Los creadores de Sálvame se inspiraron en el Circus Freaks Show de finales del siglo XIX. Esta versión siglo XXI ha mejorado en lo freak: una mezcla de pura mitomanía analfabeta, con aires de dismorfofobia, orgullo de conducta sexual compulsiva y adicción al trastorno explosivo intermitente. Pero los del circus original se movían mucho mejor!!