"HESPAÑA"

La justicia pone el foco en los 6.500 millones adjudicados a dedo en material antipandemia​

Solo hay 59 contratos judicializados pero Anticorrupción sigue expurgando entre los 25.068 expedientes de urgencia de 2020​


El riesgo legal

La Fiscalía alerta de que los casos prescriban, en medio de polémicas como la de los comisionistas de Madrid​

En esa marea de datos y cifras se mueve la Fiscalía, que en la mayoría de los casos bajo sospecha y a pesar de apreciar «sobrecostes evidentes» y «comisiones desmesuradas», está tirando la toalla al no tener pruebas de prevaricación, tráfico de influencias, negociaciones prohibidas a los funcionarios o malversación de caudales públicos. Los cuatro ilícitos que serían aplicables en principio.

Así las cosas, ahora solo hay dos investigaciones judicializadas sobre los desmanes de los contratos en la pandemia. En la primera hay ya tres imputados. El Juzgado de Instrucción número 26 de Madrid ha tomando declaración como investigados al director del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), Alfonso María Jiménez Palacios; la directora general de la Cartera Común del Servicio del Sistema Nacional de Salud y Farmacia, Patricia Lacruz; y la alto cargo de Hacienda Paloma Rosado. El origen de esta causa es una querella de Vox contra los altos cargos del departamento que dirigía Salvador Illa por 56 contratos supuestamente sospechosos, entre los que destacan una docena de ellos por los que Sanidad pagó 313 millones a empresas con «direcciones desconocidas».

«Dirección desconocida»​

Una de esas firmas de «dirección desconocida» cuyas adjudicaciones están siendo investigadas es la segunda empresa que más ganó en 2020 con la pandemia gracias a los contratos públicos. Se trata de Hongkong Travis Asia Limited, que se llevó cinco contratos por más de 187 millones.

La segunda investigación judicializada sobre los contratos covid es la que afecta precisamente al hermano del duque de Feria, Luis Medina, y a su amigo Alberto Luceño. Ambos, ya imputados, deberán declarar el día 25 ante el Juzgado de Instrucción 47 de Madrid, acusados de estafa agravada, falsedad documental y blanqueo de capitales. En este caso son tres los contratos bajo sospecha por la venta al Ayuntamiento madrileños de mascarillas, guantes y test rápidos en marzo de 2020 por 14,5 millones. Una operación por la que los socios se habrían repartido más de cinco millones en comisiones.

Aunque sigue expurgando centenares de adjudicaciones, solo consta que Anticorrupción haya abierto 'diligencias previas' sobre otro famoso contrato: el de las 250.000 mascarillas que Priviet Sportive vendió por 1,5 millones de euros a la Comunidad de Madrid con la intermediación del hermano de la presidenta. Según reconoció la jefa del Ejecutivo, Tomás Díaz Ayuso cobró al menos 55.850 euros más IVA por su intervención en esa transacción.

El Ministerio Público, por ahora, no ha tomado decisión alguna sobre otro paquete de adjudicaciones polémica: los doce contratos por valor de 326 millones de euros firmados por el Gobierno de Pedro Sánchez durante la crisis sanitaria y que el Grupo Parlamentario Popular en la Asamblea de Madrid, bajo orden de Ayuso, denunció a Anticorrupción el 10 de marzo por favorecer, supuestamente, a siete empresas relacionadas con el PSOE.


¿Cómo que no hay pruebas? ¡Que no nos tomen el pelo!

Si una foto de una niña ajena puede ser una prueba para llamar a declarar a unas personas como posibles niñeras..

¡Qué no me vengan conque no hay pruebas para llamar a declarar a funcionarios públicos incluidos alcalde y una presidenta de Gobierno!

¿Qué pasa? ¿Qué todos están involucrados y no destapes mi mierda porque te puedo sacar la tuya?

Y mientras tanto, que vayan prescribiendo los asuntillos....
 

La justicia pone el foco en los 6.500 millones adjudicados a dedo en material antipandemia​

Solo hay 59 contratos judicializados pero Anticorrupción sigue expurgando entre los 25.068 expedientes de urgencia de 2020​


El riesgo legal

La Fiscalía alerta de que los casos prescriban, en medio de polémicas como la de los comisionistas de Madrid​

En esa marea de datos y cifras se mueve la Fiscalía, que en la mayoría de los casos bajo sospecha y a pesar de apreciar «sobrecostes evidentes» y «comisiones desmesuradas», está tirando la toalla al no tener pruebas de prevaricación, tráfico de influencias, negociaciones prohibidas a los funcionarios o malversación de caudales públicos. Los cuatro ilícitos que serían aplicables en principio.

Así las cosas, ahora solo hay dos investigaciones judicializadas sobre los desmanes de los contratos en la pandemia. En la primera hay ya tres imputados. El Juzgado de Instrucción número 26 de Madrid ha tomando declaración como investigados al director del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), Alfonso María Jiménez Palacios; la directora general de la Cartera Común del Servicio del Sistema Nacional de Salud y Farmacia, Patricia Lacruz; y la alto cargo de Hacienda Paloma Rosado. El origen de esta causa es una querella de Vox contra los altos cargos del departamento que dirigía Salvador Illa por 56 contratos supuestamente sospechosos, entre los que destacan una docena de ellos por los que Sanidad pagó 313 millones a empresas con «direcciones desconocidas».

«Dirección desconocida»​

Una de esas firmas de «dirección desconocida» cuyas adjudicaciones están siendo investigadas es la segunda empresa que más ganó en 2020 con la pandemia gracias a los contratos públicos. Se trata de Hongkong Travis Asia Limited, que se llevó cinco contratos por más de 187 millones.

La segunda investigación judicializada sobre los contratos covid es la que afecta precisamente al hermano del duque de Feria, Luis Medina, y a su amigo Alberto Luceño. Ambos, ya imputados, deberán declarar el día 25 ante el Juzgado de Instrucción 47 de Madrid, acusados de estafa agravada, falsedad documental y blanqueo de capitales. En este caso son tres los contratos bajo sospecha por la venta al Ayuntamiento madrileños de mascarillas, guantes y test rápidos en marzo de 2020 por 14,5 millones. Una operación por la que los socios se habrían repartido más de cinco millones en comisiones.

Aunque sigue expurgando centenares de adjudicaciones, solo consta que Anticorrupción haya abierto 'diligencias previas' sobre otro famoso contrato: el de las 250.000 mascarillas que Priviet Sportive vendió por 1,5 millones de euros a la Comunidad de Madrid con la intermediación del hermano de la presidenta. Según reconoció la jefa del Ejecutivo, Tomás Díaz Ayuso cobró al menos 55.850 euros más IVA por su intervención en esa transacción.

El Ministerio Público, por ahora, no ha tomado decisión alguna sobre otro paquete de adjudicaciones polémica: los doce contratos por valor de 326 millones de euros firmados por el Gobierno de Pedro Sánchez durante la crisis sanitaria y que el Grupo Parlamentario Popular en la Asamblea de Madrid, bajo orden de Ayuso, denunció a Anticorrupción el 10 de marzo por favorecer, supuestamente, a siete empresas relacionadas con el PSOE.


¿Cómo que no hay pruebas? ¡Que no nos tomen el pelo!

Si una foto de una niña ajena puede ser una prueba para llamar a declarar a unas personas como posibles niñeras..

¡Qué no me vengan conque no hay pruebas para llamar a declarar a funcionarios públicos incluidos alcalde y una presidenta de Gobierno!

¿Qué pasa? ¿Qué todos están involucrados y no destapes mi mierda porque te puedo sacar la tuya?

Y mientras tanto, que vayan prescribiendo los asuntillos....
Claro. Como la Fiscal General es de derechas.....😁😁😁😁😁
 

Mascarillas y camarillas​


Benjamín Prado
18 de abril de 2022 21:39h
@pradobenjamin
Todos los caminos del PP van a dar a Isabel Díaz Ayuso, que mientras luchaba por ser la presidenta del partido en Madrid se ha encontrado con un poder que quizá no esperaba y que la ha convertido en alguien temido, a quien el resto de los dirigentes de la formación considera una rival peligrosa, un enemigo de cuidado: si acabó con la carrera política ni más ni menos que del secretario general, es que puede dar al traste con la de cualquiera, deben de pensar; y todos, desde el nuevo mandamás, Alberto Núñez Feijóo, hasta el último de los barones territoriales, se andan con pies de plomo en su presencia, miden sus palabras y sus declaraciones, se muerden la lengua y evitan molestarla. No es una lideresa porque la sigan, sino porque les asusta que les pueda perseguir ella. Al fin y al cabo, es la abanderada de la línea dura, aunque el tiempo dirá si eso fortalece a los suyos o se los entrega en bandeja a la ultraderecha, que no ha venido a auparlos sino a sustituirlos.

No es discutible la bajeza moral que supone aprovecharse del sufrimiento que causaba la pandemia para llenar sus garajes de coches de alta gama y sus embarcaderos de yates. Alguno de ellos todavía se permite dar lecciones de patriotismo
El alcalde de la capital, por ejemplo, apostó por el caballo perdedor en la guerra entre Ayuso y Casado, y ahora le presentan la factura, que es dejarlo prácticamente solo en el asunto siniestro de las mascarillas y los comisionistas que aprovecharon que el Yang-Tsé pasaba por la Puerta del Sol para irse a China y volver con los bolsillos llenos, y que al regidor le han acarreado sospechas y acusaciones de haber cometido tráfico de influencias en beneficio de algún familiar o, como mínimo, de haberse dejado estafar millones sin que el ayuntamiento se enterase absolutamente de nada y soltar alegremente el dinero público sin ningún control, sin hacer ningún estudio ni sondear el mercado. La disculpa de que eran momentos confusos y en los que había que actuar sin perder tiempo, conlleva una confesión: él y Ayuso estaban tan obsesionados por puentear al Gobierno central y adelantársele, por evitar que el adversario se pusiera medalla alguna, que pagaron a precio de oro material sanitario en gran medida defectuoso y siempre a unos precios desmesurados. Puede que a los oportunistas que se enriquecieron de forma intolerable con ese negocio los reclutaran ellos o se presentasen voluntarios, lo que no es discutible es la bajeza moral que supone aprovecharse del sufrimiento que causaba la pandemia para llenar sus garajes de coches de alta gama y sus embarcaderos de yates. Alguno de ellos todavía se permite dar lecciones de patriotismo.

Pero es que el a Dios rogando y con el mazo dando es el pan nuestro de cada día con demasiada gente que pontifica mientras roba, que habla de la España que madruga y la cultura del esfuerzo pero se dedica a meter la mano en las cajas fuertes ajenas. Y casi siempre ocurre lo mismo: se hace algo que parece raro o turbio y al final se demuestra que lo era. ¿No daba la impresión de no tener ni pies ni cabeza que la Supercopa de España de fútbol se disputase en Arabia Saudí? Pues, según las últimas informaciones, el defensa Gerard Piqué y el presidente de la Real Federación Española de Fútbol le sacaron a las autoridades de Riad una recompensa de veinticuatro millones de euros para el futbolista del Barcelona, que al parecer medió en el asunto. Hay que ver qué cosas ocurren en el mismo país donde tanta gente protesta porque el salario mínimo llegue a los mil euros. O, por seguir en el ámbito sanitario, en la misma región donde para algunos los billetes crecen en los árboles de la Real Casa de Correos y, de forma simultánea, más de 5.000 profesionales de la medicina firman ya el manifiesto para exigirle a Ayuso que acabe con la temporalidad del sector en los hospitales públicos, donde el 52% de los contratos son eventuales. Si no los hacen fijos antes del uno de junio, irán a los tribunales. A muchos de ellos, estando en la situación laboral que están y dejándose la vida como se la dejaron en los momentos más duros de la pandemia, los acusó ella misma de no esforzarse lo suficiente y de desatender a las y los enfermos.

Según las encuestas, sondeos y demás, que ya sabemos que no se hacen a menudo para pronosticar lo que va a ocurrir, sino para intentar que suceda, las sombras iluminan a Isabel Díaz Ayuso, y ni lo ocurrido en las residencias de ancianos, al menos a día de hoy, le ha afectado; ni le restan apoyos y seguidores las investigaciones que se siguen en la Unión Europea y en España sobre el presunto trato de favor a su hermano y a otros conocidos suyos que también utilizaron el coronavirus como trampolín. Al contrario, se estima que las acusaciones la han robustecido. Un auténtico fenómeno sociológico que, tal vez, explique por qué la derecha manda en Madrid desde hace décadas.

En el polo contrario, la figura de Almeida da la impresión de que se debilita, se ha quedado sin apoyos fiables. Si en algún momento se plantea la obligación o necesidad de elegir entre Ayuso y él, o mucho cambian las cosas o perderá la apuesta. En política todo depende de los resultados, pero también de las camarillas, que manejan muchos hilos desde la oscuridad, o a veces a plena luz del día, tal y como lo han hecho con Casado y lo hicieron en el PSOE para quitarle a Pedro Sánchez el cargo que luego recuperaría, porque se lo devolvieron las y los militantes. Menos mal que siempre le quedará Ciudadanos… de momento. Con ellos ya se sabe que todo es de momento.


#12 Mila_Bodas
19 de abril de 2022. 08:33 h
Así a modo de reflexión: ¿Qué entendemos los españoles por democracia? ¿Democracia consiste en votar cuando nos convocan y llorar de alegría cuando nos prometen bajada de impuestos? ¿Qué haría una ciudadana media si comprueba que su banco le ha sustraído erróneamente una cantidad determinada? ¿Por qué no nos indignamos de la misma manera si meten la mano en la saca de los fondos públicos? ¿Con qué creemos que se sostiene la sanidad y la educación públicas? ¿No será que la demagógica fórmula de bajar los impuestos llevaría a demostrar a estos gestores de derecha que "decididamente" hay que revertir lo público en conciertos privados? Ellos se lo seguirían llevando a base de comisiones, primas, mordidas, pero usted y yo ya no tendríamos posibilidad de ir a un hospital o colegio público. Podemos pensar que son tan honrados que no quieren nuestro dinero por nuestro bien, como si la política fuera una obra de caridad en vez de una comunidad que arrima el hombre para que todo el mundo acceda a una vida digna, pero en realidad nuestro dinero iría a parar a conciertos privados siguiendo los designios de Aguirre, que desmanteló todo lo que estaba a su alcance (aunque se operara el pecho en la pública para "dar ejemplo" de mujer del pueblo). Y ahora tenemos a su discípula como continuadora de su obra, ejerciendo el poder a golpe de sonrisa pícara y caída de ojos, aún con más amoralidad si cabe, brindando por la libertad de tomarte una caña contagiando mientras dejaba morir a los ancianos que, probablemente, la votaran alguna vez. Mientras morían ancianos, mientras lloraban los familiares, ella guiñaba los ojitos librándonos de un comunismo fantasma. ¿Qué entendemos por democracia? O se revierte el sentido de la política y se ponen legislativamente límites a la gestión de nuestro dinero, con un control absoluto sobre ello o la democracia nos va a devorar a los mismos de siempre, a las mismas de siempre. Dejemos de mirar a los políticos como si fueran nuestros salvadores, son solo una parte de la ciudadanía que voluntariamente se ofrecen para gestionar nuestros fondos. No les demos un cheque en blanco a ninguno. Seamos solidarios de verdad, no solo a través de cuotas de participación cuando una guerra desgraciada salta al otro lado de nuestras fronteras. La solidaridad social fundamenta la democracia.
 
1650381393515.png
 

Y los de abajo son imbeciles, descerebrados y fascistas que no solo no respetan la libertad de expresion ajena, sino que son unos ignorantes. Por que VASCONGADAS ES ESPAÑA.

Y al que no le guste, ajo y agua.
 
Última edición:

Te referiras mas bien a ese pais donde gobierna el partido mas corrupto de la historia de España en coalicion con un partido financiado por chavistas venezolanos.

Por que da la casualidad de que por mas que lo repitas, ni el PP ha sido jamas condenado por corrupcion, ni jamas se ha dictado una sentencia,que diga que VOX se ha,financiado ilegalmente.

Pero tu sigue desgañitandote.......🤣🤣🤣🤣🤣🤣
 


POLÍTICA

Los Mossos concluyen que el coche del líder del PP en Barcelona se quemó de forma accidental​


El concejal de los populares, Josep Bou, denunció lo ocurrido en redes y afirmaba que se trataba de un hecho intencionado: “Me han quemado el coche”

El pasado domingo el concejal del PP en el Ayuntamiento de Barcelona Josep Bou, compartió unas imágenes a través de su cuenta de Twitter en las que aseguraba que dicho acto había sido intencionado: "Me acaban de quemar el coche”. Los Mossos d'Esquadra abrieron una investigación entonces para esclarecer los hechos y esta ha concluido que la causa del siniestro fue un problema mecánico del vehículo.

El diputado aparcó en el distrito barcelonés de Horta para participar en un acto con afiliados alrededor de las 11 de la mañana y pocos minutos después se dieron cuenta de que el vehículo estaba ardiendo. La policía catalana, ha confirmado que el vehículo perdía líquido y soltaba humo, teoría también confirmada por la Policía Científica. Según las indagaciones practicadas hasta el momento, todo indica que el vehículo, que quedó siniestro total, ardió por causas "fortuitas".

No sería la primera vez que la derecha aprovecha un hecho sin contrastar para favorecer su narrativa y alterar la opinión pública. Tras la denuncia pública, múltiples personalidades políticas decidieron mostrar su apoyo a través de esta misma red social entre ellas Cuca Gamarra, Isabel Díaz Ayuso, Inés Arrimadas, Carlos Carrizosa, Cayetana Álvarez de Toledo o Ramon Espadaler. Sin embargo, después de conocer que no se trataba de un ataque contra el cargo popular, ninguno ha decidido rectificar sus palabras y varios de ellos han borrado los comentarios.


 
Back