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Cálidas lágrimas corren por las mejillas de StuporMundi mientras su avatar trata de consolarla lo mejor que puede. Está leyendo el libro más triste y trágico que jamás he abierto.
"¡Dios mío!" - exclama StuporMundi, secándose las lágrimas con un pañuelo de encaje. - ¿Cómo es posible que este joven tuviera un destino tan trágico? El peor destino del mundo. -
Nacido un príncipe real, huérfano a los doce años de una madre en olor de santidad, de un padre que lo odiaba por ser hijo de su madre, de una madrastra cuyo deseo absoluto era hacerle daño con la complicidad de la prensa, de un hermano que no lo protegía y se creía superior a él, una cuñada que sólo se empeñaba en llorar y dar a luz.
Una abuela interesada sólo en reinar y un abuelo que paseaba por el campo en calesa. Sin mencionar a sus tíos y primos, supremamente desinteresados en su trágico destino, y una prima lejana que coleccionaba prendedores racistas.
¡Pero he aquí! ¡Un rayo de sol! Ella, su amada esposa. Maltratada, burlada, humillada, privada de la tiara que quería llevar el día de su boda, y sin embargo permaneció fielmente a su lado.
"Qué alivio, que alguien realmente ame a este pobre chico...", piensa StuporMundi, mientras el avatar con un resoplido empuja una taza de té hacia ella con la cola.
¡Y los hijos! ¡Que alegria! Alegría enturbiada por el racismo de los familiares que, Pantone en mano, comprobaron que los niños no iban ni un grado más allá del "blanco hielo". Y luego, el exilio en una tierra lejana y salvaje, pero donde The Spare y su hermosa familia pudieron hacer una vida, trabajando duro pero felices con lo poco que tenían.
- ¿No es terrible? Nunca había leído de una vida tan desesperada, triste, incómoda... ¿No crees? - suspira StuporMundi dirigiéndose al avatar.
El avatar se ve asqueado, vomita en la alfombra y se va volando.
StuporMundi niega con la cabeza. - ¡El silencio es traición, recuérdalo! -
"¡Dios mío!" - exclama StuporMundi, secándose las lágrimas con un pañuelo de encaje. - ¿Cómo es posible que este joven tuviera un destino tan trágico? El peor destino del mundo. -
Nacido un príncipe real, huérfano a los doce años de una madre en olor de santidad, de un padre que lo odiaba por ser hijo de su madre, de una madrastra cuyo deseo absoluto era hacerle daño con la complicidad de la prensa, de un hermano que no lo protegía y se creía superior a él, una cuñada que sólo se empeñaba en llorar y dar a luz.
Una abuela interesada sólo en reinar y un abuelo que paseaba por el campo en calesa. Sin mencionar a sus tíos y primos, supremamente desinteresados en su trágico destino, y una prima lejana que coleccionaba prendedores racistas.
¡Pero he aquí! ¡Un rayo de sol! Ella, su amada esposa. Maltratada, burlada, humillada, privada de la tiara que quería llevar el día de su boda, y sin embargo permaneció fielmente a su lado.
"Qué alivio, que alguien realmente ame a este pobre chico...", piensa StuporMundi, mientras el avatar con un resoplido empuja una taza de té hacia ella con la cola.
¡Y los hijos! ¡Que alegria! Alegría enturbiada por el racismo de los familiares que, Pantone en mano, comprobaron que los niños no iban ni un grado más allá del "blanco hielo". Y luego, el exilio en una tierra lejana y salvaje, pero donde The Spare y su hermosa familia pudieron hacer una vida, trabajando duro pero felices con lo poco que tenían.
- ¿No es terrible? Nunca había leído de una vida tan desesperada, triste, incómoda... ¿No crees? - suspira StuporMundi dirigiéndose al avatar.
El avatar se ve asqueado, vomita en la alfombra y se va volando.
StuporMundi niega con la cabeza. - ¡El silencio es traición, recuérdalo! -