Jajajajaja. Imaginad la escena. En esa cocina costumbrista, sentados los 3 a la mesa y loro mirándolos comérselas, SIN LAS GAFAS, seriamente, para que no se dejen ni una miga.Yo he visto chalets , con las paredes construidas con torrijas de la loro, muy jugosas si señor, como se nota q a ella no le gustan.
Q tormento de ser, seguro q se sienta frente a sus padres mirándoles fijamente para q se las coman enteritas.