Por la noche, el jardín de Waldburg trajo una serenata a la pareja casada y luego hubo una fiesta (con dj ) en el castillo. ¡Una buena mezcla de tradición y vida moderna!
El castillo alemán de Wolfegg fue el escenario del enlace matrimonial El príncipe Felipe, gran amigo de la novia, no faltó al evento, y tras la celebración religiosa, oficiada en la capilla de la fortaleza, disfrutó del banquete nupcial en uno de los magníficos salones del lugar.
La joven, que durante 1997 estuvo viviendo en España para perfeccionar el idioma, fue considerada por algunos medios de comunicación como una de las candidatas a posible novia del príncipe de Asturias.
A pesar de los rumores, tanto la propia condesa como su familia siempre negaron la existencia de una relación sentimental, puntualizando que entre ambos sólo existía una buena amistad.
Eligió para la ocasión un elegante y clásico traje en blanco roto, y lucía una mantilla antigua