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Mi locuela Abigail:
Tu Roger, al conocerte, pensó, con razón, que habías aparecido en su vida para arruinársela, jajajaja....
Ya empezasteis mal cuando con toda tu cara llegas a los grandes almacenes de objetos deportivos donde él trabaja quitándole, con toda tu cara, su reservada plaza de aparcamiento que le pertenece como trabajador, y da igual que él intente hacerte entender que no puedes aparcar ahí, tu dejas el coche ahí y para colmo a él se le monta un cisco con su coche con otro conductor ¡porque por tu culpa no había podido aparcar en su sitio! y mientras él está discutiendo con el otro conductor ¡ahí dejas tú tu coche en su sitio y entras en los grandes almacenes...
Pobre, que hasta intenta desaparcar tu coche metiéndose dentro pero como es tan pequeño y él tan grande se queda atascado y un guardia cree que está intentando robarlo ¡que apuro!
El pobre Roger, ya nerviosísimo por la bronca del aparcamiento habiendo resuelto lo de su coche cómo ha podido, entra en su curro, donde él trabaja como experto en objetos de pesca -que hasta ha escrito un libro sobre la materia - empieza a atender a un cliente fijo, un coronel fan de la pesca, pero le dicen que le busca el jefe... Roger piensa que aprovechará para presentar la queja por lo del aparcamiento del coche ¡y te encuentra con tu amiga en el despacho del jefe!
Si las miradas matasen, Abigail, jajajaja.... y empieza a expresarte su descontento ante el jefe cuando este le interrumpe presentándote como la nueva directora publicitaria de un parque natural donde organizan un concurso de pesca y has tenido la gran idea de proponer a su jefe inscribir al experto Roger en el más prestigioso concurso de pesca para hacer propaganda a los grandes almacenes a cambio del sponsor de éstos...
Pese a ser experto en pesca, Roger se pone muy nervioso poniendo mil excusas, pero tu y tu amiga no le dejais ni meter baza, el jefe le ordena que tiene que concursar y Roger tiene que salir con vosotras literalmente queriendo estrangularos, sobre todo a tí...
Porque tiene que confesaros ¡que no sabe pescar, no ha pescado en su vida!
Y ahora se va a descubrir el fraude de su fama de pescador experto y perderá su trabajo... ¡y todo porque tú le has dado la idea al jefe!
Tu te quedas asombrada y él te explica que no hace falta practicar para aprender lo que son los aparejos, las técnicas de pesca, que él leyó muchos libros para escribir el suyo, y que sus consejos ayudan a sus clientes, asi que eso basta en su trabajo de vendedor, pero ahora se va a descubrir que de practica nada de nada... ¡Como te odia, Abigail, va a perder su trabajo!
¡Con la vida tan tranquila que él llevaba, su trabajo, su novia...porque tiene novia, esa noticia en el fondo te fastidia más que lo de que no sepa pescar, porque tú si que has tenido planes de pescarlo desde que le vistes protestandote por haberle quitado la plaza de aparcamiento!
Tu amiga es la hija del director del parque natural y tú decidís que puesto que le habeis metido en el lio, teneís el deber moral de ayudarle, al fin y al cabo, lo importante es la publicidad, no que él sepa pescar o no, asi que os lo llevais con todo el equipamiento de la tienda que se agencia él, la mayoria totalmente prescindible, para enseñarle a pescar a toda pastilla...
Y encima tiene que fingir que es experto en pesca ante el guía indio del parque, que tiene de indio lo que él de experto en pesca... y vosotras llegando hasta su campamento a escondidas buceando para darle las lecciones clandestinas...
Y mira que vosotras poneís todo de vuestra parte, pero es que le basta meterse en un rio para hundirse en un socavón, o le aparece un oso detrás... ¡él, que es ciudad, para disimular tiene que dormir hasta en la tienda de campaña que a duras penas sabe montar...! Ahi lo teneís al pobre con el pliego de instrucciones...
El resultado para Roger en sus ensayos clandestinos va a terminar siempre así:
Eso sí, consigue pescar, más que nada porque los peces se le cuelan dentro del buzo de pescador, pero mira, lo importante es que pesque ¿verdad, Abigail?
¡Como te odia, Abigail! Porque él, por pura desesperación, está dispuesto a tirar la caña y despedirse, pero tú no le dejas, con lo guapo que es, lo culpable que te sientes por haberle metido en ese lío y... lo mucho que te gusta!
Empieza el concurso y, sin querer, empieza a traer los peces mas gordos, va a ganar el concurso encima mosqueando al mejor cliente de los almacenes, el coronel pescador...
Llega un momento en que Roger decide que no, que no puede hacer ese fraude a sus clientes, pero si ahora se raja perderá su empleo, asi que tu le das la solución para que tenga excusa para no participar ¡que se ha roto el brazo! Y tú misma, que eres mucho más lanzada que él para cualquier cosa, aunque no has puesto una escayola en tu vida, se la haces...
¡Esa postura del brazo, Abigail, que cuando se seque la escayola se le va a quedar en postura eterna de estar cantado la Internacional!
Y ese problemón vais a tener, el pobre Roger con el brazo así, que pasa delante del coronel y el hombre se emociona al ver pasar haciéndole tan patriótico saludo marcial, jajajaja!
Roger te quiere matar y tu emprendes la tarea de quitarle la escayola "a tu manera"... ¡el pobre se desmaya del miedo a que le cortes la yugular!
Y para colmo, aparece su novia y cuando no le encuentra con tu amiga intentando liberarle del saco de dormir... o con su corbata enganchada a la cremallera del vestido abierto de tu amiga, que entre tú y la otra...¡pobre Roger! Ala, ya se ha quedado sin novia, vas avanzano en tu objetivo, Abigail...
... te encuentra a tí en su cabaña ¡en su cama! pero todo porque tu te has quedado roque allí y él no ha podido echarte... ¡y la novia le planta, porque no le cree al intentar él explicarle la realidad!
¡Se las haces pasar canutas! Como él dice :"O me enamoro de ella o la mato". No hay alternativa, contigo, jajajaja...
Pero él sigue pescando sin querer las mejores piezas y su conciencia le obliga a confesar para no ganar un trofeo que no merece...asi que el jefe le despide, y él se va todo desesperado a acampar solo ¡ha perdido la novia, el trabajo...! Todo por tu culpa, Abigail, por haberle apuntado al concurso...
Asi que tu vas a su campamento a intentar que te perdone... te sientes culpable ¡lógico! Empieza a llover a torrentes y tu te cuelas en su tienda de campaña con espacio solo para uno, muy apretadita a él... y le empiezas a pedir perdón, que tu no querías meterle en ese lío, que te perdone... pero él ya te mira dándote por imposible, reconociéndose a sí mismo que eres el terremoto de su vida, que ha optado por "me enamoro" y te hace callar con el mayor beso más apasionado que te hayan dado nunca, está dispuesto a ahogarse contigo porque ya se aburriría sin tí...
Y justo entonces aparece el jefe en una lanza gritándole que le readmite porque el coronel cliente se ha tomado fatal que haya despedido a Roger ¡no le cree que no sepa pescar y aunque así sea le da igual porque le ha enseñado mucho con lo que sabe en teoria y es un gran chico!
Pero da igual, vosotros no le escuchaís, estaís demasiado ocupados besándoos mientras la corriente se lleva vuestra tienda rio abajo... es que, contigo, Abigail, junto al certificado de matrimonio va a tener que suscribir un seguro de vida, jajajaja....
¡Pero conseguistes enamorarle con las perrerías que le hacías, lo tuyo tiene mérito, Abigail!
¡Me morí de risa, me dió un ataque de hipo, por poco acabas con el pobre Roger, Abigail!, y encima le pescas, nunca mejor dicho, claro que tu método para pescar un hombre no creo que funcionase con todas...
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