A mí me ha pasado eso, de detestar a alguien muy bueno sin motivo, y al revés. Águilé me daba yuyu.Luis Aguilé. Le tenía una tirria que no podía verlo. Años después descubrí que era muy buena persona.
Recuerdo a Mayra Gómez Kemp y a Isabel Tenaille, y de las revistas a Lola y la Pantoja. Y mi hora de ir a la cama era cuando sonaba la sintonía de La Clave. Me da miedo todavía hoy porque mi madre me dejó ver Frankenstein muy pequeña. Mi madre es una killer.