- Registrado
- 6 Jul 2006
- Mensajes
- 20.239
- Calificaciones
- 69.062
Dos meses sin Yeremi Vargas
La familia resiste porque cree que está vivo. El equipo de investigación no abandonará la Isla «hasta llegar al final»
Noelia Rochas
Las Palmas de Gran Canaria
«Si perdemos la esperanza, perdemos a Yeremi». La familia reza porque la investigación que busca el paradero de Yeremi Vargas, de siete años, desaparecido el 10 de marzo en Vecindario, no cierre el caso. Se han hecho inmersiones en cien pozos y estanques, mientras la Isla sigue empapelada de carteles.
Nos dicen que tengamos paciencia, que ellos van a seguir hasta el final», contaba ayer Milagros Suárez, tía del pequeño desaparecido en Los Llanos y portavoz de la familia, refiriéndose al equipo criminalístico de la Guardia Civil que se ocupa de la investigación del extraño caso. Y es que tanto la familia de Yeremi como el Ayuntamiento de Santa Lucía de Tirajana aseguran que sólo están tranquilos por la presencia de este grupo especializado llegado de la Península para desvelar el terrible caso. Sin embargo, el hermetismo que rodea su trabajo no deja traspasar si ha habido avances significativos. Mientras tanto, la joven madre del pequeño, Ithaisa Suárez, intenta sobrellevar la angustiosa espera por el bien de su otro hijo, Aidam, que ha empezado a reproducir gestos de su hermano.
Hoy se cumplen dos meses de la desaparición, sucedida la tarde del 10 de marzo, pero para la familia no será un día especial. «No nos dice nada la fecha porque nosotros lo tenemos vivo cada día», dijo ayer Milagros. José Suárez, abuelo del niño, resume la esperanza que mantiene en pie a toda la familia. «Estamos seguros de que todo saldrá bien porque tenemos fe», expresaba emocionado.
Pero la calle Honduras de Los Llanos nunca ha vuelto a ser la misma. Los carteles que el Ayuntamiento sigue proporcionando a la familia no han dejado de empapelar el municipio y la Isla, a pesar de que siempre hay quienes hunden los ánimos sin intención. «Hay gente que nos dice cuando les repartimos carteles que nos afanemos más porque seguramente el niño está muerto», contó Milagros. La familia sigue unida como una piña en la hipótesis de que «a Yeremi le secuestró alguien que lo supo engatusar». La familia también descarta que el caso se relacione con redes de tráfico de órganos o niños, como se sospecha con la niña desaparecida en Portugal.
Rastreos subacuáticos.
La familia resiste porque cree que está vivo. El equipo de investigación no abandonará la Isla «hasta llegar al final»
Noelia Rochas
Las Palmas de Gran Canaria
«Si perdemos la esperanza, perdemos a Yeremi». La familia reza porque la investigación que busca el paradero de Yeremi Vargas, de siete años, desaparecido el 10 de marzo en Vecindario, no cierre el caso. Se han hecho inmersiones en cien pozos y estanques, mientras la Isla sigue empapelada de carteles.
Nos dicen que tengamos paciencia, que ellos van a seguir hasta el final», contaba ayer Milagros Suárez, tía del pequeño desaparecido en Los Llanos y portavoz de la familia, refiriéndose al equipo criminalístico de la Guardia Civil que se ocupa de la investigación del extraño caso. Y es que tanto la familia de Yeremi como el Ayuntamiento de Santa Lucía de Tirajana aseguran que sólo están tranquilos por la presencia de este grupo especializado llegado de la Península para desvelar el terrible caso. Sin embargo, el hermetismo que rodea su trabajo no deja traspasar si ha habido avances significativos. Mientras tanto, la joven madre del pequeño, Ithaisa Suárez, intenta sobrellevar la angustiosa espera por el bien de su otro hijo, Aidam, que ha empezado a reproducir gestos de su hermano.
Hoy se cumplen dos meses de la desaparición, sucedida la tarde del 10 de marzo, pero para la familia no será un día especial. «No nos dice nada la fecha porque nosotros lo tenemos vivo cada día», dijo ayer Milagros. José Suárez, abuelo del niño, resume la esperanza que mantiene en pie a toda la familia. «Estamos seguros de que todo saldrá bien porque tenemos fe», expresaba emocionado.
Pero la calle Honduras de Los Llanos nunca ha vuelto a ser la misma. Los carteles que el Ayuntamiento sigue proporcionando a la familia no han dejado de empapelar el municipio y la Isla, a pesar de que siempre hay quienes hunden los ánimos sin intención. «Hay gente que nos dice cuando les repartimos carteles que nos afanemos más porque seguramente el niño está muerto», contó Milagros. La familia sigue unida como una piña en la hipótesis de que «a Yeremi le secuestró alguien que lo supo engatusar». La familia también descarta que el caso se relacione con redes de tráfico de órganos o niños, como se sospecha con la niña desaparecida en Portugal.
Rastreos subacuáticos.
Mientras tanto, la búsqueda no ha cesado. El edil de Seguridad de Santa Lucía, Luis Campos, explicó ayer que «se han rastreado cerca de cien pozos, estanques y presas del entorno con cámaras acuáticas». Los GEA no han parado en el último mes, y con el rastreo de la última veintena de instalaciones, se abrirá una segunda fase de la búsqueda selectiva. Protección Civil volverá a coordinar rastreos en cuevas y zonas rurales que, aunque ya han sido peinadas, pueden dar, en opinión del concejal Luis Campos, «nuevas pistas, ahora que ha pasado más tiempo».