La joya de reina propiedad de Simoneta Gómez-Acebo que debería tener Letizia
Aunque estaba en el lote de joyas de pasar, la condesa de Barcelona decidió entregársela a su nieta Simoneta con motivo de su boda
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La joya de reina propiedad de Simoneta Gómez-Acebo que debería tener Letizia
Aunque estaba en el lote de joyas de pasar, la condesa de Barcelona decidió entregársela a su nieta Simoneta con motivo de su boda
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La joya de reina propiedad de Simoneta Gómez-Acebo que debería tener Letizia
Aunque estaba en el lote de joyas de pasar, la condesa de Barcelona decidió entregársela a su nieta Simoneta con motivo de su boda
Simoneta, con el broche. (Gtres)
Por
N.Tiburcio
13/01/2021 - 05:00
“Dado en Lausanne, a 29 de junio de 1963. Yo, doña Victoria Eugenia de Battenberg y Windsor, Reina que fui de España por mi matrimonio con el Rey Alfonso XIII, de cuyo enlace subsistieron al presente cuatro hijos, llamados Don Jaime, Don Juan, Doña Beatriz y Doña Cristina, por el presente testamento ológrafo ordeno mi última voluntad según las siguientes cláusulas…”. Así dan comienzo las últimas voluntades de la reina Victoria Eugenia, un testamento al que se sumaban dos codicilos.
En uno de ellos, aparecen descritas las que son las joyas de pasar: "Las alhajas que recibí en usufructo del rey don Alfonso XIII y de la misma infanta Isabel, que son: una diadema de brillantes con tres flores de lis, el collar de chatones más grande, el collar con treinta y siete perlas grandes, un broche de brillantes del cual cuelga una perla en forma de pera llamada La Peregrina, un par de pendientes con un brillante grueso y brillantes alrededor, dos pulseras iguales de brillantes, cuatro hilos de perlas grandes, un broche con una perla grande gris pálido rodeada de brillantes y del cual cuelga una perla en forma de pera, todas ellas, desearía, si es posible, se adjudicase a mi hijo Don Juan, rogando a éste que las transmita a mi nieto Don Juan Carlos. El resto de mis alhajas, que se repartan entre mis dos hijas”.
Estas joyas están destinadas a ir pasando de reina en reina, tal como dejó escrito Victoria Eugenia. Y así ha sido. Tras la proclamación de Felipe VI en junio de 2014, doña Letizia asumió la titularidad del lote y en estos seis años ya ha lucido muchas de ellas, como las pulseras gemelas o la tiara de la Flor de Lis. Sin embargo, hay una alhaja mencionada por la reina Ena en su testamento que muy difícilmente acabará en el joyero de la actual Reina de España.
Hablamos del "broche de brillantes del cual cuelga una perla en forma de pera llamada La Peregrina". La condesa de Barcelona, quien recibió las joyas por ser ella la mujer del heredero al trono, cumplió con las voluntades de su suegra, pero no del todo, ya que decidió entregar el broche -sin la Peregrina, ya que esta sigue en manos de la línea reinante- a su nieta Simoneta Gómez-Acebo, tal como revela la página de Instagram Joyas Reales, a la que Simoneta da su apoyo con likes, una prueba de la veracidad de la información.
La reina Victoria Eugenia tenía especial cariño a este broche, que lució en actos tan importantes y simbólicos como la boda de Isabel II. Al heredar el broche, María de las Mercedes también lo llevó, siempre con la Peregrina colgando de él. Pero en 1990 decidió regalárselo a su nieta Simoneta con motivo de su boda con José Miguel Fernández Sastrón. Desde entonces, Simoneta ha llevado el broche del lazo en distintos eventos, como en el enlace de su hermano Beltrán o la cena previa a la boda de don Felipe y doña Letizia, cuando lo lució prendido del pelo.
Simoneta Gómez-Acebo, con el broche. (Gtres)