Juicio al 'procés' - Referéndum en Cataluña — El conflicto catalán

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un mapa del sacro imperio romano germánico

guay

si quieres ponemos mapas de los reinos papales, Al landalus y dem´ñas pero no encuentro mucho sentido

ese mapa incluye austria y suiza por cierto, pero es que sigo sin ver a que viene a cuento
Pongamos el del reino de Cataluña.
Ya he explicado el motivo.
Año 1400.
 
El sacro imperio romano de occidente ca. 1400. España ya era una nación. Los que quieren darnos lecciones. Taifas alemanas.

vale ahora lo pillo...


te voy a hablar sin querer ser petulante, para esto no hace falta saber mucho, saber que en el año 1400 España NO era una nación es nivel ESO. españa existe como reino desde 1479. Desde que Fernando el Católico accedió al reino de Aragón, España NO existia en 1400 y recalco, es nivel ESO

vamos que menos preocuparse de Puigdemones y mas saberse la historia BÁSICA de España, la básica al menos leñe

Y por cierto y esto si que no es tan básico pero vale la pena recalcarlo, ese baritullo era el Imperio Sacro Romano germánico que SÍ era una nación dado que estaban todos bajo la regla del emperador que en aquella época era Carlos IV. El sacro Imperio era un reino federal, con reinos asociados como lo fue España tras e matrimonio de los reyes católicos hasta la llegada de Felipe V, y con él los Borbones, puesto que la casa de Hasburgo era una casa que favorecía los reinos federados. y Alemania como concepto ya existía, de hecho por algo Carlos I de España era Carlos V de Alemania, porque Alemania en su idioma original es "deutschland" cuya significado literal es "país de germanos (o alemanes) " y que es el núcleo grande del Imperio tras la escisión de Suiza y Austria. De hecho solo dejó de existir una Alemania como tal desde el siglo X hasta la actualidad durante algo más de 6 décadas en el siglo XIX, luego cuando se reunificó de nuevo fue cuando Austria y Suiza se escindieron definitivamente .

Alemania al ser un reino federal desde su concepción, con lo que ello siigfnifica, tuvo variaciones y divisiones durante su historia pero vamos que como nación reconocida pues desde la caída de Carlomagno.

PD (y aclaración) lo que hay es un problema de traducción, nosotros los llamamos "alemanes" que es la denominación de un conjunto de las tribus germánicas que invadieron el Imperio romano Alemania (los alamanos) en su modo original, luego se latinizó en "germanos" pero alemanes es Germanos, es lo mismo, y por tanto el sacro imperio germanico se puede traducir por el saco imperio alemán. Es lo mismo solo que en dos versiones diferentes. es decir en Inglés Alemania es Germany.Por tanto se da por hecho que el Imperio germano era el Imperio alemán solo que en otra traducción.
 
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Pongamos el del reino de Cataluña.
Ya he explicado el motivo.
Año 1400.
ay dios....

en serio, me duele leer que España existía en el año 1400, en serio. No es nada contra España en sí, sino con el nivel de historia básica que hay actualmente

venga

estudiaste en la LOGSE? al menos eso lo explicaría. España existe como tal desde que Fernando accedió al trono de Aragón en el año 1479, Isabel había accedido al de Castilla en el 1475. Cuando ambos, ya casados, accedieron a sus respectivos reinos se formó España.

Y con todo aun faltaba Granada que fue en 1492.
 
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y a tdoo esto, de las animaldas de este se han enterado hasta en Alemania

Periodista español amenaza con poner bombas en Alemania y la Policía bávara toma nota (VIDEOS)
Federico Jiménez Losantos estalla tras la puesta en libertad de Carles Puigdemont y amenaza con que 'en Baviera pueden empezar a estallar cervecerías'.
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VIRAL
viernes, 06 de abril de 2018 · 16:35
El periodista español Federico Jiménez Losantos, conocido por sus frecuentes salidas de tono, ha estallado esta mañana contra Alemania tras conocer la puesta en libertad del expresidente catalán Carles Puigdemont y que se haya descartado el delito de rebelión.

Losantos ha amenazado veladamente con que "el ratón al gato le puede hacer todo tipo de fechorías", para continuar más explícitamente: "En Baleares todas. En Baleares hay como 200.000 alemanes de rehenes". Finalmente, ha añadido que "en Baviera pueden empezar a estallar cervecerías". Ha acabado por preguntarse: "¿Usted que propone? ¿Una acción?", para contestarse a continuación: "Naturalmente".

En Twitter se ha armado un gran revuelo, y actualmente es tendencia en España, hasta tal punto que varios usuarios han avisado a la Policía de Munich de esas amenazas, como en el siguiente mensaje, al que la Policía ha contestado: "Gracias por el aviso, conocemos el video".

Estas declaraciones han sido hechas en el programa 'La mañana de Federico', de la emisora EsRadio. En él, Losantos denomina al juez alemán de "infecto" y su actitud de "racista, típico del racismo protestante contra los países católicos, contra los piojosos países del sur". Además, lo define como "un miserable, un asqueroso racista juez alemán".

En otro momento, que se puede ver en un video a partir del minuto 2:35, llama al juez alemán "juez nazi rojo, me da igual si es comunista, nazi, o simplemente imbécil o está pagado por los separatistas". Su conclusión es que España debe abandonar la Unión Europea (UE).

No es la primera vez que este periodista genera polémica por sus declaraciones, pues salidas de tono de este cariz son habituales en él, por lo que en las redes sociales se está generando cierta indignación por la comparación con los tuiteros y raperos que han sido imputados de oficio por la Fiscalía y acusados de enaltecimiento del terrorismo.

Fuente: Actualidad RT

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https://www.focus.de/politik/auslan...d-nach-puigdemont-freilassung_id_8724592.html


No hay extradición para la rebelión"Ten 200,000 rehenes alemanes": el periodista español amenaza a Alemania después del lanzamiento de Puigdemont

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  • El líder separatista catalán Carles Puigdemont está prófugo. El viernes, pudo abandonar la prisión de Neumünster con un pago de 75,000 euros y bajo condiciones adicionales. Pero la decisión del Tribunal Regional Superior en Schleswig-Holstein se encuentra en España sobre la incomprensión.

    Federico Losantos, un influyente periodista de radio de Madrid, atacó duramente a la judicatura alemana. En un programa de radio matutino, Losantos amenazó. "En las Islas Baleares tenemos 200,000 rehenes alemanes. En Baviera, las cervecerías pueden explotar. ¡Propongo una acción! ". También acusó a la justicia del racismo:" La decisión es típica del racismo protestante contra los países católicos ".

    Losantos, que fue secuestrado por terroristas catalanes en 1981, es considerado un opositor declarado del movimiento separatista. Incluso el gobierno central de Madrid no estaba entusiasmado con la decisión de los jueces. El ministro de Justicia, Rafael Catalá, comentó el jueves por la tarde que uno no conoce el veredicto en detalle, pero siempre debe respetar todas las decisiones judiciales. "Algunos nos quieren más, otros menos".
 
Las calles de Madrid y de toda España pidiendo la libertad de los presos y los balcones llenos de lazos amarillos y estrelladas
En todad Europa multitudes antes las embajadas españolas pidiendo la libertad de los golpistas ay que no
 
EDITORIAL
‘Procés’ ilegal y violento
El tribunal alemán ni absuelve a Puigdemont ni legitima el secesionismo
la decisión del Tribunal de Schleswig-Holstein de inadmitir la petición de entrega a España del expresident de la Generalitat Carles Puigdemont por el delito de rebelión no equivale, como han pretendido algunos, a un veredicto incriminatorio sobre la democracia española, su Estado de derecho ni sus instituciones judiciales. Tampoco puede ser leída como una absolución, total o parcial, de los líderes independentistas actualmente encausados por el Tribunal Supremo y, por supuesto, menos aún como una legitimación de las gravísimas actuaciones por ellos desarrolladas en los funestos meses de septiembre y octubre del año pasado.

Esa lectura no es posible porque, como el propio tribunal alemán ha explicado, queda acreditado no solo que hubo violencia, sino que “los actos violentos” del 1-O “se pueden imputar al acusado en cuanto iniciador y defensor de la celebración del referéndum”. Cuestión distinta es que el tribunal no aprecie que el grado de violencia atribuible a Puigdemont fuese tan abrumador como para obligar al Gobierno a “capitular” ante sus exigencias, que sería el requisito de gravedad que en Alemania convertiría el delito español de rebelión en el alemán de alta traición y que permitiría franquear así la euroentrega. En consecuencia, el tribunal ha estimado que los delitos no son equivalentes, como exige la Decisión Marco de 2002 que regula la euroorden, no que el delito no existiera en España de acuerdo con la legislación española.

Tampoco valida el Tribunal los argumentos de Puigdemont respecto a la comisión de “persecución política” en España, dejando así al descubierto la falsedad de la afirmación —que éste volvió a repetir a la salida de la prisión— sobre la existencia de presos políticos en España. No hay por tanto sustento en los intentos de Puigdemont y los suyos de autoabsolverse valiéndose del pronunciamiento del tribunal alemán, ni tampoco queda expedita la vía para un retorno de Puigdemont a la Presidencia de la Generalitat.

Es cierto que la causa en Tribunal Supremo queda en una posición difícil, pero no imposible, pues el juez Llarena tiene ante sí varias vías de actuación, incluyendo el planteamiento de una cuestión prejudicial ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea que permita verificar si los jueces alemanes han aplicado correctamente el mecanismo de la euroorden.

Pero más allá del curso judicial que siga el proceso, ni Puigdemont ni los independentistas van a lograr cambiar los hechos que caracterizan su gravísimo proceder, su deslealtad a la democracia, a la Constitución española, a las instituciones del autogobierno catalán y, en definitiva, a los ciudadanos de este país, cuyos derechos políticos han lesionado de forma deliberada en su empeño de promover un proceso de secesión ilegal y de ruptura de nuestro país.

Esos hechos son claros y están a la vista de todos. Incluyeron derogar la Constitución y el Estatut; elevar unas leyes sediciosas votadas por medio Parlament a sustitutos de esas normas supremas; y hacerlo desobedeciendo a los tribunales y sin la concurrencia de mayoría cualificada, y por métodos que privaron a la oposición (que representa a más de la mitad de los catalanes) de sus funciones representativas y de control. Todo ello constituyó un golpe de Estado que no solo merece condena política sino reprobación judicial aunque corresponda a los tribunales establecer los tipos de aplicación concretos.

Independientemente de su calificación judicial, el procés tuvo un carácter violento: hubo usos indebidos y exorbitantes de la fuerza: hubo obstrucción física de la Justicia; destrucción de vehículos policiales; ocupación ilegal de carreteras; obstaculización de vías férreas con peligro para la integridad de los propios actuantes; intimidaciones y escraches contra personas, partidos y asociaciones considerados rivales o enemigos; violencia sobre objetos callejeros; y actuaciones del Govern y de la policía autonómica tendentes a facilitar algunos de esos abusos. Y sobre todo, fue un proceso presidido por la coacción, pues se violó la ley de forma sistemática para intentar imponer a la ciudadanía, desde la calle y desde las instituciones, una secesión unilateral, ilegal y obligatoria.

El secesionismo catalán pretendió situar al Estado ante el dilema de desbordar al Estado y forzarle a allanarse ante una independencia impuesta de forma ilegal; o bien emprender una actuación extrema cuyos perfiles sirviesen para autoinflingirse descrédito y un alto coste reputacional. Como carecía del apoyo de la mayoría social, el movimiento independentista pretendió imponerse por la vía de los hechos consumados. Una vía que, pese a algunas autocríticas, todavía no ha desechado de forma clara ni rotunda.

Ni el tribunal alemán ni la propaganda independentista pueden cambiar esos hechos, que son ya parte de la historia de los españoles y su lucha por mantener la democracia. La democracia española ha sido sometida a una dura prueba y ha estado en grave peligro. Pero su Estado de derecho y sus instituciones judiciales funcionan.

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