Al menos Pelayo ha pasado por una escuela de renombre y no es el hijo de ni el sobrino de nadie conocido. A mi me cae bien desde que lei una entrevista donde contaba lo mal que lo paso en un colegio religioso de Oviedo y lo
ahogado que se sentia hasta que por fin se fue a la escuela de disenyo de la ciudad y de ahi a Londres. Now, the sky is the limit...
Bla, bla, bla, bla, el problema de esta gente es que no es nada creíble, además me parece fatal ese argumento según el cual, los demás mortales somos unos catetos que no le comprendemos y tiene que entrar en el mundo del diseño e irse a Londres para liberarse. En fin, ya sabemos qué hay en ese mundo, efectivamente un chico joven que lleva la vida que él lleva lo tenía que pasar muy mal en el colegio, sea religioso o no, y seguramente en su casa también.