El primer gran amor del Principe Rainiero III de Mónaco NO fue Grace kelly: la trágica historia de la actriz francesa a la que abandonó para casarse c

Registrado
3 Ago 2011
Mensajes
1.354
Calificaciones
1.467
https://www.mujerhoy.com/celebritie...cal-tragedia-abandono-20210917072300-nt.html#





El primer gran amor del Principe Rainiero III de Mónaco NO fue Grace kelly: la trágica historia de la actriz francesa a la que abandonó para casarse con una estrella de Hollywood​

Una actriz cuya carrera ascendía enamoró locamente a Rainiero III de Mónaco, cuando todavía no había ascendido al trono. ¿Por qué la dejó por otra actriz? La familia real quería que los focos se fijaran en ella para reactivar la economía del principado.​

El primer amor de Rainiero fue también el de una actriz, la francesa Gisèle Pascal. Pincha para ver la relación de Grace Kelly con sus hijos Estefanía, Alberto y Carolina de Mónaco: dramas, secretos y muchos problemas./getty images
El primer amor de Rainiero III fue también el de una actriz, la francesa Gisèle Pascal. Pincha para ver la relación de Grace Kelly con sus hijos los príncipes Estefanía, Alberto y Carolina de Mónaco: dramas, secretos y muchos problemas. / GETTY IMAGES
ELENA CASTELLÓViernes, 17 septiembre 2021, 10:48
Grace Kelly era una deslumbrante estrella de cine y sus idilios, reales o no, llenaron páginas y páginas de la prensa. La vida amorosa del príncipe Rainiero III, antes de su matrimonio, por el contrario, fue siempre discreta. Pero, aunque ya no se recuerde, existió. Y ese primer amor fue también el de una actriz, la francesa Gisèle Pascal. Antes ella había caído bajo el hechizo de Yves Montand. Pero Gisèle acababa de comprarse una propiedad en Saint- Jean Cap-Ferrat, en la costa azul, justo al lado de la casa de verano de Rainiero III, que entonces, 1947, todavía no había subido al trono.

Inmediatamente la pareja salta a las páginas de prensa y hace las delicias de los amantes de los chismes reales. Se aman y se esconden para huir de los fotógrafos. Son felices. Su relación duró seis años. Poco después de que el príncipe Rainiero III sucediera a su abuelo Luis II en el trono del Principado, en 1949, se plantea la cuestión del matrimonio. Y la familia real no quiere que la actriz se convierta en su esposa.
En 1952, el periódico francés «Le Monde» escribió que «el abogado de la Corona habría expresado el deseo de que el príncipe Rainiero III no se casara con la señora Gisèle Pascal». Hija de comerciantes italianos de flores, plebeya, su perfil no es el de una princesa. La relación se termina al año siguiente. Oficialmente, no hay razones, pero extraoficialmente, se esgrime la supuesta esterilidad de la actriz como causa. Algo inconcebible cuando el Príncipe no tiene heredero. El tiempo demostrará, sin embargo, que ese diagnóstico es falso. Un año después de la ruptura, Gisèle Pascal inicia un idilio con Gary Cooper, que acababa de ganar su segundo Oscar. Se conocen en Cannes, en 1953. Pero su romance es corto. Es finalmente con el actor Raymond Pellegrin, un amor de juventud, con quien se casa el 8 de octubre de 1955.
Nacida el 17 de septiembre de 1921 en Cannes, Gisèle Pascal comienza en 1941 en el teatro con el director y actor Claude Dauphin. Debutó con un papel en «La vida bohemia», en 1942, y siguió en «Lunegarde » en 1944. En los años siguientes, trabaja con los grandes del cine francés del momento, Yves y Marc Allégret, Sacha Guitry o Raoul André... Pero Gisèle Pascal se retiró del cine en los años sesenta, para disfrutar de su marido y su hija Pascale. Murió en 2007, en Nîmes, a la edad de 83 años. Ocho meses más tarde, moría su esposo, Raymond Pellegrin.

Pero, ¿cómo es posible que se considerara a una actriz no adecuada para ocupar el trono junto a Rainiero y, poco después, el Príncipe se prometiera con una estrella de Hollywood, con un largo historial de amantes? La clave puede estar en el multimillonrio naviero Aristóteles Onassis, que posee la mayoría de las acciones de la Société des Bains de Mer, la sociedad que agrupa hoteles y clubes de playa en Montecarlo.



VÍDEO. Grace Kelly, así fue la relación con sus hijos
El objetivo del matrimonio de Rainiero no es preservar el buen nombre de la familia real, sino despertar un principado dormido y casi arruinado. ¿Cómo devolver a Mónaco todo su lustre para que la «jet set» vuelva a llenar sus casinos? Hay que buscar a la consorte perfecta, sea o no plebeya, para propulsar a Mónaco bajo los focos, igual que ocurrió con Rita Hayworth y el Aga Khan o con Soraya y el Sha de Irán. Debe ser más «glamourosa» que esa actriz francesa. Tras la ruptura, comienza un auténtico «casting». ¿Margarita de Inglaterra? ¿ Lee Bouvier, la hermana de Jacqueline Kennedy? ¿Marilyn Monroe? ¿Eva-Marie Saint, Natalie Wood? El padre Tucker, irlandés, le ayuda desde Filadelfia. La lista de posibles aspirantes es larga, pero ninguna encaja del todo. Y en esa lista no está sin embargo Grace Kelly.
Entonces llega el festival de Cannes de 1955 y un reportaje sobre la visita de Grace Kelly al Príncipe monegasco. En ese momento, la actriz tiene una relación con el actor francés Jean-Pierre Aumont. Pero cumple los requisitos: es bella, refinada, muy conocida y proviene de una buena familia de Filadelfia. Además, lo que es más importante, accede. El más contento el día del encuentro fue Onassis. El matrimonio llenaba un trono y, además, era un buen negocio
 

Temas Similares

Respuestas
5
Visitas
423
Back