candela paz
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Quizá si sean pálidas pero bueno para ser las primeras Tampoco han sido muy caras.
Un pequeño toque de realidad:
Una vez que se pasa el entusiasmo comprístico inicial, una se da cuenta de que se ha convertido en dueña de un montón de piedras "difíciles". Qué son piedras difíciles? Las que no tienen meta de utilización, las que no están destinadas a nada concreto, que además son pequeñas y que son las que sirven para llenar el fondo de los cajones
Las piedras pequeñas, salvo que se compren con un diseño in mente, son una belleza para ver, pour le plaisir des yeux (para el placer de los ojos) y un ejercicio de futilidad porque al final muchas de ellas no se usan.
Son caras de engastar porque se llevan a la vez mucho metal y mucha manufactura si lo elabora un joyero (más un fundidor, más un engastador)... y mucho tiempo de aprendizaje y capacitación para que lo pueda hacer una de nosotras. A montar una piedra grande se aprende fácilmente. A montar pequeñas mucho menos; se necesita un grado de especialización al que raramente llega quien es amateur.
Siendo realistas, basta sumar lo que se ha gastado en piedras pequeñas, de difícil y cara realización, y comparar esa suma con el precio de una piedra mejor y más grande. Compensó (pensando en su uso real en una pieza de joyería) comprar tanta piedra chica? A saber.
Quizá sirva para reflexionar una expresión andaluza "más vale una jartá (piedra grande) que cien jartaíllas (piedras diminutas)"