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Lo peor es que lo graba y lo emite sin pudor.Minuto 17:00 del video nuevo.
Laia se ha dejado una mochila en el banco olvidada. Irati cuenta la historia mientras Verdeliss la graba y regaña a Laia diciendo "más vale que aparezca" y Laia con esta carita. Julen le dice a Laia que tontita es y Verdeliss le corrige diciendo un mísero "Julen...".
La carita de Laia me puede enserio, esa niña es muy sensible no se merece que la pongan en evidencia ni la culpen así.
Lo mejor de todo? Que las niñas estaban siendo responsables de una mochila que llevaba cosas de su madre (sus zapatos, por eso la Verdeliss se enfada con que se pierda) y todo esto mientras Verdeliss estaba ocupada haciendose fotos, Irati lo cuenta en la historia que se sentaron en un banco a esperar que la madre terminase de hacerse fotos. Madraza. Igual si ella se hubiese encargado de la mochila no habría que culpar a nadie de nada. Ver el archivo adjunto 1146638
Yo con estas cosas no doy crédito. Esta gente tienen mucha pero que mucha suerte. Tienen estrella en cuanto a ausencia de accidentes. Hay familias que están pendientes de sus críos y no les permiten según qué cosas porque ven el peligro y se despistan un segundo y tienen un accidente los críos. Luego está esta familia con niños en la encimera mientras se cocina rodeados de cuchillos, bebé porteado por otro bebé que a duras penas acaba de aprender a andar, etc y no les ocurre nada. Tienen estrella y ojo, yo que me alegro que no les deseo ningún mal a los pobres.Habéis visto el stori donde Anne pone a Miren y una muñeca en una carretilla de Lego y la lleva por el piso?
Verdeliss se ríe,lo graba y le dice que no es una muñeca.
Al segundo se cae la muñeca como se podría haber caído Miren o tumbarse la carretilla y pegarse un porrazo.
Pobre nena,parece un peluche.
Lo esVer el archivo adjunto 1146678 Minuto 35’14. No tengo palabras. Decídme que lo que está chupando Anne no es un cuchillo de cocina.
Y no es el típico cuchillo redondeado con el que aunque quieras cortarte no puedes. Es un cuchillo de cocina afilado con su buena punta, vamos, de los que tienen pinta de cortar