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Los actores, en general. Me chifla el cine y la profesión, pero escuchar las entrevistas de los actores filosofando y desvariando taaan a menudo. Se creen dioses.
Los psicólogos. He tenido experiencias cercanas y como si ná (con todo mi respeto a los psicólog@s que nos leen)
Lo de la casa en propiedad, jeje, está muy arraigado aquí, es verdad. No hay nada mejor que el alquiler, yo estoy viviendo en una casa que no podría comprar ni por asomo. Y cada unos años, cambio.
Algunas modas tipo: Las zapatillas Victoria, en serio, no lo entiendo.
El manos libres por la calle, como si fueras un ido, lo he probado y no.
Las joyas,relojes, etc, será que me gustan más los abalorios de todo tipo y, no sé, me da cosica llevar tanta pasta encima....
Y lo de "ir con la verdad por delante", "porque yo voy de frente", la "sinceridad ante todo"... pues tampoco. Y la educación, para cuándo?
Creo que la maldad está sobrevalorada. Tiene mucho prestigio intelectual. En las pelis y series de televisión el malo siempre es listísimo y sofísticado. Escucha ópera, habla siete idiomoas y lee a Descartes. O a Maquiavelo.
Y se supone que la bondad y la buena voluntad es cosa de simplones.
Mi experiencia vital es justo la contraria. Las personas inteligentes son casi siempre sencillas y nobles.
Las personas atravesadas, complicadas, puñeteras...suelen ser perfectamente idiotas. Y por el mero hecho de ser malas ya se creen listisimas.