🟠 Bernardo Montoya declarado CULPABLE por el asesinato de la profesora Laura Luelmo, en Huelva.

El asesino de Laura Luelmo limpió la casa para eliminar los restos de su brutal ataque

Bernardo Montoya se deshizo de los enseres de la joven y de una manta en el trayecto que lleva al paraje donde abandonó el cuer

P. ORTEGA, J.A. CAÑAS | El Campillo (Huelva) | 21/12/18 | 19.06h

Cuantas más pruebas encuentran los equipos de Inspección Ocular y criminalística de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, más horroroso se vuelve el crimen de Laura Luelmo, la joven profesora zamorana que murió a manos de Bernardo Montoya en El Campillo, un tranquilo pueblo de 2.000 habitantes en la sierra de Huelva.

El ya asesino confeso, recién salido de la cárcel donde había pasado 21 de sus 50 años de vida, trató de borrar inútilmente (limpiándolos con lejía), los restos de sangre, según fuentes de la investigación. Y se deshizo después de todo aquello que pudiera incriminarle, como algunos enseres de su víctima y la manta en la que envolvió todo, que fue desperdigando a lo largo de un recorrido de escasos cinco kilómetros, donde, por último, arrojó el cuerpo.

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Los lugares clave en el crimen de Laura Luelmo

Durante el registro del pasado miércoles en su casa, Montoya señaló también a los agentes los lugares en los que había dejado el monedero y las llaves de la chica, «metidos en una bolsa en uno de los contenedores al lado del cementerio»; y la manta, que también tiene restos de sangre, en el margen de la carretera N-435, en el trayecto hasta el paraje de las Mimbreras.

Las abundantes muestras halladas en una de las habitaciones de su casa, justo enfrente de la que hacía solo tres días había alquilado la joven profesora, dan una idea de la mortal paliza que le propinó su vecino, ese que —según le dijo a su novio— no le gustaba como la miraba.

Según las primeras hipótesis, y a falta de contrastar todos los elementos probatorios, Montoya atacó a su víctima a la puerta de su casa, casi enfrente de la de ella, en algún momento de la tarde del pasado miércoles 12 de diciembre.

Aprovechó que es una de las calles menos transitadas del pueblo y la forzó para meterla en el interior de la vivienda. Las señales de los teléfonos móviles les posicionan a ambos en ese lugar esa tarde.

Allí la agredió sexualmente, según ha determinado la autopsia, y en contra de la confesión del detenido. «Intenté violarla pero, aunque estaba inconsciente, no pude», les dijo a los agentes delante de su abogado en la comandancia de Huelva, donde ha permanecido los últimos días y desde donde pasará hoy a disposición judicial.

El tiempo que pasó desde la descomunal agresión en casa hasta que arrojó su cuerpo en el abrupto paraje, a escasos cinco kilómetros de la vivienda, es aún una incógnita.

La última señal del teléfono móvil de Laura Luelmo, aún no encontrado, lo posiciona ese mismo miércoles 12, a las 21.00, a nueve kilómetros de donde apareció su cuerpo el lunes, 17. La última llamada recibida aquel miércoles, hacia las 16.00, fue de su novio.

Los investigadores, a falta de reunir y cotejar la multitud de indicios encontrados, se inclinan por que el hombre trasladó el cuerpo de Laura Luelmo, con un fuerte golpe en la frente, tras haberle infligido sus vejaciones en casa. La metió envuelta en una manta en la parte trasera de su Alfa Romeo oscuro, «siempre aparcado en la puerta de su casa», según un vecino.

Desde esa posición, habría seguido el camino de salida natural del pueblo, que pasa precisamente por el cementerio, donde se deshizo de parte de los enseres de su víctima (monedero y llaves). Continuaría hasta arrojar su cuerpo aún con un hálito de vida —la autopsia ha determinado que la profesora murió en algún momento entre el 14 y el 15 de diciembre— y las ropas que le había quitado (el pantalón y las bragas), que llevaba envueltos en la manta, en un terraplén con fácil acceso desde la N-435, en Las Mimbreras.

Y se deshizo de la manta arrojándola en un margen de esa misma carretera. En el coche, que comenzó a ser inspeccionado ayer, también han aparecido restos biológicos que podrían pertenecer a Laura Luelmo.

Desde que la Guardia Civil recibió el aviso de la comisaría de Zamora, donde los familiares de Laura Luelmo acudieron el jueves 13 a denunciar su desaparición —no respondía a las llamadas ni se había presentado en el instituto de Nerva donde daba clase—, centraron a Montoya como principal sospechoso*.

https://elpais.com/sociedad/2018/12/20/actualidad/1545327787_882647.html

* desde el viernes..
 
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Son madres adolescentes muchas. Pasan de niñas a marujas en chandal tol día.

Me da un poco de lástima. Pero es como q no se dan cuenta.
O en bata.
El año pasado entré en un centro comercial y lo primero que veo es una señora oronda en la caja en bata rosa(típica bata rosa de guata) me la quedé mirando con cara de asco(no pude evitar la consternación) y el marido orondo me echó una mirada fulminante casi pude leer en sus pupilas: "cucha la paya que descará".
Ese invierno por trabajo estuve un tiempo viviendo en esa zona. Me di cuenta que todos tenian el mismo patrón.
 
A mí personalmente me gustan los rasgos gitanos (no me peguntéis por qué pero es asin). Pero a lo que iba, no termino de comprender a qué viene puntualizar q a los gitanos “les molan las payas”.
Por supuesto.

Y hay pay@s que les molan los gitan@s.

Laura no pasó inadvertida por casi nadie (payo, gitano) y mira que estuvo poco tiempo allí.

Pues yo si entiendo donde quiere ir a parar. Se refiere a que les gustan porque en definitiva son mujeres, pero que no sienten hacia las no gitanas ese "respeto" impuesto por su cultura. Si Laura hubiera sido una chica gitana, este infraser se lo hubiera pensado dos veces antes de hacer algo así porque hubiera sido ajusticiado además de por la de todos por la propia, a la que temen y respetan mucho más porque es para el y para todo su clan. Sangre se paga con sangre. Alguien cree que ha habido o habrá un consejo de gitanos patriarcas para castigarle por ésto? Sin duda no lo habrá.
 
Es que no es cierto. Se consigue en minutos si hay datos objetivos, más allá de sospechas, cosa que por desgracia no tenían.
¿ y cómo se presentan "datos objetivos" a un juez , además de que un vecino avisó a las autoridades de que el día de la desaparición se oyeron " golpes que no eran normales" provinientes, a su entender, de la casa de la víctima? ¿ que màs "datos objetivos" necesita un juez, que saber que un asesino con màs delitos a sus espaldas vive a siete pasos cortos de una chica desaparecida?
Alucino de lo poco que interesan esos "datos objetivos". Todo el pueblo lo sabía.
Exigimos lo que interesa para responder a lo que se debe hacer después, y poquito por lo que se debe hacer antes.
 
No los tenían porque no los buscaron. Sabían que voluntariamente no se había ido, que se sentía intimidada por el vecino... y no utilizaron ningún medio (los famosos perros rastreadores) para saber si salió del pueblo, directamente la empezaron a buscar en el monte. Y leche, que seguro que alguno de todo el cuartel de la GC conoce al tal Montoya por sus tropelías pasadas, evidentemente no puedes fundamentar una orden en "mira es que ya mató e intentó violar, es él fijo", pero al menos intenta ponerle contra las cuerdas. Llama a su casa a ver si abre, si está nervioso, yo que sé, algo. No hicieron nada y las cosas no caen del cielo.
De acuerdo contigo, no hicieron nada, hasta el viernes porque es lo que yo me pregunto, creían que ya estaba muerta desde el primer minuto de la desaparición y solo buscaban su cadáver, pues esto es un error garrafal, sabiendo la alimaña que ella tenia de vecino como no fueron aa por el, a su puerta a preguntarle algo, a ver como reaccionaba, algo por dios, en vez de esperar y que la pobre chica muriese, con ese sufrimiento.Yo solo pido que cuando entre en la cárcel le den todo y más y que le den paliza tras paliza y si pueden que le degollen y si pueden que le decapiten también y pongan su cabeza en la plaza del pueblo, ya se que esto esta mal dicho y no es ético, pero lo que el ha hecho con esa mujer tampoco, ojala todos los días de su vida sean tan horribles como lo que el le hizo pasar a Laura
 
El asesino de Laura Luelmo limpió la casa para eliminar los restos de su brutal ataque

Bernardo Montoya se deshizo de los enseres de la joven y de una manta en el trayecto que lleva al paraje donde abandonó el cuer

PATRICIA ORTEGA DOLZ JESÚS A. CAÑAS | El Campillo (Huelva) | 21 DIC 2018 - 19:06 CET

Cuantas más pruebas encuentran los equipos de Inspección Ocular y criminalística de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, más horroroso se vuelve el crimen de Laura Luelmo, la joven profesora zamorana que murió a manos de Bernardo Montoya en El Campillo, un tranquilo pueblo de 2.000 habitantes en la sierra de Huelva.

https://elpais.com/sociedad/2018/12/20/actualidad/1545327787_882647.html
Edita @virgovamp que ha salido muy raro esto.
Quería comentar que para colmo de los colmos esta familia es "del culto" , es decir, evangelistas. Así que retiro lo que puse hace unos dias.
 
Los lugares clave en el crimen de Laura Luelmo

Pertenencias personales de la joven han sido halladas alrededor del lugar donde fue encontrada


21/12/18 | 12:30h

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