La Reina celebró una audiencia con el Secretario de Servicios de Defensa entrante y su predecesor. Febrero 16, 2022
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Siempre pensé que la vería cumplir los 100 años pero desde que murió Philip el bajón físico de la Queen ha sido tremendo. Se nos apaga lentamente. A ver cuanto nos dura pero espero que por lo menos la podamos despedir a lo grande y no en medio de esta pandemia como pasó con Philip, sin público ninguno.
Artículo comentando el entorno de la sala en ocasión de esta visita.
royalcentral.co.uk
Desorden, bombones y bisnietos: el aparador de la Reina añade un toque de normalidad a una tumultuosa semana real
Por Lydia Starbuck
18 de febrero de 2022
Ha sido una semana controvertida para la Casa de Windsor, que ha pasado de una crisis a otra en tan solo unos días. Como era de esperar, a pesar de todo, la Reina hizo lo que siempre hace: mantuvo la calma y siguió adelante. Apenas unos días después de que el Príncipe Andrés llegara a un acuerdo extrajudicial en un caso que lo vio acusado de agresión sexual y el Príncipe Carlos viera a su fundación bajo investigación policial por reclamos de dinero en efectivo por honores, Su Majestad celebró audiencias en el Castillo de Windsor. Los asuntos en el seno de la Monarquía transcurrieron como de costumbre, pero hubo algunos toques de fondo muy personales que aportaron un aire de normalidad muy necesitado por la realeza en una semana en la que el privilegio se convirtió en un problema.
La Reina se enfrentó al mundo frente a un aparador que estaba lleno a rebosar. Y eso toca la fibra sensible de muchos. Al igual que los artículos expuestos. Fotos familiares, demasiados adornos y mucho chocolate, más o menos lo mismo que en muchas casas.
Primero hablemos de los dulces. La comida más reconfortante está lista en el Oak Room en el Castillo de Windsor en este momento. Se exhibieron al menos tres cajas bastante grandes de chocolate cuando la Reina dio la bienvenida a los Secretarios de Servicios de Defensa saliente y entrante. No está claro si fueron regalos del Jubileo o simplemente un gran montón de felicidad sacada de la despensa a medida que se acumulaban las dificultades. Pero cualquier persona golosa en Windsor estará más que feliz de poder elegir entre crema de menta, trufas de champán y una selección de delicias de chocolate amargo.
Luego están los adornos. Siempre hay mucho en exhibición en las habitaciones de The Queen y, como suele ser el caso, hay un enfoque distintivo en los animales que significan mucho para Su Majestad. Un caballo bastante impresionante ocupó el centro del escenario de este aparador abarrotado, mientras que una mesa, más atrás, estaba llena de figuritas.
Quizás las piezas más conmovedoras fueron las fotos. Una imagen nunca antes vista de La Reina con sus bisnietos, que apenas se veía detrás de ella. En ella, Su Majestad parece estar abrazando a su bisnieto más joven, Lucas Tindall. El príncipe George está detrás de ella, mientras que el príncipe Louis, más parecido a su hermano mayor que nunca, está situado al final del sofá. Lady Louise, la nieta menor de la Monarca, se eleva sobre sus parientes más jóvenes en la instantánea que se cree que fue tomada en el verano de 2021 en Balmoral.
Se encuentra junto a la ahora famosa foto, tomada por la duquesa de Cambridge, de la reina y el duque de Edimburgo con muchos de sus bisnietos en 2018. Fue compartida por la familia real en los días posteriores a la muerte del príncipe Felipe. Colocados juntos en el aparador del Castillo de Windsor en la última aparición pública de la Reina, subrayaron todo lo que se había perdido.
Pero en medio de este tiempo tumultuoso, quizás hubo un indicio de esperanza para el futuro. Ocupando un lugar central en el aparador había un cuenco de jacintos, que acababan de cobrar vida. La promesa de que las flores broten es siempre una señal de que vendrán cosas mejores. La Reina debe estar esperando que la primavera traiga tiempos más fáciles para la dinastía que ha trabajado toda su vida para sostener.
Clutter, chocolates and the great grandkids – The Queen’s sideboard adds a touch of normality to a tumultuous royal week
It’s been a controversial week for the House of Windsor which has pivoted from one crisis to another in the space of just a few days. Unsurprisingly, through it all, The Queen did what she al…
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Por Lydia Starbuck
18 de febrero de 2022
Ha sido una semana controvertida para la Casa de Windsor, que ha pasado de una crisis a otra en tan solo unos días. Como era de esperar, a pesar de todo, la Reina hizo lo que siempre hace: mantuvo la calma y siguió adelante. Apenas unos días después de que el Príncipe Andrés llegara a un acuerdo extrajudicial en un caso que lo vio acusado de agresión sexual y el Príncipe Carlos viera a su fundación bajo investigación policial por reclamos de dinero en efectivo por honores, Su Majestad celebró audiencias en el Castillo de Windsor. Los asuntos en el seno de la Monarquía transcurrieron como de costumbre, pero hubo algunos toques de fondo muy personales que aportaron un aire de normalidad muy necesitado por la realeza en una semana en la que el privilegio se convirtió en un problema.
La Reina se enfrentó al mundo frente a un aparador que estaba lleno a rebosar. Y eso toca la fibra sensible de muchos. Al igual que los artículos expuestos. Fotos familiares, demasiados adornos y mucho chocolate, más o menos lo mismo que en muchas casas.
Primero hablemos de los dulces. La comida más reconfortante está lista en el Oak Room en el Castillo de Windsor en este momento. Se exhibieron al menos tres cajas bastante grandes de chocolate cuando la Reina dio la bienvenida a los Secretarios de Servicios de Defensa saliente y entrante. No está claro si fueron regalos del Jubileo o simplemente un gran montón de felicidad sacada de la despensa a medida que se acumulaban las dificultades. Pero cualquier persona golosa en Windsor estará más que feliz de poder elegir entre crema de menta, trufas de champán y una selección de delicias de chocolate amargo.
Luego están los adornos. Siempre hay mucho en exhibición en las habitaciones de The Queen y, como suele ser el caso, hay un enfoque distintivo en los animales que significan mucho para Su Majestad. Un caballo bastante impresionante ocupó el centro del escenario de este aparador abarrotado, mientras que una mesa, más atrás, estaba llena de figuritas.
Quizás las piezas más conmovedoras fueron las fotos. Una imagen nunca antes vista de La Reina con sus bisnietos, que apenas se veía detrás de ella. En ella, Su Majestad parece estar abrazando a su bisnieto más joven, Lucas Tindall. El príncipe George está detrás de ella, mientras que el príncipe Louis, más parecido a su hermano mayor que nunca, está situado al final del sofá. Lady Louise, la nieta menor de la Monarca, se eleva sobre sus parientes más jóvenes en la instantánea que se cree que fue tomada en el verano de 2021 en Balmoral.
Se encuentra junto a la ahora famosa foto, tomada por la duquesa de Cambridge, de la reina y el duque de Edimburgo con muchos de sus bisnietos en 2018. Fue compartida por la familia real en los días posteriores a la muerte del príncipe Felipe. Colocados juntos en el aparador del Castillo de Windsor en la última aparición pública de la Reina, subrayaron todo lo que se había perdido.
Pero en medio de este tiempo tumultuoso, quizás hubo un indicio de esperanza para el futuro. Ocupando un lugar central en el aparador había un cuenco de jacintos, que acababan de cobrar vida. La promesa de que las flores broten es siempre una señal de que vendrán cosas mejores. La Reina debe estar esperando que la primavera traiga tiempos más fáciles para la dinastía que ha trabajado toda su vida para sostener.