Venecia el primer día del año

Registrado
3 Mar 2006
Mensajes
59.047
Calificaciones
92.558
Ubicación
227
Mira cómo amaneció Venecia el primer día del año
venecia_portada-1000x523.jpg


Por Alberto Díaz - Pinto hace 5 horas en Insólito - 16 views
Cuando la gente visita Venecia, principalmente espera poder perderse entre sus maravillosos canales montados en góndola o motonave en aras de perderse entre sus históricas y encantadoras calles. Sin embargo, los turistas que eligieron pasar el último día del año en la ciudad, fueron testigos de una postal muy distinta a la que estamos acostumbrados a ver: los canales estaban prácticamente vacíos.

Lo normal es que Venecia se inunde durante el invierno debido a las lluvias, el deshielo y principalmente a las mareas altas. El año pasado, por ejemplo, el nivel del mar se elevó hasta 25 cm, manteniendo la tónica constante.

venecia_1.jpg



En estos casos, una alarma sonora de frecuencias crecientes se activa siempre con la marea alta, para advertir a los venecianos sobre la inminente inundación de calles, canales y plazas. No obstante, no hay alertas que valgan cuando el fenómeno se produce a la inversa, la marea baja excepcional. La única señal es que el Gran Canal deja sin agua a los restantes canales y ríos.

venecia_2.jpg



venecia_3.jpg



Así pues, horas antes de terminar el año la marea había descendido 66 cm, ofreciendo una imagen insólita y desoladora de la ciudad: las góndolas amarradas en la parte más baja de los postes, así como lanchas y barcazas varadas en el fango. Este, además, genera un olor pestilente en contacto con el aire que hace que la visita no sea tan agradable como se esperaba.

venecia_4.jpg



venecia_5.jpg



Durante horas no hubo servicio de góndolas, taxis ni motonaves. Tan solo se podían ver unas cuantas barcazas circulando por algunos tramos del Gran Canal. Por consiguiente, los visitantes tuvieron que recorrer la ciudad a pie, decepcionados y con sensación de fraude. Y es que, seamos realistas, Venecia sin agua no es lo mismo.

venecia_6.jpg



Si los venecianos ya viven preocupados por la marea alta, la cual les obliga a ir con botas de pescador o circular por pasarelas de madera, la marea baja les angustia aún más puesto que la ciudad pierde el interés turístico y, sin este, no hay negocio. Después de todo, todavía no conozco a nadie que quiera pasar sus vacaciones en una ciudad llena de fango.

venecia_7.jpg



http://lavozdelmuro.net/asi-es-venecia-sin-agua-tras-una-marea-baja-sin-precedentes/
 
El turismo masivo tampoco es que alegre tanto a los venecianos.

Los venecianos huyen de Venecia
14812210154579.jpg

Un cartel colgado del puente del Rialto denuncia la imposibilidad de vivir en Venecia. REUTERS
62 Comentarios
La ciudad de los canales pierde población al mismo ritmo que durante la peste de 1630. La nueva pandemia es la masificación turística.


«Sólo en una ocasión Venecia ha sufrido un descenso de población comparable al actual: fue durante la peste bubónica de 1630, tras la cual necesitó más de un siglo para recuperar el número de habitantes que tenía antes», dice el arqueólogo e historiador de arte italiano Salvatore Settis en su libro Si Venecia muere. El problema ahora es que es difícil saber si habrá una nueva recuperación como sucedió entonces.

En la farmacia Morelli, situada en el Campo de San Bartolomeo -a cuatro pasos del célebre puente de Rialto, tan visitado por los turistas-, han colocado un contador en el escaparate que indica el número de habitantes que vive en el centro histórico de Venecia. Actualizan los datos cada semana y siempre, irremediablemente, tienden a la baja.

Hace dos semanas el contador marcaba 54.926. Ése es el número de vecinos que vive actualmente en la mítica ciudad de los canales. Nada que ver con la población que tenía hace poco más de seis décadas, en 1951, cuando llegaba a 174.808 habitantes. Algunos lógicamente fallecieron, pero muchos otros cogieron sus bártulos y se fueron porque cada vez son más quienes piensan que en Venecia no hay quien viva.

Venecia recibe cada año 10 millones de turistas que pernoctan en la ciudad una media de dos o tres días. A ese número, hay que añadir aquéllos que visitan la localidad durante una única jornada y que suman unos quince millones más al año, según datos del consistorio. El resultado es que Venecia está siempre hasta los topes de turistas, con las consecuencias que eso comporta.

«Cierran una ferretería y te abren una tienda de máscaras», se queja Matteo Secchi, del grupo de ciudadanos Venessia.com, que batalla para evitar la despoblación de la ciudad. «¡El problema es que ya hay centenares de comercios de máscaras, no necesitamos más!», añade. Lo mismo ocurre con las panaderías. Para encontrar una, hay que recorrer casi media ciudad. Eso sí, en el camino hallas todo tipo de restaurantes y bares.

«Los niños no pueden jugar a pelota en las plazas porque están ocupadas por las terrazas de los bares», lamenta Michela Scibilia, de otro colectivo, We are here Venice, que también considera que «una Venecia sin habitantes no tendrá sentido ni tan siquiera para los turistas».

Hasta los jóvenes venecianos se están poniendo las pilas porque creen que se ha llegado a una situación límite. En junio, crearon la organización Generación 90 para que la avalancha de turistas no sepulte Venecia. «Aquí a las once de la noche ya está todo cerrado, a pesar de que Venecia es una ciudad universitaria. Sólo se piensa en el turismo», critica el portavoz de la asociación, Marco Caberlotto.

14812214811688.jpg

Vecinos de Venecia protestan el pasado mes de noviembre por la masificación turística. AFP
En lo que adultos y jóvenes coinciden es en denunciar que encontrar un lugar para vivir en Venecia se ha convertido en misión imposible. Antonio Guderzo, de la agencia inmobiliaria Grimaldi, en el centro histórico de la ciudad, explica que cuentan con ochenta apartamentos para alquilar a turistas por días o semanas. Cuando se le pregunta si disponen de algún piso de arrendamiento de larga duración, se queda pensativo y al final responde: «Tenemos dos apartamentos. Uno de una habitación, cuyo alquiler es de 1.000 euros al mes. Y otro, de dos habitaciones, por 1.200». Pero aclara: «Vaya a la agencia inmobiliaria que vaya, encontrará la misma situación en todas partes».

Matteo Secchi confirma que ése el gran drama de la ciudad. «El propietario de una casa paga los mismos impuestos si la alquila a un veneciano que a un turista», explica. «Lógicamente todo el mundo prefiere alquilar la casa a un turista porque así gana tres veces más». Eso sin contar los centenares de pisos turísticos que existen sin ningún tipo de control.

Reset Venezia, otro grupo ciudadano -colectivos de defensa de la ciudad no faltan-, ha contabilizado que la plataforma AirBnB ofrecía en octubre hasta 4.076 alquileres turísticos en el centro histórico de Venecia, cosa que supone un aumento del 35% respecto a hace catorce meses. «Muchos de esos apartamentos los gestionan sociedades, que tienen a su cargo hasta ochenta casas», asegura Emanuele Dal Carlo, de Reset Venezia, que cree que todo se trata de pura especulación. Muchas viviendas pertenecen a venecianos, pero otras se encuentran en manos extranjeras.

A eso se debe añadir la infinidad de hoteles que hay en la ciudad. Todo está por las nubes porque la demanda turística parece no tener fin. El representante de Venessia.com relata que él tenía un hotel en el centro histórico hasta hace un año: «Pagaba diez mil euros de alquiler al mes por doce habitaciones, hasta que el propietario del inmueble incrementó el precio a doce mil euros», detalla. «No me quedó más remedio que cerrar, porque ese alquiler resultaba inasumible», admite. Ahora Secchi se gana la vida trabajando por las noches como portero en un hotel.

No es el único caso. Giuliana Longo tiene una tienda de sombreros a pocos metros de la turística plaza de San Marcos, que su bisabuelo abrió allí en 1901. Cuatro generaciones de su familia trabajaron en esas cuatro paredes. «Cada vez que me han renovado el contrato de alquiler, me aumentaron el precio un 100%», declara. «Si lo vuelven a hacer, no podré continuar», confiesa.

El presidente de la Asociación Veneciana de Hoteleros, Claudio Scarpa, expone que la manutención de un inmueble en el centro histórico de Venecia es mucho más cara que la de uno en tierra firme. Pone un ejemplo: ¡«Cada inmueble debe tener su propia fosa séptica y los vecinos se tienen que encargar de vaciarla», precisa. «La administración debería ofrecer descuentos fiscales, ayudas para reparaciones e incentivos si alquilas a los residentes», opina.

De hecho, según Scarpa, la gran culpa de lo que está ocurriendo en Venecia es del propio Gobierno italiano. «Debería existir una legislación especial para Venecia porque es única en el mundo», afirma.

Única lo es, aunque réplicas han surgido por todas partes. Sin ir más lejos, hay 27 Venecias en Estados Unidos, según el historiador del arte Salvatore Settis. La primera se construyó en California en 1905. «Era una especie de ciudad-parque de diversión, y fue el precedente de Disneylandia, que se fundó en 1955», destaca el experto.

14812215420408.jpg

Un grupo de turistas pasea en góndola por los canales de Venecia. MÒNICA BERNABÉ
La exclusividad de la ciudad italiana se hace pagar al turista. Un paseo de media hora en góndola cuesta la friolera de 80 euros. Y el trayecto en vaporetto -las barcas a modo de autobús que recorren el Gran Canal-, siete. Para los venecianos, sólo vale un euro y medio.

«El Ayuntamiento ni tan siquiera dispone de un elenco de apartamentos turísticos», admite la vicealcaldesa de Venecia, Luciana Colle, que asegura que su formación -una lista cívica de centro derecha- está intentando hacer todo lo que puede para evitar los abusos en la ciudad, desde que llegó al consistorio en junio del año pasado. «Ya hemos verificado 200 apartamentos, y ninguno respetaba la normativa. Nuestro objetivo es revisar hasta 1.300», afirma.

Pero la vicealcaldesa recuerda que los propios venecianos son quienes están contribuyendo a esta situación porque, destaca, ellos son quienes destinan las viviendas al turismo. «Es un pez que se muerde la cola», insiste.

El Ayuntamiento de Venecia arrastra una deuda de 800 millones de euros, heredada del anterior gobierno municipal. La vicealcaldesa reconoce que esa losa tampoco ayuda a encontrar soluciones. En el centro histórico existen centenares de inmuebles públicos vacíos. Se podrían restaurar, pero se necesitan fondos.
 
¡En Venecia no hay quien viva!
14789520617900.jpg



En la actualidad apenas viven 49.000 personas en el centro de Venecia. GIUSTINIAN



Centenares de venecianos se manifiestan por la masificación de turistas y la imposibilidad de encontrar casa en la ciudad

  • MÒNICA BERNABÉ
  • Roma
12/11/2016 13:01
Centenares de venecianos se manifestaron este sábado en la mítica ciudad italiana de las góndolas porque, aseguran, ya han llegado a una situación límite: ¡en Venecia no hay quien viva!. "No hay manera de encontrar un piso de alquiler o un lugar donde vivir en el centro histórico de la ciudad, porque todo está destinado al turismo", denunció Matteo Secchi, uno de los representantes del colectivo Venessia.com, organizador de la protesta. En 1951 el centro histórico de Venecia tenía 179.000 habitantes. Ahora apenas quedan 49.000.

Los manifestantes acarrearon maletas consigo para simbolizar lo que tendrán que hacer si el Ayuntamiento de Venecia no se toma en serio dar un vuelco a su política residencial: se verán obligados a coger sus bártulos e irse de la ciudad. Por eso mismo, el lema de la protesta fue "Venexodus", jugando con las palabras Venecia y éxodo.

"El problema es que el propietario de una casa paga los mismos impuestos si la alquila a un veneciano que a un turista. Lógicamente todo el mundo prefiere alquilar la casa a un turista porque así gana tres veces más. Pero entonces los de aquí nos quedamos sin residencias dónde vivir", se lamenta Secchi, que describe que algunas agencias inmobiliarias en Venecia incluso cuelgan un cartel en la entrada que dice: "No se alquila a residentes".

Los manifestantes exigen que quienes alquilen pisos o casas a turistas estén obligados a pagar más impuestos. Asimismo, piden que el Ayuntamiento se haga cargo de dos mil viviendas de la ciudad que se encuentran vacías en la actualidad y que pertenecen a una empresa pública de la región del Véneto.

El actual alcalde de Venecia es Luigi Brugnaro, un empresario que se presentó a las elecciones municipales con una lista cívica de centro derecha. Ocupa el cargo desde junio de 2015. "Ya le hemos dado un margen de un año y medio, pero como no ha habido cambios en Venecia, hemos decidido manifestarnos", argumenta el representante de Venessia.com.

Este colectivo ya organizó anteriormente otras protestas, como el conocido "funeral de Venecia". Cada año unos tres millones de turistas visitan Venecia y pernoctan en el centro histórico de la ciudad durante una media de dos o tres noches, según explicó Secchi. A esta cifra, hay que añadir los miles de millares de visitantes que acuden a la localidad durante el día, y no hacen noche.

"Nuestra manifestación no es contra el turismo", quiso aclarar Secchi, "sino sobre la necesidad de poder convivir con el turismo". El representante del colectivo Venessia.com explicó que el 70% de la facturación de la ciudad proviene de ese sector. "Y eso puede ser un arma de doble filo", advirtió.
 
bellísima Venecia, merece la pena alojarte en un hotel en la isla, cuando llega la noche se queda prácticamente desierta porque la mayoría de los turistas han vuelto a sus hoteles en la costa o a los cruceros, puedes pasear por la plaza de San Marcos sin agobio, las callejuelas incluso dan un poco de miedo tan solitarias, para mí el lugar más bello del mundo.....
 
bellísima Venecia, merece la pena alojarte en un hotel en la isla, cuando llega la noche se queda prácticamente desierta porque la mayoría de los turistas han vuelto a sus hoteles en la costa o a los cruceros, puedes pasear por la plaza de San Marcos sin agobio, las callejuelas incluso dan un poco de miedo tan solitarias, para mí el lugar más bello del mundo.....

Yo viví una experiencia maravillosa, un regalo único para quienes sabemos apreciar unos momentos sublimes... El crucero estaba atracado bastante cerca de San Marco y mi marido y yo empeñados en que nos dejasen desembarcar a media noche. No nos dejaron salir hasta las 4 o 5 de la madrugada y empezamos a recorrer las calles desiertas. En algún momento nos atrajeron unas farolas con tulipas de cristal rosa y al acercarnos pudimos escuchar el precioso canto de una soprano que ensayaba. Estábamos frente a la fachada de La Fenice. Y allí, en el silencio de la noche, escuchando sobrecojidos por la emoción de semejante privilegio nos quedamos hasta el amanecer.
 
Yo sueño con volver a Venecia pero en el periodo del Carnevale. Alguien ha estado? Recomendable?
 
Back