CARAS Y GESTOS FALSOS, EXAGERADOS, VOCECITAS, ETC DE LAS PRINCESAS

Tras ver este hilo tan maravilloso, antes de irme a dormir, quiero dar las gracias a todos los foreros que están participando en él. Me parece uno de los mejores hilos de todo Cotilleando.
También me gustaría decir que comparto muchas de las opiniones aquí vertidas: la falsedad de Mary, Matilde o Máxima y los excesos gestuales de Letizia o de Kate. Mi princesa favorita es una a la que apenas hemos visto en el hilo. Y por razones obvias: es la princesa de Liechtenstein, esposa de Alois.
La discreción hecha mujer. Lo más alejado de estas princesas de pacotilla cuyo máximo objetivo es ser el centro de atención en bautizos, bodas y comuniones, a los que asisten con el modelito más despampanante que encuentran en el armario. Están todas cortadas por el mismo patrón. No se han dado cuenta todavía de que lo importante no son ellas, sino la institución que representan.


Totalmente de acuerdo contigo en cuanto a lo que dices de estas 'princesas operación triunfo'
Sólo disiento en el que para mí no hay ninguna princesa favorita porque este título en 2013 me da la risa floja. En cuanto a príncipes solo me gusta el de las galletas :)

En cuanto a Diana, nunca he comprendido el porqué de su fama. De joven me parecía bastante fea y provinciana y de mayor, aunque un poco mejor, me ha parecido patética y con mucha necesidad de atención.
 
Pobre Diana, en general se la vió hermosa siempre, pero en ese video, poniendo los ojos en blanco y revoleándolos para aquí y para allá, se la ve tan falsa, y haciendo un papel ridículo, además de irrespetuoso para con sus huéspedes.
Las demás, me parecen todas muy graciosas, algunas increíbles, inexplicable que hayan podido hacer esas caras.... Se deben querer morir cuando se ven en las revistas o diarios con esas caras!!!!
Gracias por poner tantas fotos y tan buenas!!!!
 
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diana tambien aparentaba 10 años mas de los que tenia
 
Lo que me gustaba de Diana eran sus ojos, tenìan un hermoso color pero no su actitud de demanda de atenciòn y que todo girara en torno a ella aunque lamente su muerte, nadie debe morir de esa forma acosado por la prensa.
 
Yo nunca fui fan de Diana. Creo que no era muy lista pero sí muy manipuladora y con una necesidad de atención enfermiza. Compadezco a quienes tuvieron que vivir cerca de ella.

En el mundo de hoy, el aspecto físico tiene mucha prevalencia. Vemos la fama que Diana tomó por ser atractiva físicamente (como han mencionado algunas foreras, se pulió con el tiempo) y en cambio, personas como Anne no llaman la atención por muy Royals que sean, por mucho que trabajen y por bién que eduquen a sus hijos.

Diana sabía que tenía mucho arrastre y que un grán público creía la novela de "princesa triste y lastimada" que ella armó, pero cometió el error de pensar que ella podía manipular a la prensa a su antojo.
Al final, ya no la dejaban vivir en paz y todos conocemos el final.

Pienso que si no hubiese muerto, no habría soportado ser reemplazada en el favoritismo del público, algo que iba a ocurrir cuando envejeciera.
 
A Diana hay que ponerla en contexto. Para la época era muy vistosa. Yo no diría que era bella, pero sí que era atractiva y se podría decir que humanizó una corte que era muy fría, muy distante del ciudadano común. La gente adoraba a Diana porque parecía disfrutar el estar en contacto con gente común y corriente. No se la sentía snob, mientras el Príncipe Carlos, así como el resto de su familia se veían sumamente acartonados. No eran groseros, pero sí fríos. Y Diana vivió en los 80, una época plagada de conflictos bélicos (había conflictos en Nicaragua, El Salvador, Guatemala, la guerra Irán-Irak, la ocupación de Afganistán por parte de los rusos, la amenaza terrorista del IRA, la guerra de las Malvinas), de enfermedades (hambruna en Etiopia, se había descubierto el SIDA) y de complicaciones económicas: el Reino Unido estaba en recesión y había un gran desempleo. La era Thatcher enfrentó grandes huelgas a causa de su política privatizadora. En medio de todo eso, Diana representaba esperanza. Mientras la reina daba seguridad.

Yo sí creo que Diana era manipuladora, pero ése fue el juego que le enseñaron a jugar. Desde hacía varios siglos, los monarcas ingleses jugaban a ser parte de una gran familia feliz, donde el divorcio no se mencionaba. Las princesas aceptaban los cuernos sin chistar, porque de separarse perderían todo. Y Diana sabía que su matrimonio había fracasado. Si no hubiera jugado la carta de la popularidad ¿en qué se hubiera convertido? Es cierto que cuando Diana se divorció, los tiempos de Enrique VIII habían pasado hace siglos y nadie encerraba en un convento o decapitaba a la esposa incomoda del monarca, pero aún así, antes de ella no se tenían antecedentes de divorcio en la familia real, por lo menos en la época moderna. Nadie sabía cómo le iría con el divorcio, pero ella era consciente que mientras fuera amada por el pueblo, tendría poder sobre el destino de sus hijos y una vida acomodada. Los Windsor no podían darse el lujo de victimizarla aún más con un mal arreglo de divorcio. Ella no era Sarah Ferguson a la que podían aislar sin problema.

Sobre su carácter. Era una persona frágil, abandonada por su madre, criada en internados y con unas hermanas distantes. Se casó muy joven y llena de cuentos de hadas en la cabeza. Si bien vio muy pocas veces al príncipe Carlos, ella sí creyó estar enamorada; se casó ilusionada y él fue frío desde el primer momento. Muy linda la historia de amor con Camilla, pero ella fue una bruja que nunca le dio chance a que ese matrimonio funcionara. Con el cuento de que Carlos y ella eran los mejores amigos, nunca dejó al matrimonio solo. Cuando estaban juntos los tres (los cuatro, contando al inepto con el que se casó Camilla), Camilla sacaba a relucir el poder que tenía sobre Carlos: ella era la que decidía donde ir, si salían, si no. Él dice que la intentó querer, pero es muy difícil que un matrimonio funcione, si la querida del marido los acompaña en las fiestas, en las vacaciones, en los juegos de polo, etcétera.

Diana no tenía otro tipo de armas para luchar por su matrimonio y recurrió al chantaje emocional, pero no creo que haya sido una persona difícil. Era difícil para su familia política: tan perfectos y fríos todos que una infidelidad la consideraban un mal menor. Pero para otro tipo de gente fue una buena amiga y una buena jefa. Ninguno de sus empleados, hasta los que contaron parte de su intimidad, llegó a decir que Diana era una jefa que tratara mal al servicio.

Ahora, yo la valoro por una cosa: porque a decidió dedicarse a dos causas que de verdad necesitaban a alguien como ella para ser visibilizadas, como lo eran el SIDA y la lucha contra las minas antipersonas. La primera era (sigue siendo) una causa bastante estigmatizada; todavía se cree que las personas que la padecen se la merecen por llevar una vida desordenada. Y la verdad es que era muy valioso verla a ella, viniendo de la familia más elitista del planeta, tratar con humanidad a esas personas. Y de las minas antipersonas los gobiernos no quieren hablar porque involucran a un montón de sectores poderosos. Nadie quiere encarcerlar a los traficantes, porque forman parte de la misma clase social que los políticos, a veces son los propios políticos. ¿Que no era sincera? La verdad, no me importa. En ese mundo nadie es sincero. ¿De verdad piensan que a todas estas princesas, sean de nacimiento o por matrimonio, les gusta tratar siempre con gente enferma? Por lo menos con Diana la gente se sentía bien tratada.
 
Totalmente de acuerdo contigo en cuanto a lo que dices de estas 'princesas operación triunfo'
Sólo disiento en el que para mí no hay ninguna princesa favorita porque este título en 2013 me da la risa floja. En cuanto a príncipes solo me gusta el de las galletas :)

En cuanto a Diana, nunca he comprendido el porqué de su fama. De joven me parecía bastante fea y provinciana y de mayor, aunque un poco mejor, me ha parecido patética y con mucha necesidad de atención.

Luna, tienes toda la razón. Lo de la realeza en este siglo es incomprensible. Pero como existe, se puede elegir lo menos malo siempre. Y, en ese sentido, para mí lo menos malo es aquello que, por su discreción, apenas molesta; es aquello serio, alejado de la frivolidad.
La tal princesa de Lichtenstein me parece discreta, seria en su papel, cercana... Y eso que tiene sangre azul y nobleza como ninguna de las demás consortes (ojo, no creo en semejantes tonterías, pero las casas reales se basan en ello para reivindicarse).
En el código de la realeza (repito: sólo en ese código), los aires de soberbia de Mary Donalson son inconcebibles, estúpidos, por creerse "lo más" en ese mundo, sabiendo que procede de otro totalmente distinto. Y justo alguien como Sofía de Baviera, que (siempre según sus códigos) podría mirar por encima del hombro a todas sus homónimas, se comporta de forma distinta.
Así es como yo lo aprecio desde la distancia, por supuesto. Porque conocer, no conocemos a ninguna de ellas.
 
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