ASTRONOMIA, FISICA

Rusia y España lanzarán en 2023 un observatorio espacial para investigar la materia oscura
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El Observatorio Espacial Mundial Ultravioleta (WSO-UV) es un nuevo telescopio que también estudiará la atmósfera de los exoplanetas. Cubrirá, según sus responsables, "el hueco" que dejará el telescopio Hubble. El proyecto cuesta 300 millones y España ha aportado un 7%, la mitad de lo previsto por los recortes de la crisis, que se traduce en menos derechos de observación.


EFE. 31.10.2017 - 10:32h Rusia y España lanzarán en 2023 el Observatorio Espacial Mundial Ultravioleta (WSO-UV), un nuevo telescopio que estudiará la atmósfera de los exoplanetas y tratará de indagar en la naturaleza de la esquiva materia oscura del universo. El coste del proyecto está estimado en 300 millones de euros, de los que España aporta un 7%, la mitad de lo programado. Este proyecto, que comenzó a fraguarse en 2006 y cubrirá, según sus responsables, "el hueco" que dejará el telescopio Hubble. Fuentes del programa han señalado que con la crisis económica se recortaron los fondos que iba a destinar España en un 50%, lo que, además de menguar la participación de España en el diseño y control de algunos de los instrumentos, hará perder derechos de observación a los investigadores españoles.

Habrá dos centros de operaciones científicas, uno en España, en el campus de la UCM WSO-UV (por sus siglas en inglés) estará formado por un satélite y un telescopio con un espejo primario de 170 centímetros, diseñados para orbitar a unos 35.000 kilómetros sobre la superficie terrestre. Con tecnología renovada se convertirá en el único observatorio astronómico para imagen y espectroscopia ultravioleta en el espacio. La vida útil de sus instrumentos será inicialmente de cinco años, aunque el proyecto se construirá con la vista puesta en otros cinco. El proyecto WSO-UV está actualmente en fase de construcción. Si bien los comandos al satélite y telescopio se mandarán desde Rusia, habrá dos centros de operaciones científicas, uno en España, en el campus de la UCM, y otro en el Instituto de Astronomía de la Academia de Ciencias de Rusia. Desde Madrid se gestionarán los datos científicos que se enviarán por la red hasta el centro de comunicación espacial en Rusia. Para diseñar y construir este proyecto, el Instituto de Astronomía ruso y la UCM han firmado un acuerdo y creado el Centro Conjunto Hispano-ruso de Astronomía Ultravioleta (JCUVA, por sus siglas en inglés) donde ya hay equipos rusos y españoles instalándose -ubicado en la Facultad de Estudios Estadísticos-.

Para estudiar los exoplanetas y la materia oscura

Entre sus objetivos, estudiar la composición química y la física de las atmósferas de exoplanetas, los planetas situados fuera de nuestro sistema solar y de los que en los últimos años se han ido descubriendo miles, alguno de ellos "parecidos" al nuestro. Analizar las atmósferas de estos planetas es imprescindible para detectar gases que indiquen presencia de organismos y eso solo será posible con tecnología nueva, como la de WSO-UV, que gracias a sus "potentes" detectores ofrecerá una "mayor visibilidad" del universo, explica Ana Inés Gómez de Castro, catedrática de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) e investigadora principal española del proyecto. Otro de los grandes objetivos será el de estudiar la materia oscura, detalla por su parte Boris Shustov, investigador principal de WSO-UV en su conjunto. La materia normal -visible- es la que integra los planetas, cuerpos o estrellas que vemos brillar y representa el 5%. El resto está en forma de energía y materia oscuras, fenómenos distintos y cuyo entendimiento sigue siendo un misterio para la astrofísica.

http://www.20minutos.es/noticia/3174529/0/telescopio-hispano-ruso-indagar-esquiva-materia-oscura/
 
El telescopio Kepler localiza 20 planetas que podrían albergar vida o ser habitables

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Se trata de un análisis publicado por investigadores de la Universidad de Cornell. El planeta más prometedor es KOI-7923.01, cuya órbita es de 395 días y es más frío que la Tierra.


20MINUTOS.ES. 02.11.2017 - 09:03h Gracias al análisis de los datos ofrecidos por el telescopio Kepler de la NASA, investigadores de la Universidad de Cornell han apuntado que existen al menos 20 exoplanetas (planetas lejanos) que podrían potencialmente ser habitables e incluso albergar vida. El candidato más cercano es K77-11, apenas un poco más grande que la Tierra, pero el planeta más prometedor es KOI-7923.01, cuya órbita es de 395 días y es más frío que la Tierra, pero lo suficientemente cálido y grande como para tener agua en estado líquido, imprescindible para que haya vida. Su tamaño es similar a nuestro planeta y podría tener regiones similares a las tundras que conocemos. El equipo de investigadores está convencido en torno al 70 o 80% de que podría ser un candidato sólido para albergar vida. Los planetas aún no han sido confirmados como habitables, se requiere más investigación, pero son "significativamente prometedores". Para extraer estas conclusiones se ha desarrollado una nueva herramienta llamada Robovetter, que analiza automáticamente cuatro años de datos recabados por el telescopio Kepler dela constelación Cygnus. Los investigadores han elaborado un catálogo de 4.034 planetas probables dentro de la Vía Láctea, 2.300 de ellos efectivamente confirmados como planetas.

http://www.20minutos.es/noticia/317...encuentra-20-exoplanetas-potencialmente-vida/
 
ASTROFÍSICA
En 2016 se descubrió el exoplaneta Próxima b en la estrella Próxima Centauri
¿Un sistema planetario vecino?
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Próxima Centauri tiene alrededor una nube de polvo en forma de cinturón. ESO | M. Kornmesser



Descubren alrededor de la estrella más cercana al Sol un cinturón de material que sugiere que hay más de un planeta


Ciencia extrema para buscar otros planetas

Nuestra estrella vecina sigue dando sorpresas. Desde el verano de 2016 sabemos que Próxima Centauri, el astro más cercano al Sol, tiene un planeta -Próxima b- que, además, se parece bastante al nuestro. Ahora, los científicos han averiguado que este mundo, situado a sólo cuatro años luz de la Tierra, podría formar parte de un sistema planetario mucho más amplio. Así lo creen los investigadores que han estado observando la región del cielo donde está este exoplaneta, que gozaría de un clima relativamente templado, pues se encuentra a una distancia de su astro que, en teoría, le permitiría albergar agua líquida.

Los científicos, liderados por el español Guillem Anglada Pons, han descubierto alrededor de esta estrella un cinturón de polvo compuesto por material sobrante de la formación planetaria. Principalmente se trata de partículas de hielo y roca con toda una variedad de tamaños: desde microscópicos granos de polvo a rocas comparables a asteroides de varios kilómetros de diámetro.

"Hemos descubierto que Próxima Centauri tiene alrededor una nube de polvo distribuido posiblemente en forma de un cinturón que estaría a una distancia de su estrella de entre una y cuatro Unidades Astronómicas (una UA es la distancia que hay entre la Tierra y el Sol)", detalla a EL MUNDO Guillem Anglada Pons, investigador del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC).


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Astrophysical Journal Letters, se basan en las observaciones realizadas con ALMA, el mayor radiotelescopio del mundo. Operado por el Observatorio Europeo Austral (ESO), se trata de un conjunto de 66 antenas gigantes situadas en una explanada del desierto chileno de Atacama a 5.000 metros de altitud.

A diferencia de los telescopios ópticos, que captan lo que ocurre en el espectro de luz visible, los radiotelescopios como ALMA recogen ondas de radio emitidas por fuentes en el espacio. O lo que es lo mismo, permiten 'ver' lo que ocurre en el Universo frío, pues se dan procesos físicos de baja energía que emiten radiación electromagnética que puede ser captada usando instrumentos como los de Alma.

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descubrimiento de Próxima b, anunciado durante el verano de 2016, fue liderado por otro Guillem Anglada, en este caso Guillem Anglada-Escudé, investigador de la Universidad Queen Mary de Londres. A partir del anuncio, el equipo de Guillem Anglada Pons emprendió "un estudio con la idea de caracterizar ese posible sistema exoplanetario". Según recuerda el astrofísico, "una de las iniciativas fue buscar con ALMA si había nubes de polvo orbitando alrededor de la estrella. Después de formarse un sistema planetario, quedan residuos de rocas, hielos, polvo, etc, que no han llegado a convertirse en planetas. En el caso del Sistema Solar este material residual forma el llamado cinturón de Kuiper, el cinturón de asteroides o la luz zodiacal.

"Las primeras observaciones con ALMA empezaron en enero de 2017. Lo que hemos encontrado es una emisión muy débil, que en otra estrella mas lejana probablemente habría pasado desapercibida", dice Anglada.

Desde su descubrimiento, el exoplaneta Próxima b se ha convertido en un objetivo prioritario en la investigación de mundos fuera del Sistema Solar. Y los resultados presentados este viernes son los primeros del proyecto exploratorio que están llevando a cabo: "Con observaciones adicionales podrá obtenerse una imagen del cinturón, lo que determinará la orientación de ese sistema planetario", dice Anglada Pons. A partir de ahí, esperan poder calcular la masa real del planeta y averiguar cómo es ese entorno de rocas y polvo alrededor de la estrella.

¿Cuándo podrán confirmar que hay otros planetas? "Con nuestras observaciones no vamos a ver los planetas directamente, pero sí seríamos capaces de ver, por ejemplo, algo equivalente a los anillos de Saturno", explica. Por otra parte, añade, en el IAA están abordando su estudio desde diferentes perspectivas.

Si, como sostienen, hay otros mundos girando alrededor de la estrella vecina, Anglada cree "que podría haber planetas más pequeños que Proxima b que estuvieran más cerca, y también mundos mayores que estuvieran más lejos. En ambos casos podrían haber pasado desapercibidos en las observaciones realizadas hasta ahora. Con el paso del tiempo, es de esperar que vayan descubriéndose".

Por lo que respecta a la posibilidad de que estos mundos puedan albergar vida, Anglada considera que es un asunto muy complejo y "aún falta muchísima más informacion para poder aventurar respuestas precisas a esa pregunta".

Mirando hacia el futuro, sobre la mesa hay un ambicioso proyecto apadrinado por Stephen Hawking que pretende desarrollar minúsculas naves espaciales, del tamaño de un microchip, para que exploren el sistema de Próxima Centauri. Las naves del denominado proyecto Starshot estarían impulsadas por un láser gigantesco. Aunque la tecnología necesaria para emprender esta misión aún no existe, los científicos que forman parte de este proyecto creen que podría hacerse realidad en unas décadas.


El mundo más cercano al sistema solar
¿Qué sabemos hasta ahora del planeta Próxima b? Se encuentra a 4,2 años luz de la Tierra, creen que es rocoso y que tiene un tamaño parecido al nuestro (la masa es de 1,3 veces la de nuestro planeta). No está ni muy cerca ni muy lejos de su estrella, Próxima Centauri. O lo que es lo mismo, está en la llamada zona habitable de su astro. Es decir, si hay agua, ésta podría ser líquida y gozaría de un clima relativamente templado. Su periodo de rotación es mucho más corto: frente a los 365 días que tarda la Tierra en orbitar al Sol, Próxima b emplea 11,2 días en dar una vuelta alrededor de su astro.

La estrella Próxima Centauri es una enana roja y, por tanto, diferente a nuestro sol y mucho más débil, aunque las dos tienen una edad parecida. Mientras que Próxima Centauri se originó hace unos 4.860 millones de años, el Sol tiene 4.600 millones de años de antigüedad.

http://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/ciencia/2017/11/03/59fc47f2e5fdea790f8b459b.html
 
El agujero de la capa de ozono es el más pequeño desde 1988

Su extensión máxima fue 2,5 veces la superficie de EE UU. No es necesariamente síntoma de una "cura rápida", señala la NASA. Se debe más bien a variaciones naturales.

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EFE / VÍDEO: EUROPA PRESS. 04.11.2017 - 00:25h El agujero existente en la capa de ozono de la Tierra, que se forma sobre la Antártida al final de cada invierno en el hemisferio Sur, fue este año el más pequeño registrado desde 1988, informó este viernes la Agencia Aeroespacial de EE UU (NASA) según las observaciones realizadas por sus satélites. Imágenes 1 Foto La situación "excepcional" no es necesariamente síntoma de una "cura rápida", explicó la NASA en un comunicado. Se debe más bien a variaciones naturales, ya que la capa estuvo fuertemente influenciada por condiciones inestables y más cálidas de lo normal en el vórtice de la Antártida, un sistema de baja presión que disminuyó la creación de nubes polares estratosféricas, precursoras de elementos que destruyen el ozono. La extensión máxima del agujero en 2017, alcanzada en septiembre, fue de 19,6 millones de kilómetros cuadrados -2,5 veces la superficie de EE UU-, según los cálculo de la NASA, corroborados por la Administración Oceánica y Atmosférica Nacional (NOAA), mientras que la media de desde 1991 ha sido de 26 millones de kilómetros cuadrados. Además, la concentración más baja anual registrada en el agujero, que tuvo lugar el pasado 12 de octubre, fue el mínimo más "suave" que se haya observado desde 2002, según el comunicado. "El agujero de ozono en la Antártida ha sido excepcionalmente débil este año. Es lo que esperábamos dadas las condiciones climáticas en la estratosfera antártica", afirmó el jefe científico de las ciencias de la Tierra en el Centro de Vuelo Goddard Space de la NASA, Paul Newman.


Sigue siendo grande

La agencia recordó que, pese a la reducción del ozono en los dos últimos años, el agujero sigue siendo grande debido a que la concentración de sustancias que acaban con esta molécula en la atmósfera sigue siendo lo suficientemente alta para generar "significativas" pérdidas de ozono anualmente. El agujero en la capa de ozono se detectó en 1985, a finales del invierno en el hemisferio Sur, cuando el reflejo de la luz del sol implicó reacciones que incluían formas químicas activas de cloro y bromo creadas por el ser humano, y que acaban con el ozono. Hace treinta años, la importancia de la capa de ozono llevó a que la comunidad internacional firmara el Protocolo de Montreal sobre las sustancias dañinas para la capa de ozono con objeto de regular este tipo de compuestos. Se espera que para 2070 el agujero haya recuperado los niveles de 1980, ya que se prevé que los clorofluorocarbonos (CFC) continúen decreciendo. El ozono actúa como un elemento esencial en la atmósfera, una capa protectora natural a altas altitudes ante las radiaciones ultravioletas dañinas para los seres vivos

VIDEO:
http://www.20minutos.es/noticia/3178069/0/agujero-capa-ozono-mas-pequeno-desde-1988-nasa/
 

Un viaje a Marte sin salir de Madrid



08.11.2017 - 08:53h A partir de este martes no hace falta salir de Madrid para viajar a Marte. La Fundación Telefónica inaugura una exposición dedicada al Planeta Rojo. La muestra reúne 150 piezas: documentos históricos, hologramas de supuestos marcianos o maquetas de posibles casas extraterrestres. Durante siglos se pensó que había vida en Marte, ahora el desafío de la humanidad es pisar el planeta y colonizarlo. La NASA prevé el lanzamiento de la primera misión tripulada en 2030.

VIDEO:http://www.20minutos.es/videos/ciencia/aciwxC28-un-viaje-a-marte-sin-salir-de-madrid/
 
ASTRONOMÍA
La supernova PTF14hls está a 500 millones de años luz
La primera estrella que no muere
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Recreación artística de la supernova 1993J, en la galaxia M81 NASA/ESA

Cuando una estrella hace explosión se convierte en una supernova, un fenómeno que marca el final de su vida

El hallazgo de iPTF14hls desafía esa teoría: tres años después, sigue brillando


Las estrellas también nacen y mueren, aunque su vida suele durar miles de millones de años. Si lo comparamos con un ser humano, el Sol sería un treintañero, pues tiene 4.500 millones de años y aún le quedan otros 6.000 millones de años. Pero hay muchos tipos de astros.

Cuando una estrella hace explosión se convierte en una supernova, un fenómeno que ha sido observado miles de veces por los astrónomos y que, en todas las ocasiones, significaba el final de su vida. Sin embargo, hay un astro que parece desafiar esas teorías. Un equipo del Observatorio Las Cumbres de California, en EEUU, parece haber encontrado una excepción en la supernova iPTF14hls.

Cuando la descubrieron, en septiembre de 2014, parecía una supernova corriente pero, según explican esta semana en la revista Nature, unos meses más tarde notaron algo que hasta entonces no había sido observado: después de perder intensidad, la supernova se volvía más y más brillante. La explosión ha tenido lugar a 500 millones de años luz

Lo habitual es que una supernova alcance un pico de luminosidad y después éste vaya cayendo durante los 100 días siguientes, aproximadamente. Pero iPTF14hls se fue haciendo más luminosa durante los dos años siguientes, multiplicando por cinco la intensidad de su luz. Incluso ahora, tres años después, sigue brillando.

Sorpresa en el archivo
Para intentar esclarecer su misterioso comportamiento,los astrónomos, liderados por Iair Arcavi, de la Universidad de California, echaron mano de los archivos que guardan los registros astronómicos y se quedaron atónitos al comprobar que en la misma región del cielo donde se encuentra esa supernova había ocurrido otra explosión en 1954.

Según sus cálculos, la estrella que explotó dando lugar a esta supernova aparentemente inmortal tenía 50 veces la masa del Sol y probablemente era mucho más grande que nuestro astro. Hasta el punto que sostienen que iPTF14hls podría ser la estrella más masiva que han visto explotar. «Se pensaba que estas explosiones sólo ocurrieron en las primeras etapas del universo. Es como encontrar un dinosaurio vivo hoy en día», compara Andy Howell, coautora del estudio.

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Lugar del cielo donde está la supernova iPTF14hls en 1954 y 1993 LCO


"Hace 50 años que los astrónomos especulan, desde el punto de vista teórico, con la existencia de unas supernovas excepcionalmente brillantes que han venido en denominarse supernovas por inestabilidad de pares", explica a Papel Rafael Bachiller, director del Observatorio Astronómico Nacional (IGN). Se trataría, en cierto modo, de una impostora porque, aunque parece una supernova y pierde unas cuantas masas solares tras la explosión, la estrella se recompone: "El proceso puede repetirse varias veces, ocasionándose explosiones sucesivas o 'pulsos'".

En opinión de Bachiller, "las nuevas observaciones de explosiones sucesivas en iPTF14hls parecen indicar que por fin estamos ante una auténtica supernova pulsante por inestabilidad de pares, pero convendría realizar estudios espectroscópicos antes de concluirlo con seguridad. En todo caso, estamos ante una estrella verdaderamente peculiar que muestra un comportamiento inusitado".

No obstante, Bachiller afirma que "la estrella no se librará de morir", pues "hay que tener en cuenta que en cada explosión, la supernova pulsante irá perdiendo un porcentaje apreciable de su masa". Llegado el momento, cuando su masa haya disminuido suficientemente, "la estrella acabará sus días con una explosión final que deberá ser prácticamente indistinguible de una explosión normal de supernova".

http://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/ciencia/2017/11/09/5a01fe46ca47410c618b4606.html
 
ASTRONOMÍA
Cita con el cielo
El encuentro de Venus y Júpiter

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VIDEO:http://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/ciencia/2017/11/13/5a09bd1b22601d4b0f8b4632.html


Este lunes es visible la conjunción de Venus y Júpiter, a una distancia aparente similar al radio aparente de la luna llena

El sábado 18 de noviembre tendrá lugar el novilunio: la Luna aparecerá como un finísimo filo iluminado en posiciones cercanas a Marte, Júpiter y Venus

Venus, Marte y luz cenicienta

Este lunes viene acompañado de la conjunción de Venus y Júpiter. Sus posiciones aparentes llegan a estar separadas una hora antes del amanecer por una distancia comparable al radio aparente de la Luna llena. En días sucesivos la separación entre los planetas irá aumentando, pero el fino filo de la Luna menguante acudirá a la cita para formar bellas estampas en la constelación de Virgo.

En estos días de noviembre es posible ver a Venus por el Este aproximadamente una hora antes del amanecer, esto es, a eso de las 7h30 de la mañana. Venus es el astro más brillante del cielo matutino, su distancia es ahora 1,6 veces más grande que la distancia Tierra-Sol. Pero la posición aparente de Venus va acercándose a la del Sol; de hecho, acabará en conjunción solar a principios del año próximo.

Por su lado, Júpiter llevaba unas semanas sin poder verse. En septiembre pudimos verlo en el crepúsculo, pero hundiéndose cada día más hacia el infierno solar para dejar de verse hacia final de ese mes. Pero hace unos días que el gigante gaseoso ha regresado a los cielos matinales.

Este lunes los dos planetas se encuentran muy próximos, a una distancia aparente de tan sólo un tercio de grado, esto es, menor que el diámetro de la Luna llena(que es de medio grado, en números redondos). De los dos astros, Venus es ahora el más brillante. Pero aunque parezcan próximos en el cielo, hay que tener en cuenta que la distancia de la Tierra a Júpiter es ahora 6,4 veces más grande que la distancia Tierra-Sol. Es decir, Júpiter está ahora cuatro veces más lejos de la Tierra que Venus.

Más alto sobre el horizonte se podrá divisar también a Marte, que se nos muestra ahora unas 200 veces menos brillante que Venus, y es que el planeta rojo se encuentra del otro lado del Sol, unas 2,3 veces más lejos que el Sol de la Tierra.

La Luna acude a la cita
El novilunio tendrá lugar el día 18, de forma que los días 15, 16 y 17 nuestro satélite aparecerá como un finísimo filo iluminado en posiciones muy cercanas a las de Marte, el día 15; y a las de Júpiter y Venus el día 17. El jueves 16 aparecerá en una posición intermedia entre Venus y Marte, próxima a la estrella Spica.

Estos días se dan las condiciones ideales para observar la luz cenicienta que ilumina la parte del disco lunar que no está directamente iluminada por el Sol. Este débil resplandor de color ceniza es debido a la luz solar que llega a la Luna después de haberse reflejado en la Tierra. Si el cielo está bien despejado, se trata de una de las imágenes celestes más bellas de las que podemos contemplar a simple vista.

(*) Rafael Bachiller es astrónomo y director del Observatorio Astronómico Nacional (IGN)
 
PLANETAS
Descubierto un nuevo planeta a 11 años luz que puede albergar vida
Se llama Ross 128 b y es el segundo planeta más templado y más cercano a la Tierra tras Próxima b
AGENCIAS
Madrid 15 NOV 2017 - 17:59 CET
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Recreación artística del planeta templado Ross 128 b M.KORNMESSER EFE


Un nuevo planeta, Ross 128 b, se acaba de sumar a la lista de candidatos en la búsqueda de indicios de vida más allá del Sistema Solar. El Observatorio Austral Europeo (ESO, por sus siglas en inglés) ha informado del descubrimiento de este nuevo planeta templado del tamaño de la Tierra a tan sólo 11 años luz de nuestro planeta, lo que lo convierte en el segundo planeta más templado y más cercano a la Tierra tras Próxima b. Además, Ross 128 b es el más cercano descubierto que orbita una estrella enana roja inactiva, Ross 128, en la constelación de Virgo, "lo que puede aumentar las probabilidades de que se trate de un planeta que, potencialmente, pudiera albergar vida", según ESO.

El equipo que ha realizado el descubrimiento ha utilizado un instrumento único en su clase, el cazador de planetas Harps de ESO, instalado en el Observatorio La Silla (Chile). Ross 128 b será un blanco perfecto para el Extremely Large Telescope (ELT) de ESO, que será capaz de buscar biomarcadores en su atmósfera. "Ross 128b está muy cerca, lo que nos permitirá verlo con un telescopio como el ELT, en construcción para 2025", explica a AFP Xavier Bonfils, astrónomo del Observatorio de Ciencia del Universo de Grenoble.

Este exoplaneta de baja masa orbita Ross 128 cada 9,9 días. Ross 128 es la estrella cercana "más tranquila" que alberga un exoplaneta templado de este tipo. Se espera que este mundo sea templado, con una temperatura superficial que también podría ser similar a la de la Tierra. "Este descubrimiento se basa en más de una década de seguimiento intensivo con el instrumento Harps, junto con reducción de datos y técnicas de análisis de última tecnología", explica el coautor del artículo, Nicola Astudillo-Defru, del Observatorio de Ginebra.

Pese a ser de las más comunes, las enanas rojas son uno de los tipos de estrella más frías y débiles del universo. Esto hace que sean muy buenos objetivos para la búsqueda de exoplanetas y por eso están siendo cada vez más estudiadas. Muchas estrellas enanas rojas, como Próxima Centauri, emiten llamaradas que, ocasionalmente, bañan de letal radiación ultravioleta y de rayos X a los planetas que las orbitan. Sin embargo, parece que Ross 128 es una estrella mucho más tranquila, de manera que sus planetas podrían ser la morada conocida más cercana para albergar vida.

Aunque está a 11 años luz —un año luz equivale a 9.460 millones de kilómetros— de la Tierra, Ross 128 se mueve hacia ella y se espera que se convierta en una vecina estelar más cercana en 79.000 años, un "parpadeo en términos cósmicos", según asegura la ESO, que destaca que "para entonces, Próxima b será destronado y Ross 128 b pasará a ser el exoplaneta más cercano a la Tierra".

Con los datos de Harps, el equipo descubrió que Ross 128 b orbita 20 veces más cerca de su estrella que la distancia a la que la Tierra orbita del Sol. A pesar de esta proximidad, el planeta recibe sólo 1,38 veces más radiación que la Tierra. Como resultado, se estima que la temperatura de equilibrio de Ross 128 b se encuentra entre -60 y 20 grados centígrados, debido a la naturaleza débil y fría de su pequeña estrella enana roja, que tiene poco más que la mitad de la temperatura superficial del Sol.

Mientras que los científicos involucrados en este descubrimiento consideran que Ross 128 b parece ser un planeta templado, sigue habiendo incertidumbre en cuanto a si se encuentra dentro, fuera, o en el umbral de la zona habitable, donde puede existir agua líquida en la superficie de un planeta. La zona habitable está definida por el rango de órbitas alrededor de una estrella, en la que un planeta posee la temperatura adecuada para que exista agua líquida en la superficie del planeta.

En la actualidad, los astrónomos están detectando cada vez más exoplanetas templados y, la próxima etapa, será estudiar con más detalle sus atmósferas, su composición y su química. Será de vital importancia la posible detección de la presencia de biomarcadores en las atmósferas de los exoplanetas más cercanos, incluyendo el oxígeno. De los miles de exoplanetas detectados hasta el momento, unos 50 se consideran potencialmente habitables.

https://elpais.com/elpais/2017/11/15/ciencia/1510744838_752963.html
 
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