María del Valle. ByMariadelValle.

Hace años me atendió una enfermera en el hospital que estaba super super super morena. Ya rondaría la mujer los 60 años, o eso parecía por que os juro que parecía que en lugar de piel tenía cuero. Me quedé super impresionada xq nunca había visto una piel así. Es muy bonito estar morenita pero viendo las consecuencias que tiene a largo plazo… mejor protegerse bien y evitar tener una piel con aspecto tan avejentado.
Yo creo que salvo poquísimas excepciones, ya no vemos a gente así de carbonizada. La gente que pasamos los 40 nos ponemos protección cada día y si vamos a la playa ya no te digo. Lo elegante es un toque de buen color o un bronceado gradual. Yo observo mucho eso y veo que la gente en general se cuida mucho más la piel precisamente para no tener esas arrugas, pero lo de la cateta esa es puro daño solar y una genética de mierda.
 
Yo lo de la piel de maría tampoco sé si será por el sol, porque el sol a ella la da poquito…
Antes la semana que se iba a Ibiza y ya, pero ahora ni eso…
 
Yo lo de la piel de maría tampoco sé si será por el sol, porque el sol a ella la da poquito…
Antes la semana que se iba a Ibiza y ya, pero ahora ni eso…
Una semana en la que se achicharraba hasta ponerse roja como un tomate y seguir tomando el sol sobre piel dañada… si a eso le sumas que es obvio que tiene mala piel por genética, pues ahí tienes esas arrugas a los 40, color cetrino, flácidez y granos.
 
Yo creo que lo de ella es una combinación de varios factores:
1. No tener quizás la mejor genética del mundo.
2. El consumo bajo de agua (muchas veces con las comidas sólo ha sacado sunny, cola…).
3. El achicharrarse a tope todo lo que da intentando ser Julio Iglesias cuando ella no coge ese tono, si no que se pone más bien “rosadita”. De ahí esos atracones a sol y quemado sobre quemado.
4. Cuidado mínimo de la piel: mucho autobronceador pero prácticamente nada de hidratación, exfoliación y protección.

De hecho, con la terraza actual me juego un brazo y no lo pierdo a que se va a pegar los días cual lagartija con poca o nada protección solar, pensando que así se va a poner más morena, y el tono que ella quisiera por su color natural de piel y a lo que tiende ella cuando le da el sol es cuasi imposible de llegar.​
 
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