O
Ondina
Guest
Al principito nunca se le vio tan feliz como el día de la presentación. Gol por la escuadra al patrón! Por fin un hombre. Estaba exultante, fue su día de la victoria sobre JC. A medida que fue adquiriendo conciencia de la que se le venía encima, su sonrisa se fue transformado en rictus con cada aparición publica. El día de la boda tuvo sus momentos de oh cielos, no se si voy a poder con la hidra. Ella se esforzó por poner cara de cordero degollado pero no convenció.
El "amor" no volvió a la pareja hasta que el emérito fue abdicado y pillaron trono.