Es una promesa. O una penitencia? . Un día Harry se levantó inspirado y dijo aquello de a dios pongo por testigo que nunca volveré a comprar zapatos hasta que tenga barco propio como el príncipe de Mónaco y así poder dejar de usar esos inventos diabólicos y contaminantes que son los aviones. No comprando zapatos y vendiendo su colección de coches, ya falta menos... Ánimo, Harry!Queridas Cotis, corramos a sacar una moneda de nuestra cartera para que Petas se compre unos zapatos nuevos, que esos estilos homeless ya dan pena ajena!!!
Ver el archivo adjunto 1176059