Ceremonia de entronización del Emperador Naruhito. Octubre 22, 2019

ENTRONIZACIÓN DE NARUHITO
Mary de Dinamarca y Matilde de Bélgica y su momento 'twin' en Japón
Reina y princesa se han decantado por el vestido capa, una apuesta segura que la amiga de ambas, la reina Máxima, puso de moda en su propia investidura en abril de 2013




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Federico y Mary de Dinamarca, en Japón. (Reuters)



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NÚRIA TIBURCIO
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MARY DE DINAMARCA
MATHILDE DE BÉLGICA
JAPÓN

22/10/2019



La ceremonia de entronización de Naruhito de Japón nos ha permitido vivir un momento royal sin igual: el de varias reinas y princesas europeas juntas y, además, luciendo sus mejores galas. Mientras que Letizia ha apostado por un floreado look andaluz, Victoria de Suecia ha sido más discreta con un diseño azul Klein de Escada y Máxima ha repetido vestido de Natan. Tres estilos diferentes los suyos, todo lo contrario a lo que ha sucedido con Mary de Dinamarca y Matilde de Bélgica.

Reina y princesa se han decantado por el vestido capa, una apuesta segura que la amiga de ambas, la reina Máxima, puso de moda en la investidura del rey Guillermo Alejandro en abril de 2013. Y es que son muchas las royals que, desde entonces, han apostado por este tipo de vestido, entre ellas Letizia, que guarda en su armario un diseño de Stella McCartney rojo. Coincidencia o no, Mary y Matilde han querido reversionar a la argentina; eso sí, cada una siguiendo su estilo, sobre todo en cuanto a la elección de complementos y joyas, pero viviendo un auténtico momento 'twin'

La princesa danesa ha optado por un diseño gris liso de manga corta y capa desde los hombros. Ha dado un toque de color a su look con un tocado platillo con una flor en color burdeos, a juego con la impresionante gargantilla de diamantes y rubíes, que forma parte de la parure que la reina Ingrid, abuela de Federico, dejó en testamento para la futura mujer de su nieto. Luciendo únicamente la banda de la Orden del Elefante, la más importante de Dinamarca, y la Family Order, Mary ha dado, de nuevo, una lección de estilo.




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Por su parte, la reina Matilde ha elegido el color rosa palo con un diseño ribeteado en brillantescuya capa va sobre los hombros y. Lo ha combinado con una cartera de mano y un favorecedor pillbox a juego. Como únicas joyas, llevaba unos pendientes de diamantes de los que colgaban perlas. En su caso, lució la banda de la orden japonesa de la Preciosa Corona, la misma que Letizia y Máxima.



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ENTRONIZACIÓN DE NARUHITO
El look de Máxima en Japón: vestido reciclado y excesivo tocado (y hundido)
La reina de Holanda ha optado por el reciclaje para la entronización de Naruhito, luciendo viejos conocidos de su armario y siendo fiel a su estilo, en ocasiones excesivo



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Máxima y Guillermo de Holanda. (EFE)



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A. RODRÍGUEZ
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MÁXIMA DE HOLANDA
22/10/2019


Estábamos deseando que llegara la ceremonia de entronización del emperador Naruhito de Japón para ver el despliegue de vestidos, tocados y joyas de las royals, siguiendo al pie de la letra la etiqueta impuesta para la ocasión, que requería los dos primeros elementos. Y como es habitual, Máxima de Holanda no ha pasado desapercibida, a pesar de optar por un look 100% reciclado, pero al que no le faltaba ni un solo detalle.

Máxima ha rescatado de su armario un vestido en color gris, con dibujos florales grabados en la tela. Siguiendo su costumbre, ha tirado de Edouard Vermeulen, responsable de la firma Natan, la más abundante en su vestidor. Es un diseño que ya lució en el Día del Príncipe de 2017, cambiando ligeramente algunos de los complementos, como la cartera o el tocado, que merece mención aparte. Lo que sí ha mantenido son los guantes, en el mismo tono del vestido.




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Máxima y Guillermo de Holanda, llegando al Palacio Imperial. (Reuters)



La argentina es conocida por sus contrastes y también por excederse con determinados complementos, como los sombreros o los collares. Le gustan grandes y que llamen la atención. Y en esta ocasión, ha sido el tocado el que se llevaba todo el protagonismo. Se trataba de una rosa realizada a mano en el mismo color del vestido por Fabienne Delvigne, responsable de la casa belga especializada en este tipo de adornos. Ya lo lució en el bautizo de su segunda hija, Alexia, y once años más tarde en una visita de Estado que realizó a Corea del Sur junto a su marido.

Desde luego, no ha sido el elemento de su outfit que más ha gustado, precisamente por lo excesivo del mismo. Y no es la primera vez que Máxima desluce un atuendo con un enorme tocado. Ya lo hizo en Londres el pasado junio, cuando tras la imposición de la Orden de la Jarretera al rey Guillermoasistió a Ascot, el campeonato hípico conocido por el desfile de tocados. Y el suyo fue muy criticado por lo aparatoso y el volumen, tan grande que le tapaba buena parte de su rostro.

En cuanto a joyas, la reina ha optado por un collar de diamantes de estilo choker, unos grandes pendientes y una pulsera. Lucía, asimismo, la banda de la orden japonesa de la Preciosa Corona, la misma que Letizia y Matilde.




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Última edición por un moderador:
Nada combina con nada

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Gracias, Maga, por esta foto.
Haber decidido echarse encima "el arca y la tapa", que decía mi abuela, del joyero justo el día en que se ha envuelto en una cretona floreada ceñida por un cinturón inenarrable de tejido incomprensible es una muestra más de su manifiesta incapacidad y falta de luces.
El resultado es mareante y no se sabe a qué atender, si a la diadema espeluznante, las esmeraldas de los pendientes, el collar de chatones que se pierde en el estampado, la banda pisoteada por un cinturón de nazareno sport en un verde ordinario, la carterita cursi y plasticosa, la pulsera que se vuelve irrelevante o el anillo sempiterno.
El conjunto es una oda al caos y al horror vacui. Para la pelambre y la espalda al aire no tengo ya energía.
 
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