torrejón. Adiós a España.

La ruptura no se cerró bien. Más que acuerdo, hubo una huida hacia delante

Ese día no se acabó la relación entre Juan Carlos y Corinna, pero algo se empezó a jorobar y —con altibajos— no hizo más que empeorar, hasta llegar a la degradación de estos días, con Corinna denunciando en Londres el acoso del Rey emérito y el CNI para que esté calladita; en parte, con razón, la presiones del Estado han existido. Pero quizá sobre todo como cortafuegos por si la justicia osa meter mano a sus fondos.

Con Juan Carlos I protegido en España de momento —el caso de las comisiones del AVE a la Meca está archivado hasta nueva orden, pero hay una investigación en marcha de la Fiscalía Anticorrupción— Corinna es hoy el eslabón débil de la trama judicial (la inviolabilidad de Juan Carlos es un gran escudo... judicial... la reputación ya tal). Pero su estrategia de presión al borbón tiene fisuras: puede que algunos españoles tiemblen ante la posibilidad (pequeña) de que Corinna diga en serio la verdad, pero claro, vete con esas a un fiscal suizo.

Yves Bertossa, fiscal de Ginebra, investiga una transferencia de 100 millones de dólares al Rey al poco de firmarse un acuerdo bilateral entre Arabia Saudí y España, culminado con la entrega del Toisón de Oro al monarca saudí. Según la fiscalía suiza, el dinero acabó llegando a Juan Carlos tras pasar por testaferros y una estructura 'offshore'... que podría ocultar una fortuna mayor. Cuatro años después de recibir el dinero, y tras hacer el Rey uso de esos fondos, alguien transfirió 65 millones de dólares a Corinna... cinco meses después del resbalón africano. Concepto: donación. La relación estaba entonces bajo una gran presión, pero seguía en pie, y no se rompería hasta un año después. ¿Por qué?

Bárbara y Manolo
"Existe la caricatura de la pérfida extranjera [Corinna] que vino a España a aprovecharse de un rey mayor y enamoradizo, un hombre generoso y amigo de sus amigos", escribe Ana Romero, autora de dos libros de referencia para entender la caída de Juan Carlos I: 'Final de partida' y 'El rey ante el espejo'.



(Gtres)


(Gtres)


En efecto, llegados a este punto, la historia se parece un poco al astracán noventero entre Bárbara Rey y Juan Carlos I. La actriz tuvo una relación íntima con el Rey, se rompió, amagó con tirar de la manta, fue amenazada y acabó recibiendo una suma elevada de dinero. Las dos mujeres tienen algo en común: más allá del cliché de la 'femme fatale' manipuladora y chantajista, hay que tener carácter para aguantarle un pulso al Estado. Eso sí, si fueran dos películas, lo de Bárbara sería un atraco a una joyería y lo de Corinna un asalto al Banco de España. Por presupuesto, escala y ambiciones.

No nos confundamos: lo de Bárbara Rey era más una relación sentimental lucrativa y lo de Corinna, más una relación empresarial explosiva. Con viajes internacionales al más alto nivel como asesora del Rey. Porque la figura del pasado con quien hay que comparar a Corinna —he aquí la clave de toda esta historia— no es Bárbara Rey, sino Manuel de Prado y Colón de Carvajal, el legendario fontanero económico 'vivales' del borbón. "Corinna vino a ocupar en el corazón y en la cabeza de don Juan Carlos el lugar dejado por Manolo Prado y Colón de Carvajal, quien durante treinta años fue el gestor del patrimonio del monarca pero también 'su amigo más íntimo'", escribe Romero.

Corinna vino a ocupar en el corazón y en la cabeza de don Juan Carlos el lugar dejado por Manolo Prado y Colón de Carvajal

Corinna sería una versión sofisticada de la asombrosa 'buddy movie' que protagonizaron Manolo y Juan Carlos en los años frescos de la democracia. Bárbara Rey y Colón de Carvajal reunidos en una sola persona: Corinna. El doble de diversión. Yupi.

Porque el amor es el Macguffin de esta relación y de este artículo: un elemento de suspense que hace que los personajes avancen en la trama, pero acaba siendo insignificante al concluir la función. Llamar a Corinna "la querida" del Rey es como llamar a Rajoy el registrador de la propiedad de Santa Pola. No es que Juan Carlos no estuviera pillado por ella, ni que los sentimientos no jugaran un papel, es que había cosas mucho más apetitosas en juego.

El gran dilema real
Corinna y su hijo llegaron a vivir en una finca (La Angorrilla) en el complejo de El Pardo, reformada para tal fin con fondos públicos. La performance africana intensificó (no eran nuevas) las presiones de ciertos poderes fácticos para que el Rey le diera la patada. Fuentes conocedoras de las maniobras resumen el trasfondo del asunto: "Lo que le dijeron al Rey fue: o Corinna o corona".

El control de daños (relación a distancia) no fue suficiente, el Rey no logró recuperar el favor del pueblo, llegó la abdicación como mal menor. Ya no había motivos para no volver a estar juntos... y tampoco tantos incentivos como antes. "Corinna estaba más interesada en ser pareja del Rey que en ser pareja de Fulánez", resume la fuente citada anteriormente. Así que al final fue: ni Corinna, ni Corona. "La ruptura, desde luego, no se cerró bien. Más que acuerdo hubo huida hacia delante", zanja.

Corinna estaba más interesada en ser pareja del Rey que en ser pareja de Fulánez

Hubo tres bolas extras: separación escabrosa, enorme cantidad de dinero en disputa e investigación judicial. La abdicación sirvió para dar músculo regenerador a una monarquía castigada por los escándalos, pero el espinoso asunto de las comisiones a Juan Carlos I —una de las grandes leyendas negras de la democracia— ha acabado saliendo a la luz pese a todo.

Y es que, para terminar de enredar el asunto, se metió por medio el comisario Villarejo, garantía absoluta de confusión y contaminación informativa. Villarejo grabó a Corinna en Londres rajando sobre el gusto real por las comisiones(con Juan Villalonga como estrella —resucitada— invitada y sin que estén claras las circunstancias de la 'cuchipanda' triangular). La grabación filtrada activó la vía judicial. Hay que reconocer el pundonor de Villarejo como agente libre: nunca nadie se tomó tantas molestias para salvar el pellejo, y si hay que incendiar algo, se incendia.

Rubalcaba, el bombero
Cinco meses antes del accidente real en África, tuvo lugar el traspaso de poderes ZP/Rajoy. Circula una historia sobre una conversación surrealista entre el presidente entrante y el presidente salliente:

ZP: Luego hablamos de lo de la monarquía.
Rajoy: ¿De Corinna?
ZP: ¿Corinna? ¿Qué Corinna?

Dos apuntes sobre este sainete de despacho: Zapatero desconocía que el Rey tenía una amiga especial, porque el cancerbero real socialista era Rubalcaba, que hacía exageradamente bien su trabajo. Si ni siquiera lo sabía el presidente del Gobierno, aunque sí Rajoy, imaginen el común de los mortales.

Dinero caído del cielo
Pero el problema de fondo no era que el Rey tuviera una amiga íntima (¿cuándo lo fue?), sino quizá que el volumen de negocio paralelo al Estado empezó a descontrolarse. Corinna o corona. Si los daltónicos confunden entre el azul y el amarillo, la pareja real no distinguía lo público de lo privado, el amor de los negocios. Un daltonismo lucrativo ahora en llamas.

Dado que su amor se alimentó a golpe de negocios, su ruptura se parece mucho a la de una empresa que cierra y hay tortas entre accionistas por los beneficios. Se acabó el pastel.

El problema no era que el Rey tuviera una amiga íntima (¿cuándo lo fue?), sino quizá que el volumen de negocio paralelo al Estado se descontroló

Por supuesto, hay una explicación tranquilizadora a todo este trasiego de dinero: ¡Solo eran regalos! Según su abogado, Corinna "recibió un regalo no solicitado del Rey emérito" como "donación para ella y su hijo, con los cuales se había encariñado". Regalo no solicitado. Así que: Arabia Saudí le regaló al Rey 100 millones de dólares en prueba de amistad, como quien regala unos gemelos, y Juan Carlos I regaló a su vez a Corinna 65 millones. En efecto, con amigos así, ¿quién necesita el Euromillón?

Regalo, comisión, salario ganado con el sudor de la frente, panoja llovida del cielo, servicios de testaferro, chantaje, paguita, pensión de alimentos o préstamo con vuelta y en disputa, el caso es que el 'bisnes' sentimental entre Corinna y Juan Carlos ha acabado a cuchilladas en los tribunales. Dolor y dinero, pero, sobre todo, intermediación de altos vuelos bajo el radar. Hasta hoy. Quemaduras serias. Pronóstico reservado.

PD: A Juan Carlos I le fascinaba la falta de control mediático sobre sus actividades, como expresó en una conversación grabada por el CESID en 1990: "Como me decía un primo mío ayer: 'Mira, Juanito, date con un canto en los dientes. Llevas 15 años de Rey y es la primera vez que te atacan. Eres un mirlo blanco de todas las monarquías europeas. Fíjate las otras... lo que han tenido que soportar durante los últimos diez años'". Relajación mediática que explica en parte el descontrol final de su reinado. Ahora vienen los lloros y las lamentaciones.

 
Aquí la prensa suiza ha dado obviamente cobertura al tema por haber sido destapado en Ginebra. Ya os había yo comentado desde hace meses que funcionarios de cierto banco ginebrino viajaban a menudo a Madrid para reunirse con Campechano. Y no os digo más por ahora pero la reunión de JC con el ex presidente Sarkozy podría tener que ver con toda esta trama pues ambos son no solo clientes del mismo banco suizo sino también coyotes de la misma colina saudita.
 
Si esto queda en nada en la proxima vida me pido ser Borbon, riete tu de la mafia, los iluminati, el vaticano los judio masones, estos si hacen bien las cosas...
Los cuentos y cuentas de Corina son dignas de las Mil y una Noches version testaferro discolo... me pregunto si juan Carlos hizo que los Arabes despositaran esos 65 millones confiando en que su magnetismo animal haria que Corinna se los devolviera a la carrera. De cruces debio de quedarse cuando esta dijo 65 millones? que 65 millones? me pregunto si ella misma hizo que se filtrase su presencia en el safari para hacer saltar la relacion por los aires y poder irse con la pasta con la actitud de ofendidita "de mejores sitios me han echado, ". Ahora JC carga con el mochuelo del soborno, ella dice que el dinero fue un regalo que recibio antes de la transaccion del Ave , y si han blindado el dinero legalmente, que me extrañaria no lo han hecho, se van con la pasta y que el que robo de explicaciones,.
Te leo ahora y me he reído mucho, más o menos es lo que he dicho yo, este JC estaba muy confiado porque se suponía que se lo iba a devolver (a ella la usaba de testaferro) peroooooooooooo EL CAZADOR FUE CAZADO JAJAJAJAJA.

Corinna pensó: "El que roba a un ladrón, tiene cien años de perdón"
 
Juan Carlos I: Omnis efussus labor

Todos los esfuerzos mediáticos, políticos y culturales para transmitir que la monarquía es un elemento de cohesión perpetuadora de la buena vivencia democrática han resultado un tremendo fiasco

La Fiscalía Anticorrupción pide a Suiza datos sobre los 100 millones que el rey recibió de Arabia Saudí


Antonio Maestre
08/03/2020 - 20:57h
Garzón exige que Hacienda investigue las supuestas cuentas suizas del Rey Juan Carlos y que el CNI informe de Corinna

El rey Juan Carlos I en una imagen de archivo. EUROPA PRESS

En junio de 1814, el escritor y periodista José María Blanco White publicó el último número del periódico El Español, editado desde Londres. La publicación tuvo el nombre en latín de Omnis efussus labor (todos los esfuerzos han sido en vano). Se refería a la honda decepción que había sentido al constatar que la regeneración no iba a poder darse de la mano del deseado Fernando VII, que no era más que un déspota cruel e indecente. Blanco White, tras ese último número periodístico con epitafio de reconsideración y pesadumbre, se retiró de la profesión.

De Fernando VII a Juan Carlos I, la historia siempre ha sido la misma. Una imposibilidad manifiesta para salvar a la monarquía de su propia decrepitud. Todos los esfuerzos mediáticos, políticos y culturales para transmitir que la monarquía es un elemento de cohesión perpetuadora de la buena vivencia democrática han resultado un tremendo fiasco. La abdicación del rey Juan Carlos I fue el último hálito de ese comportamiento cortesano que buscaba la pervivencia del statu quo en un momento de degeneración majestuosa que la hacía insostenible. Ganaron tiempo, pero la suciedad en las heridas mal curadas siempre vuelve a supurar. Ya va siendo tiempo de que los mandarines nuestros se retiren a sus aposentos.




Cien millones de dólares son el nuevo elefante en el centro de la habitación regia. Nuestro emérito habría cobrado esa cantidad ingente de dinero de Arabia Saudí por su compromiso blanqueando la dictadura. Parte de esos millones, la nada despreciable cantidad de 65 millones de euros, fue a parar a Corinna Larsen. Ese dinero estaría ahora en una cuenta en Suiza y habría supuesto una irregularidad fiscal. Corinna estaría valorando la decisión de querellarse contra Juan Carlos I por presionarla para que no hiciera públicos secretos de Estado. Todo esto se empieza a conocer gracias a una investigación de la justicia suiza relacionada con otra existente en la Fiscalía Anticorrupción. Hay muchos resortes que van a chirriar intentando salvar a la monarquía de sus propias excrecencias.

El PSOE se ha negado a que estas actividades se investiguen en el Congreso de los Diputados en una comisión parlamentaria. Sus miembros han vuelto a acudir solícitos a defender la honra de su majestad. Su alma republicana ha vuelto a diluirse en el momento adecuado. El PSOE es uno de los elementos que más se deja en evidencia para intentar taponar la podredumbre que emana del alcantarillado real. Un partido que funciona como un vasallo culebreante que en los momentos de mayor incertidumbre monárquica actúa como sus más recios soldados.

Los últimos baluartes que defienden al monarca cuando se encuentra solo y rodeado en su alcoba recibían el nombre de Monteros de Cámara, un cuerpo de la Guardia Real establecido en el 1006 que custodiaba las estancias reales más privadas formado por soldados que acompañaban a los reyes allá donde fueran, sus escoltas más fieles. Los Monteros de Cámara ahora reciben el nombre de Monteros de Espinosa porque sus miembros tenían que ser originarios del municipio burgalés de Espinosa de los Monteros. Curiosa burla republicana que ha convertido a los socialistas en más fieros guardeses que los de Espinosa de los Monteros.

El PSOE se empeña en velar el sueño de Felipe VI honrando su presencia simbólica en el cuerpo de honores de la Guardia Real política. Un privilegio creado por la cultura de la transición y que procura ocultar cualquier desmán producido por nuestro emérito. Una estrategia que solo erosiona la credibilidad de todas las instituciones está destinada a ser un estrepitoso fracaso y, además, corre el riesgo de llevarse por delante a aquellos que presten su credibilidad a la corrupción y la negación de la justicia. El rey morirá, pero sus actos serán historia y acabarán con la monarquía. Tarde o temprano los guardeses de la impunidad serán barridos por el peso de los hechos.


Todos los esfuerzos han sido en vano. Han intentado durante décadas preservar un buen nombre inexistente y crear un relato idílico y ejemplar de comportamiento. La propaganda cortesana logró durante mucho tiempo controlar la información y mantener en una burbuja los comportamientos ilegítimos de la jefatura del Estado. Pero ya pasó ese tiempo, ya no funciona. Podrán preservar su impunidad pero no su buen nombre. Es el momento de tomar el ejemplo que dio Blanco White hace doscientos años al aceptar las impurezas reales. Ya es tarde, es tiempo de cerrar y abandonar. Omnis efussus labor.

 
IDOLO, un cornudo con conciencia de serlo y encantado de la vida tiene más dignidad que el conjunto de esta España.

El relato es perfecto, pero ¿qué de nuevo?
 
La de cosas que ha hecho este individuo por España..., me parto. Como nos vendieron la moto políticos, periodístas y demás. Los que eran juancarlistas y que seguro que estaban al tanto de muchas cosas
 
Pregunta capciosa: Los del Hola y ABC seguirán sobándole la gaita a Campechano tras todo este escándalo? y algo más...lo de la repentina amnesia y estado de idiotez de Cristina cuando se le preguntó en el juicio de Urdangarín si estaba al tanto de los delitos de su marido, serán heredados de su emerita madre? digo porque es curioso que Juan Carlos tuviera tan jugosos ingresos y Sofía no supiera o no viera la de dinero que circulaba al frente suyo. O creía la griega que por ser Rey le caían billetes del cielo a su marido y a toda la familia? Sofía es complice de su infiel y corrupto marido.
 
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