Encontrar un/a peluquero/a que te corte el pelo bien, a tu gusto, que no te quiera cambiar el look, que no intente venderte su champú y su acondicionador, que no te cobre la hijuela es misión imposible, y cuando lo encuentras, y quieres volver una segunda vez, resulta que ya no está porque lo han despedido o ha cerrado el negocio o se ha cambiado de barrio.
Vamos, que cuando encuentras uno bueno es como para casarte con el y tenerlo contigo de por vida.
Que te compres una prenda que no te gusta se soluciona simplemente dejándola en el armario, pero el pelo no; el pelo tienes que llevarlo puesto todo el día y esperar al menos dos meses a que te crezca y te lo puedas arreglar.
Así que yo creo que si alguien inventa un aparato o un sistema para que podamos cortarnos y teñirnos el pelo en casa, exactamente como queremos, va a ser el invento del siglo.
Vamos, que cuando encuentras uno bueno es como para casarte con el y tenerlo contigo de por vida.
Que te compres una prenda que no te gusta se soluciona simplemente dejándola en el armario, pero el pelo no; el pelo tienes que llevarlo puesto todo el día y esperar al menos dos meses a que te crezca y te lo puedas arreglar.
Así que yo creo que si alguien inventa un aparato o un sistema para que podamos cortarnos y teñirnos el pelo en casa, exactamente como queremos, va a ser el invento del siglo.