Lady Louise no se ciñe a los exigentes y absurdos cánones de belleza actuales, pero tiene una dulzura y una naturalidad que ahora la hacen ver muy bonita. Y, personalmente, me encanta ver a las adolescentes que no están obsesionadas con parecer clones de las Kardashian, se agradece y mucho y me parecen más bonitas las chicas que adoptan un estilo propio alejado de obsesiones de influencers.