Una idea muy bonita! Qué pena que no se le ocurriera...está demasiado ocupada pensando en hacerse sus almuerzos y cenas (los suyos, no los de sus hijas).Y con lo fácil que hubiera sido hacerles un disfraz de personal de supermercados, explicándoles las cosas y que se sintieran orgullosas de su padre y de su trabajo.