Obviamente ambos se fueron preparando para un desenlace.
Leyendo las actas queda claro que Haya se movía en tres residencias con absoluta libertad, la seguridad obviamente era de su confianza y el control del Sheikh no debía ser tan rigurosa cuando ella logra serle infiel y tramar la fuga.
Según los documentos el depositaba determinada cantidad de dinero anual para los gastos de la casa y de Haya y otra partida en una cuenta para cada uno de los niños a la que ambos tenían acceso.
Evidentemente el no controlaba las cuentas porque ella retiro dinero de las mismas y pasó inadvertido.
De la misma forma podía enviar cosas para "alhajar" su casa de Londres y debían ser tomados como aspectos domésticos normales.
Ella señala que el dinero, el gasto no era un problema en Dubai por lo cual para que los niños tengan el mismo confort en Londres no debería ser un problema tampoco, aunque los abogados de Mo terminaron bajando los números de la demanda argumentando que en ese entonces ella era esposa y ahora no y el magistrado desinfló otras pretensiones.
En el caso de las joyas de la niña el juez no reclama el dinero sino que confía que el padre se las hará llegar.
Y en el tema del Haras terminan concluyendo que es una Fundación donde obviamente lo que Haya creía suyo ya no lo es, el poder tiene estas vueltas.
Como muchas de las cosas que quedaron establecidas podrían llegar a cambiar si el padre se reconcilia con sus hijos me temo que ellos queden de rehenes de esta situación, para Mo significaría un poco de dignidad a su muy caída posición pública y para Haya el poder mantener su estándar de vida.
Yo he pensado que incluso si los hijos, al ser mayores de edad, deciden reiniciar una relación con el padre y viajar a Dubai, pueden correr el riesgo de que el padre no los vuelva a dejar salir más nunca.
Y sí, es posible que Mo jamás sospechara que una de sus esposas tuviese el atrevimiento de engañarlo y los escoltas mucho menos de escondérselo a él.