Alexandra de Hannover sale con un Dj millonario, hijo de banqueros
No fue un encuentro casual ni era la primera vez que Alexandra de Hannover, de 17 años, a punto de cumplir los 18, tenía una cita con Ben Sylvester Strautmann, un alemán de 18 años, deportista consumado y jugador de baloncesto en el equipo nacional de Mónaco.
Pero hace unos días, la foto de la hija menor de Carolina de Mónaco, viendo el encuentro de la Champions entre el equipo del Mónaco contra el equipo de GUardiola, el Manchester City, al que eliminó, junto a un joven atractivo del que la prensa internacional no tenía nombre ni origen, se convirtió en la noticia del momento para la prensa alemana: Su alteza real Alexandra de Hannover vive su primer amor, escribieron los titulares de la toda la prensa social.
Y ha sido la prensa rosa germana quien ha identificado a este joven llamado Sylvester, porque nació un 31 de diciembre, día de San Silvestre, a quien los alemanes (y los españoles) dedican la última noche de año.
El príncipe Ernesto de Hannover, tercer marido de Carolina de Mónaco, de quien está separada pero no divorciada, puede estar contento. Su hija, la única hermana de Ernesto y Christian, nacidos de su primer matrimonio, va por buen camino. Es estudiosa, sana, seria, muy germánica y no parece que seguir la senda de las princesas monegascas de la familia de su madre.
La niña de sus ojos vive su primer romance con un alemán, hijo de banqueros, que residen desde hace años en el principado de Mónaco y y cuya familia es originaria de la Baja Sajonia, donde también nació Ernesto.
Ben Sylvester no es uno más de los acompañantes habituales de las princesas y príncipes Grimaldi, que han protagonizado sonados escándalos sentimentales con diversos guardaespaldas (Estefanía), con más de un play boy (Carolina con Philippe Junot), con actores y cómicos (Charlotte), y son padres de hijos bastardos (Alberto II).
Según la prensa alemana, la familia de Ben Sylvester amasó una gran fortuna como fabricantes de maquinaria agrícola, lo que les permitió convertirse más tarde en banqueros. Pero además de brillante deportista, una afición que comparte con Alexandra, notable campeona de patinaje artístico sobre hielo, Ben y algunos de sus amigos, son afamados Djs en algunos de los locales más exclusivos de Montecarlo.
El próximo 8 de julio, se celebrará en el castillo de los Hannover en Marienbrug la boda de Ernesto Augusto Jr., con la diseñadora rosa Ekaterina Malysheva. Podría ser la presentación oficial de Alexandra y su joven pareja. Y pocos días después, el 20 de julio, Alexandra cumple su mayoría de edad (nació el mismo día que Andreíta, la hija de Jesulín y Belén Esteban), seguramente con otra gran fiesta en la que no faltará Ben Sylvester. Christian, el otro hijo de Ernesto estudia y vive en Madrid, con la millonaria peruana Alessandra de Osma, su pareja oficial, con la que asistió hace unos días al Baile de la Rosa en Montecarlo.
No fue un encuentro casual ni era la primera vez que Alexandra de Hannover, de 17 años, a punto de cumplir los 18, tenía una cita con Ben Sylvester Strautmann, un alemán de 18 años, deportista consumado y jugador de baloncesto en el equipo nacional de Mónaco.
Pero hace unos días, la foto de la hija menor de Carolina de Mónaco, viendo el encuentro de la Champions entre el equipo del Mónaco contra el equipo de GUardiola, el Manchester City, al que eliminó, junto a un joven atractivo del que la prensa internacional no tenía nombre ni origen, se convirtió en la noticia del momento para la prensa alemana: Su alteza real Alexandra de Hannover vive su primer amor, escribieron los titulares de la toda la prensa social.
Y ha sido la prensa rosa germana quien ha identificado a este joven llamado Sylvester, porque nació un 31 de diciembre, día de San Silvestre, a quien los alemanes (y los españoles) dedican la última noche de año.
El príncipe Ernesto de Hannover, tercer marido de Carolina de Mónaco, de quien está separada pero no divorciada, puede estar contento. Su hija, la única hermana de Ernesto y Christian, nacidos de su primer matrimonio, va por buen camino. Es estudiosa, sana, seria, muy germánica y no parece que seguir la senda de las princesas monegascas de la familia de su madre.
La niña de sus ojos vive su primer romance con un alemán, hijo de banqueros, que residen desde hace años en el principado de Mónaco y y cuya familia es originaria de la Baja Sajonia, donde también nació Ernesto.
Ben Sylvester no es uno más de los acompañantes habituales de las princesas y príncipes Grimaldi, que han protagonizado sonados escándalos sentimentales con diversos guardaespaldas (Estefanía), con más de un play boy (Carolina con Philippe Junot), con actores y cómicos (Charlotte), y son padres de hijos bastardos (Alberto II).
Según la prensa alemana, la familia de Ben Sylvester amasó una gran fortuna como fabricantes de maquinaria agrícola, lo que les permitió convertirse más tarde en banqueros. Pero además de brillante deportista, una afición que comparte con Alexandra, notable campeona de patinaje artístico sobre hielo, Ben y algunos de sus amigos, son afamados Djs en algunos de los locales más exclusivos de Montecarlo.
El próximo 8 de julio, se celebrará en el castillo de los Hannover en Marienbrug la boda de Ernesto Augusto Jr., con la diseñadora rosa Ekaterina Malysheva. Podría ser la presentación oficial de Alexandra y su joven pareja. Y pocos días después, el 20 de julio, Alexandra cumple su mayoría de edad (nació el mismo día que Andreíta, la hija de Jesulín y Belén Esteban), seguramente con otra gran fiesta en la que no faltará Ben Sylvester. Christian, el otro hijo de Ernesto estudia y vive en Madrid, con la millonaria peruana Alessandra de Osma, su pareja oficial, con la que asistió hace unos días al Baile de la Rosa en Montecarlo.