Ha fallecido el Duque de Edimburgo
Será velado, según su deseo, en St George's Chapel, Windsor. Sábado 17 a las 1500 horas.
Video del funeral
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Fallecimiento del Duque de Edimburgo. Abril 9, 2021 - Funerales: Sábado 17, 1500 horas. St George's Chapel, Windsor.
- AutorEl Duque
- Fecha de inicio
- Estado
Será velado, según su deseo, en St George's Chapel, Windsor. Sábado 17 a las 1500 horas.
Video del funeral
Qué el problema no eran las perlas???, ahora es el abrigo??? En fin, inapropiada (según tu) pero guapísima y súper elegante.
Nos pagan.... Jijijiji.... Es coña, of course. Es que a mí me entro curiosidad también por ver quien era la dama. La he visto más veces con la Reina, creo que esta Nacidad es la que la acompañó a los oficios en SandringhamMil gracias. Estáis en todo
A mi me paso lo mismo y las primas me contaron que la peana donde estaba era un elevador. Si te vas youtube, lo puedes ver justo antes de aparecer el gaitero.
En las imágenes se ve que Kate y Guillermo enfilan el camino y Harry que va detrás se mete en medio de la pareja, esa impresión de dio a mí.
Pues para mi gusto, la que iba peor pero con diferencia. Las mejores, Sofía de Wessex que le doy un 10, en elegancia y sobriedad y la Duquesa de Cornuales. Y por ese orden.
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HASTA PRONTO PRINCIPE FELIPE, EL REY SIN TRONO
MARIANA VARGAS RUIZ
Esta mañana, en punto de las 8 horas de México, el mundo ha estado pendiente de la despedida oficial de un hombre que fue un “rey sin trono”, el duque de Edimburgo, quien iba a cumplir 100 años de edad el próximo 10 de junio. Durante más de 80 años estuvo relacionado con Isabel II reina de Inglaterra.
Nunca fue rey porque siendo descendiente de reyes británicos, alemanes, griegos y zares rusos, solo fue hijo de un príncipe griego: Andrés y de una princesa británica: Alicia de Battemberg.
En este día, 17 de abril de 2021, la familia real inglesa, acompañada por mucha gente desde sus hogares, presenciamos la despedida oficial al marido de la reina, el príncipe Felipe, duque de Edimburgo. Presentes en la capilla de San Jorge, en Windsor, donde se celebran bautizos, bodas y ahora, funerales, y recordando que la última boda de un príncipe aquí fue la de Harry y Meghan, quien por cierto, este último se vio muy afectado como su padre el príncipe de Gales, y Zara Tyndall, otra nieta del fallecido.
Cabe destacar que, desde 1861, tras la muerte del príncipe Alberto, esposo de Victoria I, tatarabuelos tanto del príncipe Felipe como de su majestad la reina Isabel, no ha habido otro funeral de un consorte real en este país. En esa ocasión, el príncipe de Gales, Alberto Eduardo, futuro Eduardo VII, encabezó el funeral de Estado de su padre en lugar de su madre Victoria I, quien, a los 42 años, perdió a su amado esposo con quien tuvo 9 hijos. Victoria reinó de 1837 a 1901, año de su muerte y desde que enviudó, vistió de riguroso luto hasta que, cuando fue su propio funeral, dejó escrito que su vestimenta fuera de blanco y le cubrieran el rostro con su velo de novia. En esta triste despedida a Felipe, príncipe consorte desde 1957, su alteza real, duque de Edimburgo, conde de Merioneth y Barón Greenwich, se respetó su deseo: un funeral sencillo, no de Estado.
Líderes mundiales enviaron, desde que se conoció la noticia de su muerte, su pésame sobre todo a su majestad, desde el presidente López Obrador, hasta otros mandatarios.
En este sencillo homenaje precedido por el deán de Windsor, las casas reales de Suecia, Dinamarca y Noruega, por órdenes de los monarcas, pusieron a media asta sus banderas en sus palacios oficiales en respeto y homaje al duque.
Con salvas de honor, precedido por granaderos y marinos, vimos al último Land Rover del fallecido llevar su ataúd hacia la capilla de San Jorge, y tras este, caminaron el príncipe de Gales, la princesa real, seguidos por tres de los nietos de Felipe: Guillermo, el futuro rey, Peter Phillips, el nieto mayor y al lado, Harry. Tras ellos, los príncipes Andrés y Eduardo, y su sobrino, el segundo conde de Snodwen junto con el segundo yerno de Felipe, Sir Tim Laurence.
Vimos a una monarca, Isabel II, fuerte pero triste. Al pasar el Land Rover rumbo a la capilla real, se encontraban los dos ponies favoritos del duque, junto con su carruaje, porque él practicaba este deporte, las carreras de carruajes. En este, se destacaron cosas importantes: a parte de sus ponies, en el asiento principal se encontraba su chaqueta, gorra y guantes.
Durante la ceremonia, donde solo había 30 personas familiares del duque como su viuda, la reina, quien, también, ostenta el título de duquesa viuda de Edimburgo. Cabe destacar que el título lo heredo su hijo mayor varón, el príncipe de Gales. Pero, de acuerdo a un convenio que data de los años 80, en su momento, no de inmediato, el título pasará a pertenecer a el príncipe Eduardo.
Este título, antes de ser de Felipe, perteneció al segundo hijo varón de la reina Victoria, Alfredo, quien, también reinó como duque de Sajonia Coburgo Gotha, que heredó de su tío Ernesto II. Al morir Affie, único hijo varón del príncipe Alfredo, por su***dio sentimental, pues, no le permitieron casarse con una plebeya, el título fue obsequiado por Jorge VI a su yerno, Felipe de Mounbatten horas antes de su enlace con la princesa heredera Isabel, convirtiéndose, también, al renunciar a su fe ortodoxa al anglicalismo, religión inglesa. Al casarse, el 20 de noviembre de 1947, los recién casados, y según el protocolo, fueron llamados los duques de Edimburgo.
Al morir Jorge VI, en 1952, la pareja estaba en Kenia. Fue Felipe, quien, tras horas del deceso, le dio la noticia a su esposa. Isabel II, decidió tomar ese nombre, y desde entonces, siempre fue acompañada y aconsejada por Felipe, quien, en 1957, ya que renunció, a todos sus títulos reales de su país para casarse con el amor de su vida, fue nombrado su alteza real el príncipe consorte.
73 años de casados, más de 80 juntos, 4 hijos, 8 nietos, 10 bisnietos y una bisnieta a punto de nacer: la hija de Harry y Meghan. Escándalos: desde rumores de separación de la reina en 1959, tras seis meses de viaje, callados con los nacimientos de Andrés y Eduardo, bodas de Carlos y Diana, Andrés y Sarah y Ana y Mark que terminaron en divorcio, y nuevos matrimonios para Carlos y Ana, la muerte de lady Di, el incendio del castillo de Windsor, divorcio de su nieto Peter Phillips, la vida amorosa de su ex yerno Mark Phillips, la infidelidad al día siguiente de la boda de su nieta Zara, ya que el esposo de esta, Mike Tindall, fue cachado con otra mujer, los escándalos de Harry como soltero, y casado, la famosa y más reciente entrevista de estos en tv americana. Sus rumores de infidelidades de él y de su esposa, la reina –estos más discretos- y pese a esto, el duque, realmente, vivió todo un siglo.
Se le debe la modernización de esta casa real, fue el primer príncipe que concedió una entrevista a una televisión, le gustó la arquitectura, la pintura, el polo, navegar, la tecnología, la ecología. Creó, el premio duque de Edimburgo en beneficio de los jóvenes.
Espero, que, al ver en esta ceremonia, a unos duques de Cambridge más abiertos y relajados con Harry tras salir de la ceremonia, haya una reconciliación entre los hermanos. QEPD el príncipe, que, con sus bromas, con que ofendió a unos u a otros nos hizo reír.
MARIANA VARGAS RUIZ
Esta mañana, en punto de las 8 horas de México, el mundo ha estado pendiente de la despedida oficial de un hombre que fue un “rey sin trono”, el duque de Edimburgo, quien iba a cumplir 100 años de edad el próximo 10 de junio. Durante más de 80 años estuvo relacionado con Isabel II reina de Inglaterra.
Nunca fue rey porque siendo descendiente de reyes británicos, alemanes, griegos y zares rusos, solo fue hijo de un príncipe griego: Andrés y de una princesa británica: Alicia de Battemberg.
En este día, 17 de abril de 2021, la familia real inglesa, acompañada por mucha gente desde sus hogares, presenciamos la despedida oficial al marido de la reina, el príncipe Felipe, duque de Edimburgo. Presentes en la capilla de San Jorge, en Windsor, donde se celebran bautizos, bodas y ahora, funerales, y recordando que la última boda de un príncipe aquí fue la de Harry y Meghan, quien por cierto, este último se vio muy afectado como su padre el príncipe de Gales, y Zara Tyndall, otra nieta del fallecido.
Cabe destacar que, desde 1861, tras la muerte del príncipe Alberto, esposo de Victoria I, tatarabuelos tanto del príncipe Felipe como de su majestad la reina Isabel, no ha habido otro funeral de un consorte real en este país. En esa ocasión, el príncipe de Gales, Alberto Eduardo, futuro Eduardo VII, encabezó el funeral de Estado de su padre en lugar de su madre Victoria I, quien, a los 42 años, perdió a su amado esposo con quien tuvo 9 hijos. Victoria reinó de 1837 a 1901, año de su muerte y desde que enviudó, vistió de riguroso luto hasta que, cuando fue su propio funeral, dejó escrito que su vestimenta fuera de blanco y le cubrieran el rostro con su velo de novia. En esta triste despedida a Felipe, príncipe consorte desde 1957, su alteza real, duque de Edimburgo, conde de Merioneth y Barón Greenwich, se respetó su deseo: un funeral sencillo, no de Estado.
Líderes mundiales enviaron, desde que se conoció la noticia de su muerte, su pésame sobre todo a su majestad, desde el presidente López Obrador, hasta otros mandatarios.
En este sencillo homenaje precedido por el deán de Windsor, las casas reales de Suecia, Dinamarca y Noruega, por órdenes de los monarcas, pusieron a media asta sus banderas en sus palacios oficiales en respeto y homaje al duque.
Con salvas de honor, precedido por granaderos y marinos, vimos al último Land Rover del fallecido llevar su ataúd hacia la capilla de San Jorge, y tras este, caminaron el príncipe de Gales, la princesa real, seguidos por tres de los nietos de Felipe: Guillermo, el futuro rey, Peter Phillips, el nieto mayor y al lado, Harry. Tras ellos, los príncipes Andrés y Eduardo, y su sobrino, el segundo conde de Snodwen junto con el segundo yerno de Felipe, Sir Tim Laurence.
Vimos a una monarca, Isabel II, fuerte pero triste. Al pasar el Land Rover rumbo a la capilla real, se encontraban los dos ponies favoritos del duque, junto con su carruaje, porque él practicaba este deporte, las carreras de carruajes. En este, se destacaron cosas importantes: a parte de sus ponies, en el asiento principal se encontraba su chaqueta, gorra y guantes.
Durante la ceremonia, donde solo había 30 personas familiares del duque como su viuda, la reina, quien, también, ostenta el título de duquesa viuda de Edimburgo. Cabe destacar que el título lo heredo su hijo mayor varón, el príncipe de Gales. Pero, de acuerdo a un convenio que data de los años 80, en su momento, no de inmediato, el título pasará a pertenecer a el príncipe Eduardo.
Este título, antes de ser de Felipe, perteneció al segundo hijo varón de la reina Victoria, Alfredo, quien, también reinó como duque de Sajonia Coburgo Gotha, que heredó de su tío Ernesto II. Al morir Affie, único hijo varón del príncipe Alfredo, por su***dio sentimental, pues, no le permitieron casarse con una plebeya, el título fue obsequiado por Jorge VI a su yerno, Felipe de Mounbatten horas antes de su enlace con la princesa heredera Isabel, convirtiéndose, también, al renunciar a su fe ortodoxa al anglicalismo, religión inglesa. Al casarse, el 20 de noviembre de 1947, los recién casados, y según el protocolo, fueron llamados los duques de Edimburgo.
Al morir Jorge VI, en 1952, la pareja estaba en Kenia. Fue Felipe, quien, tras horas del deceso, le dio la noticia a su esposa. Isabel II, decidió tomar ese nombre, y desde entonces, siempre fue acompañada y aconsejada por Felipe, quien, en 1957, ya que renunció, a todos sus títulos reales de su país para casarse con el amor de su vida, fue nombrado su alteza real el príncipe consorte.
73 años de casados, más de 80 juntos, 4 hijos, 8 nietos, 10 bisnietos y una bisnieta a punto de nacer: la hija de Harry y Meghan. Escándalos: desde rumores de separación de la reina en 1959, tras seis meses de viaje, callados con los nacimientos de Andrés y Eduardo, bodas de Carlos y Diana, Andrés y Sarah y Ana y Mark que terminaron en divorcio, y nuevos matrimonios para Carlos y Ana, la muerte de lady Di, el incendio del castillo de Windsor, divorcio de su nieto Peter Phillips, la vida amorosa de su ex yerno Mark Phillips, la infidelidad al día siguiente de la boda de su nieta Zara, ya que el esposo de esta, Mike Tindall, fue cachado con otra mujer, los escándalos de Harry como soltero, y casado, la famosa y más reciente entrevista de estos en tv americana. Sus rumores de infidelidades de él y de su esposa, la reina –estos más discretos- y pese a esto, el duque, realmente, vivió todo un siglo.
Se le debe la modernización de esta casa real, fue el primer príncipe que concedió una entrevista a una televisión, le gustó la arquitectura, la pintura, el polo, navegar, la tecnología, la ecología. Creó, el premio duque de Edimburgo en beneficio de los jóvenes.
Espero, que, al ver en esta ceremonia, a unos duques de Cambridge más abiertos y relajados con Harry tras salir de la ceremonia, haya una reconciliación entre los hermanos. QEPD el príncipe, que, con sus bromas, con que ofendió a unos u a otros nos hizo reír.
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La reina lo lleva todo puesto. Collar, pendientes y broche. Pero aún así, va muy adecuada para un funeral. Las perlas son muy típicas en éstos casos.
No esperarías, de verdad, que estrenara. No sería ella.
Creo que Charles debe tener muchos sentimientos encontrados pues la relación con su padre nunca fue un nicho de rosas... quien sabe que le pasará por la mente, si tendría reclamos para con Philip, si en el fondo se lamente que las cosas no hayan sido distintas.
Kate va muy sobria, guapísima!!!
Jolín que susto hasta que llegué a la última frase de tu comentario jajajajajaj
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