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Muy bonitas fotos de la Reina en sus vacaciones. Gracias @Sidonie por el hilo
Vacaciones de la Reina Margrethe en Château de Caix, Francia. Agosto de 2019.
- AutorSidonie
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me encanta las fotos publicadas por la casa real
La reina con su perrito y pintando
La reina con su perrito y pintando
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Este año, la visita de la Reina es algo especial.
16 de agosto de 2019 22: 01 | Por: Jonathan Lykke Lilmoës, jl@newsbreak.dk
La visita anual de la Reina al Chateau de Cayx este año es algo muy especial.
En 1974, el príncipe Henrik y la reina Margrethe se enamoraron del castillo de vino Chateau de Cayx, algo desgastado, y lo golpearon. Por lo tanto, este año hace 45 años que el castillo francés ha estado en manos danesas. Según el historiador Lars Hovbakke Sørensen, hay una razón especial para esto.
- El castillo ha tenido un tremendo significado de muchas maneras diferentes. En primer lugar, es, y ha sido, un santuario tanto para la Majestad como para el Príncipe Henrik. Un lugar donde podrían haber estado en paz de una manera diferente que en Dinamarca. Un lugar donde están más fuera del foco público, le dice a Kendes.dk.
La propia casa real anunció el viernes el aniversario del castillo. En una descripción exhaustiva, se puede leer, entre otras cosas, que la compra del castillo se concretó cuando la pareja regente visitó la casa de la infancia del Príncipe Enrique Le Cayrou. La pareja se enteró de que el castillo, a 15 kilómetros de distancia, estaba a la venta.
Poco después, estaba en manos danesas. Henrik mismo declaró en un libro: " En muy poco tiempo, nos convertimos en los felices propietarios de un hermoso y pequeño castillo de vino en una de las zonas más bellas de Francia, cerca de mi familia", escribe la Casa Real.
La conexión francesa
Estar cerca de la familia francesa, según Hovbakke Sørensen, también es un elemento importante en el hecho de que el Chateau se ha convertido en la residencia de vacaciones de verano favorita de Margrethe y Henry, y aún lo es incluso después de la muerte de este último.
- A través de Cayx, la pareja a lo largo de los años ha logrado mantener el contacto con los franceses. Ambos en el país, pero también en origen. Al quedarse en el castillo y convertirlo en algo permanente cada año, la pareja regente también ha tenido la oportunidad de reunirse con el pueblo francés, dice.
Durante la vida del Príncipe Enrique, la Reina y el Príncipe solían pasar varias semanas en el castillo del vino francés cada verano, y esta tradición ha continuado con Su Majestad después de la muerte del Príncipe Enrique. Por lo tanto, al momento de escribir, ella también está en el castillo, donde celebra unas vacaciones privadas de verano.
- Definitivamente dice algo sobre el lugar donde la Reina sigue viniendo aquí. Originalmente debe haber sido el deseo de Henry de acercarse a la familia, pero ahora la majestad indica que está con ella y que Cayx también es una parte importante de su vida, dice Lars Hovbakke.
Un estilo relajado
Síntoma del aniversario, históricamente se han organizado una serie de reuniones de prensa memorables y otros eventos en el castillo francés del vino, que ha sido un punto de encuentro natural para todos los miembros de la casa real.
En 2014, toda la familia inmediata se reunió en francés con motivo del 80 cumpleaños del príncipe Enrique. En general, el Chateau de Cayx es un lugar donde puedes adoptar un estilo más relajado que, por ejemplo, en Marselisborg, la residencia de verano danesa.
- Cayx es una casa de vacaciones. Cuando la reina está fuera del país, no puede ser regente, por eso es natural que esté más relajada. Ella está libre de obligaciones aquí. El ambiente es más libre, incluso en la conferencia de prensa tradicional, y no es del todo formal de la misma manera, dice Lars Hovbakke Sørensen a Kendes.dk.
En el momento de la compra en 1974, según la Casa Real, el castillo estaba algo incluido en el diente de los tiempos, y durante un período posterior a la compra siguió una restauración importante. " Aquí, todos en la familia echaron una mano, y sus Altezas Reales, el Príncipe Heredero y el Príncipe Joaquín, se encargaron, entre otras cosas, de pintar los bancos del jardín " , escribe Kongehuset.dk.
https://kendte.dk/i-aar-er-dronningens-besoeg-noget-saerligt/?image=1
16 de agosto de 2019 22: 01 | Por: Jonathan Lykke Lilmoës, jl@newsbreak.dk
La visita anual de la Reina al Chateau de Cayx este año es algo muy especial.
En 1974, el príncipe Henrik y la reina Margrethe se enamoraron del castillo de vino Chateau de Cayx, algo desgastado, y lo golpearon. Por lo tanto, este año hace 45 años que el castillo francés ha estado en manos danesas. Según el historiador Lars Hovbakke Sørensen, hay una razón especial para esto.
- El castillo ha tenido un tremendo significado de muchas maneras diferentes. En primer lugar, es, y ha sido, un santuario tanto para la Majestad como para el Príncipe Henrik. Un lugar donde podrían haber estado en paz de una manera diferente que en Dinamarca. Un lugar donde están más fuera del foco público, le dice a Kendes.dk.
La propia casa real anunció el viernes el aniversario del castillo. En una descripción exhaustiva, se puede leer, entre otras cosas, que la compra del castillo se concretó cuando la pareja regente visitó la casa de la infancia del Príncipe Enrique Le Cayrou. La pareja se enteró de que el castillo, a 15 kilómetros de distancia, estaba a la venta.
Poco después, estaba en manos danesas. Henrik mismo declaró en un libro: " En muy poco tiempo, nos convertimos en los felices propietarios de un hermoso y pequeño castillo de vino en una de las zonas más bellas de Francia, cerca de mi familia", escribe la Casa Real.
La conexión francesa
Estar cerca de la familia francesa, según Hovbakke Sørensen, también es un elemento importante en el hecho de que el Chateau se ha convertido en la residencia de vacaciones de verano favorita de Margrethe y Henry, y aún lo es incluso después de la muerte de este último.
- A través de Cayx, la pareja a lo largo de los años ha logrado mantener el contacto con los franceses. Ambos en el país, pero también en origen. Al quedarse en el castillo y convertirlo en algo permanente cada año, la pareja regente también ha tenido la oportunidad de reunirse con el pueblo francés, dice.
Durante la vida del Príncipe Enrique, la Reina y el Príncipe solían pasar varias semanas en el castillo del vino francés cada verano, y esta tradición ha continuado con Su Majestad después de la muerte del Príncipe Enrique. Por lo tanto, al momento de escribir, ella también está en el castillo, donde celebra unas vacaciones privadas de verano.
- Definitivamente dice algo sobre el lugar donde la Reina sigue viniendo aquí. Originalmente debe haber sido el deseo de Henry de acercarse a la familia, pero ahora la majestad indica que está con ella y que Cayx también es una parte importante de su vida, dice Lars Hovbakke.
Un estilo relajado
Síntoma del aniversario, históricamente se han organizado una serie de reuniones de prensa memorables y otros eventos en el castillo francés del vino, que ha sido un punto de encuentro natural para todos los miembros de la casa real.
En 2014, toda la familia inmediata se reunió en francés con motivo del 80 cumpleaños del príncipe Enrique. En general, el Chateau de Cayx es un lugar donde puedes adoptar un estilo más relajado que, por ejemplo, en Marselisborg, la residencia de verano danesa.
- Cayx es una casa de vacaciones. Cuando la reina está fuera del país, no puede ser regente, por eso es natural que esté más relajada. Ella está libre de obligaciones aquí. El ambiente es más libre, incluso en la conferencia de prensa tradicional, y no es del todo formal de la misma manera, dice Lars Hovbakke Sørensen a Kendes.dk.
En el momento de la compra en 1974, según la Casa Real, el castillo estaba algo incluido en el diente de los tiempos, y durante un período posterior a la compra siguió una restauración importante. " Aquí, todos en la familia echaron una mano, y sus Altezas Reales, el Príncipe Heredero y el Príncipe Joaquín, se encargaron, entre otras cosas, de pintar los bancos del jardín " , escribe Kongehuset.dk.
https://kendte.dk/i-aar-er-dronningens-besoeg-noget-saerligt/?image=1
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Gracias cotis por las fotos. Tengo sentimientos ambivalentes sobre Margrethe. A menudo no es tan regia como me gustaría (Benedikte es muuucho más regia, siempre), pero me gusta. Y es multifacética, con muchos intereses. Y amo a sus perros salchicha ... 
Será que es un documental? Deberían verse cámaras a su al rededor, o no? En el artículo que compartí del periódico local, en ningún momento mencionan que hubieran cámaras grabándola en su visita al mercado. Pero ojalá sí lo sea.
A propósito de documentales jaja. Recordé que para sus bodas de oro, vi este divertido video de Margrethe y Henrik en Cayx en 1999. Henrik se aleja un momento y ella lo llama silvándole jajaja, él le contesta: "cherie" jaja. Es muy divertido.
Saludos.
Bellísima y encantadora Margrethe. Disfrutando de Cayx y la maravillosa naturaleza que la rodea. En compañía de Tilia y pintando el paisaje. Sin duda es un lugar en el que puede relajarse completamente.
Encontré estas imágenes, que están muy separadas en el tiempo con las compartidas por la Casa Real, pero la esencia, la protagonista y el lugar son los mismos:
1981, con Balthazar en Cayx.
2019, con Tilia.
1992, pintando el hermoso paisaje que rodea al Château de Cayx.
2019, Margrethe sigue disfrutando sus aficiones artísticas. 
Con el amor de su vida, en el fondo se aprecia un poco el río Lot:
Encontré estas imágenes, que están muy separadas en el tiempo con las compartidas por la Casa Real, pero la esencia, la protagonista y el lugar son los mismos:
1981, con Balthazar en Cayx.
2019, con Tilia.
1992, pintando el hermoso paisaje que rodea al Château de Cayx.
2019, Margrethe sigue disfrutando sus aficiones artísticas. 
Con el amor de su vida, en el fondo se aprecia un poco el río Lot:
Última edición:
Durante 45 años, la Reina de Dinamarca y su familia han pasado parte del verano en su casa en el sur de Francia; el Château de Cayx, a treinta kilómetros de Cahors. Una residencia adquirida poco después de su entronización, mientras la pareja real buscaba un lugar de veraneo. Y no es un lugar cualquiera. El esposo de la Reina, quien murió en febrero de 2018, era de un pueblo vecino. La familia produce su propio vino y da la bienvenida al público en su finca.
Una historia de amor entre el Lot y Dinamarca:
La Reina habla francés perfecto, y no pierde palabras cuando se trata de hablar sobre el territorio que eligió como lugar de veraneo en 1974. En ese momento, estaba casada durante siete años con un francés. Ella decide instalarse en su región de origen. Henri de Laborde de Monpezat proviene de una familia de Albas, parte de la industria de cultivo en Indochina. El joven Henri creció en Cahors desde los 5 años hasta los 16 años. Habiéndose convertido en diplomático, conoció a la futura reina en Inglaterra y se casó con ella en 1967. Sus dos hijos, Frederick y Joachim, nacieron los siguientes dos años. Y unos años más tarde, es en Luzech donde encuentran esta hermosa bodega, a un cuarto de hora del feudo familiar del que se convirtió en el Príncipe Henrik. “Cuando buscábamos una casa, queríamos que estuviera cerca de la familia de mi esposo. Y teníamos muchas ganas de mantener un viñedo, de hacer nuestro vino. Es parte de nuestras raíces locales, somos parte de la vida aquí “, dice la Reina Margarita.
Puedes cruzarte a la Reina en el mercado de Cahors.
Reconocida por su simplicidad, la Reina es vista regularmente en el mercado de Cahors o en el pueblo de Luzech, mientras que sus hijos y nietos a veces van a la base náutica, cuando están de visita en el lugar. El más joven, Joachim, parece particularmente apegado a sus raíces lotoises.
“Son personas extremadamente corteses. La Reina está esperando en la cola como todos los demás cuando va de compras!”, dice Micheline, residente de Luzech.
El servicio de seguridad también es mínimo en torno a la soberana, dos policías vestidos de civil la acompañan discretamente. Y también es muy discreto cómo vienen a la región. No hay jet privado para la familia real: al difunto Príncipe Henrik le encantaba terminar su viaje en tren desde París a Toulouse, él llegaba un par de días antes al Castillo y esperaba a su esposa ahí, mientras que la Reina Margrethe viaja en avión en las líneas comerciales a Blagnac, donde Olivier Lesénécal, el ex secretario privado de su esposo, la recoge en auto.
Una historia de amor entre el Lot y Dinamarca:
La Reina habla francés perfecto, y no pierde palabras cuando se trata de hablar sobre el territorio que eligió como lugar de veraneo en 1974. En ese momento, estaba casada durante siete años con un francés. Ella decide instalarse en su región de origen. Henri de Laborde de Monpezat proviene de una familia de Albas, parte de la industria de cultivo en Indochina. El joven Henri creció en Cahors desde los 5 años hasta los 16 años. Habiéndose convertido en diplomático, conoció a la futura reina en Inglaterra y se casó con ella en 1967. Sus dos hijos, Frederick y Joachim, nacieron los siguientes dos años. Y unos años más tarde, es en Luzech donde encuentran esta hermosa bodega, a un cuarto de hora del feudo familiar del que se convirtió en el Príncipe Henrik. “Cuando buscábamos una casa, queríamos que estuviera cerca de la familia de mi esposo. Y teníamos muchas ganas de mantener un viñedo, de hacer nuestro vino. Es parte de nuestras raíces locales, somos parte de la vida aquí “, dice la Reina Margarita.
Puedes cruzarte a la Reina en el mercado de Cahors.
Reconocida por su simplicidad, la Reina es vista regularmente en el mercado de Cahors o en el pueblo de Luzech, mientras que sus hijos y nietos a veces van a la base náutica, cuando están de visita en el lugar. El más joven, Joachim, parece particularmente apegado a sus raíces lotoises.
“Son personas extremadamente corteses. La Reina está esperando en la cola como todos los demás cuando va de compras!”, dice Micheline, residente de Luzech.
El servicio de seguridad también es mínimo en torno a la soberana, dos policías vestidos de civil la acompañan discretamente. Y también es muy discreto cómo vienen a la región. No hay jet privado para la familia real: al difunto Príncipe Henrik le encantaba terminar su viaje en tren desde París a Toulouse, él llegaba un par de días antes al Castillo y esperaba a su esposa ahí, mientras que la Reina Margrethe viaja en avión en las líneas comerciales a Blagnac, donde Olivier Lesénécal, el ex secretario privado de su esposo, la recoge en auto.
Bueno, pero allí estaba, nuestra querida Majestad, exactamente donde suele estar en esta época del año; en el castillo de Cayx, el hermoso castillo del vino en el suroeste de Francia.
El viernes pasado, la Casa Real envió estas hermosas fotos, de la Reina y la perra de la corte Tilia disfrutando de la compañía del otro en la hermosa campiña francesa.
Desde que la pareja regente compró el castillo de Cayx hace 45 años, en 1974, el castillo ha sido la base de la familia real en Francia a lo largo de los años. Durante la vida del Príncipe Enrique, la Reina y el Príncipe pasaron varias semanas en el castillo del vino francés cada verano, y esta tradición, afortunadamente, Su Majestad la continuó después de la muerte del Príncipe.
Como a lo largo de los años, la Reina siempre pinta cuando se queda en el Castillo de Cayx; esto también se ve en las nuevas imágenes aquí, tal como es ella, y como hemos descrito anteriormente, le encanta visitar el gran mercado de alimentos en Cahors.
Le deseamos a la Reina unas maravillosas vacaciones.
#bonnesvacances
El viernes pasado, la Casa Real envió estas hermosas fotos, de la Reina y la perra de la corte Tilia disfrutando de la compañía del otro en la hermosa campiña francesa.
Desde que la pareja regente compró el castillo de Cayx hace 45 años, en 1974, el castillo ha sido la base de la familia real en Francia a lo largo de los años. Durante la vida del Príncipe Enrique, la Reina y el Príncipe pasaron varias semanas en el castillo del vino francés cada verano, y esta tradición, afortunadamente, Su Majestad la continuó después de la muerte del Príncipe.
Como a lo largo de los años, la Reina siempre pinta cuando se queda en el Castillo de Cayx; esto también se ve en las nuevas imágenes aquí, tal como es ella, y como hemos descrito anteriormente, le encanta visitar el gran mercado de alimentos en Cahors.
Le deseamos a la Reina unas maravillosas vacaciones.
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la reina siempre fiel a sus perritos
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