SU ALTEZA SERENISIMA CHARLENE DE MÓNACO
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Podrá caernos bien o mal, gustarnos más o menos, estar de acuerdo o no con sus cirugías y retoques o con cómo se conduce o no como princesa de Mónaco, pero lo que si he de reconocer es que el 99% de las veces va impecablemente vestida, enjoyada, peinada y maquillada. Me encanta prácticamente todo lo que luce.
Que le vayan bien o no los distintos estilos que luce es otra cosa, digo porque percha tiene la verdad, pero no todos los estilos le van bien, como a cualquiera. Un diez para sus estilistas y diseñadores. Si mostrara más empatía y amplias sonrisas, creo que entonces poco nos fijaríamos en lo que luce o cómo lo luce para resaltar su encanto, su charme o su simpatía, y eso la encumbraría como una de las mujeres más elegantes y estilosas del mundo, al puro estilo de su cuñada Caroline, que muchas veces luce ropa horrorosa e imposible, pero nadie es capaz de señalarla por eso porque su encanto lo suple todo y ella lleva la ropa, no la ropa a ella.
Ojalá Charlene deje de mostrar esa cara de estreñimiento permanente y se monte como se debe en su papel como princesa de Mónaco y como tal, apoye con todo sus causas humanitarias y también se vuelva un referente de estilo, charme, encanto y atracción de un principado que prácticamente de eso vive.
Que le vayan bien o no los distintos estilos que luce es otra cosa, digo porque percha tiene la verdad, pero no todos los estilos le van bien, como a cualquiera. Un diez para sus estilistas y diseñadores. Si mostrara más empatía y amplias sonrisas, creo que entonces poco nos fijaríamos en lo que luce o cómo lo luce para resaltar su encanto, su charme o su simpatía, y eso la encumbraría como una de las mujeres más elegantes y estilosas del mundo, al puro estilo de su cuñada Caroline, que muchas veces luce ropa horrorosa e imposible, pero nadie es capaz de señalarla por eso porque su encanto lo suple todo y ella lleva la ropa, no la ropa a ella.
Ojalá Charlene deje de mostrar esa cara de estreñimiento permanente y se monte como se debe en su papel como princesa de Mónaco y como tal, apoye con todo sus causas humanitarias y también se vuelva un referente de estilo, charme, encanto y atracción de un principado que prácticamente de eso vive.
