Los vendajes son tremendos. Más atentos a los niños, por favor, ellos no saben lo que hacen, sois sus ojos, sus pies, sus carreras y sus manos.
La vida va en serio, no es un juego alocado.
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Es que veo la foto y no puedo imaginarme qué clase de heridas debe tener el niño para semejantes vendajes.
Por comparar, mi hermano tuvo vendajes a esa edad en las manos con quemaduras bastante feas y no eran ni la mitad de grandes. Debo decir que no fue culpa de mi madre ni nada, en casa de mi abuela se había movido un poco una baldosa en una esquina del salón y se quedó mal sellada la gloria (un sistema de calefacción subterránea) y claro, como no tocas el suelo y estaba apartado, pues ni te enteras de que eso se había movido, pero mi hermano gateando plasmó la mano y se puso a chillar de inmediato