Sus hijos, el agua y la natación, los niños...y vemos a una Princesa feliz, distendida, encantadora.
Se la ve muy bien.
Claro..está en "su elemento"
Las próximas Galas del Principado debieran ser en el mar, con el agua a las rodillas. Vestida de gran gala y con tiara.
Se la vería encantada de la vida.
Seguramente Albert II lo consentiría y sus hermanas asistirían sin poner objeciones.
Estefanía porque se divertiría mucho y Carolina porque no pierde el glamour ni debajo del agua.