Nombres que ponen los padres a sus hijos que os parecen raros, no os gustan u os gustan.

Recuerdo a una chica de la facultad que se hacía llamar de manera que nos llamaba la atención, y nos contó el porqué
Ella era la más pequeña de cinco hermanas. Los padres estaban deseando tener un niño y se plantearon el quinto y último embarazo, si ya no salía niño no lo intentarían más.
Llegó el día del parto.... y.... otra niña, los padres desilusionados....
Al día siguiente el padre se fue al registro apesadumbrado, la funcionaria le preguntó el nombre elegido.... el padre dijo, ah pues no lo habíamos pensado nosotros queríamos un niño sabe usted.... mmmm.... no se, póngale Rosa... la funcionaria se lo quedó mirando y le dijo,.... pero caballero otra de sus hijas ya se llama Rosa no puede ponerle el mismo nombre como mínimo debería añadirle un segundo nombre....
El hombre contrariado miró a la funcionaria y le preguntó, como se llama usted?
La empleada pública alucinando le contestó, Victoria
Y ahí tuvo el padre la solución..... Rosa Victoria
La chica odiaba su nombre y se hacía llamar Vivi (las dos primeras sílabas de su segundo nombre) y se enfadaba muchísimo si alguien la llamaba por cualquiera de los dos nombres
Esta historia me parece muy triste. Que tus padres no se alegren de tu nacimiento porque no has sido lo que ellos esperaban debe de marcarte de por vida.
 
Esta historia me parece muy triste. Que tus padres no se alegren de tu nacimiento porque no has sido lo que ellos esperaban debe de marcarte de por vida.
Me parece increíble que hicieran eso. Es que da la sensación de que la hija les importaba un pimiento, sinceramente. Y "Rosa Victoria" de lo malo malo no me parecen tan terrible, pero imaginaos que la del registro se hubiese llamado Eufrasia.
 
Esta historia me parece muy triste. Que tus padres no se alegren de tu nacimiento porque no has sido lo que ellos esperaban debe de marcarte de por vida.
Yo conocía a la pequeña de 6 hermanas.
El padre buscando al macho.
Cuando nació la última y vio que era una niña se largó del hospital y apareció el día de la salida.
La chica se hacía llamar José,aunque se llamaba María José porque así la llamaban en casa.
Lo que es la vida luego es con la que mejor se llevaba el padre y estaba orgullosisimo de sus hijas.
Pero no empezó con buen pie.
 
Recuerdo a una chica de la facultad que se hacía llamar de manera que nos llamaba la atención, y nos contó el porqué
Ella era la más pequeña de cinco hermanas. Los padres estaban deseando tener un niño y se plantearon el quinto y último embarazo, si ya no salía niño no lo intentarían más.
Llegó el día del parto.... y.... otra niña, los padres desilusionados....
Al día siguiente el padre se fue al registro apesadumbrado, la funcionaria le preguntó el nombre elegido.... el padre dijo, ah pues no lo habíamos pensado nosotros queríamos un niño sabe usted.... mmmm.... no se, póngale Rosa... la funcionaria se lo quedó mirando y le dijo,.... pero caballero otra de sus hijas ya se llama Rosa no puede ponerle el mismo nombre como mínimo debería añadirle un segundo nombre....
El hombre contrariado miró a la funcionaria y le preguntó, como se llama usted?
La empleada pública alucinando le contestó, Victoria
Y ahí tuvo el padre la solución..... Rosa Victoria
La chica odiaba su nombre y se hacía llamar Vivi (las dos primeras sílabas de su segundo nombre) y se enfadaba muchísimo si alguien la llamaba por cualquiera de los dos nombres

Conté un caso parecido al principio del hilo; copio y pego:

La mujer de mi primo se llama Ana porque es la quinta niña y sus padres querían un niño. No sabían cómo llamarla, fue cesárea y su madre estuvo como 10 días en la clínica (años 70) y ella era el bebé sin nombre hasta que una enfermera empezó a llamarla Ana, como ella. Y con Ana se quedó. Odia su nombre ya que lo relaciona con que no tenían el mínimo interés en ella por ser niña.

También alucino de que, en casos como estos, los padres cuenten la historia del nombre que “eligieron”. Como madre, no acabo de entender este poco interés en un hijo, aunque fuera un episodio puntual hace años, y estas ganas de recordárselo. Mejor sería correr un tupido velo y decir que el nombre es por una buena amiga de la infancia o algo por estilo.

Aunque el caso de la Rosa repetida es más complicado...
 
Conté un caso parecido al principio del hilo; copio y pego:

La mujer de mi primo se llama Ana porque es la quinta niña y sus padres querían un niño. No sabían cómo llamarla, fue cesárea y su madre estuvo como 10 días en la clínica (años 70) y ella era el bebé sin nombre hasta que una enfermera empezó a llamarla Ana, como ella. Y con Ana se quedó. Odia su nombre ya que lo relaciona con que no tenían el mínimo interés en ella por ser niña.

También alucino de que, en casos como estos, los padres cuenten la historia del nombre que “eligieron”. Como madre, no acabo de entender este poco interés en un hijo, aunque fuera un episodio puntual hace años, y estas ganas de recordárselo. Mejor sería correr un tupido velo y decir que el nombre es por una buena amiga de la infancia o algo por estilo.

Aunque el caso de la Rosa repetida es más complicado...
Yo ni hijos tengo, y tampoco lo entiendo. Aunque me da un poco la impresión de que antiguamente algunos padres no sentían demasiado apego por sus hijos porque los tenían porque la gran mayoría no eran buscados (me refiero a que no había acceso a anticonceptivos).
 
En mi clase en el cole había una Visitación



Todos estos nombres están vinculados a algún episodio de la vida de la Virgen. Que si Visitación (de María a Isabel), Asunción (de María al cielo), Presentación (imagino que cuando Jesús va a buscar a su madre y se la lleva viva al cielo), Anunciación (el ángel Gabriel le anuncia a María el marronazo que le acaba de caer), Encarnación (el ángel, tras contarle esto a María, le dice que está oficialmente preñada), Tránsito (el paso de María de la Tierra al Cielo en manos de su hijo).

Los que no son advocaciones, los nombres vinculados a pasajes de la vida de la Virgen son una movida y si te los ponen hoy día, una putada.

Advocaciones bonitas: Carmen, Almudena, Covadonga, Nieves, Rocío, Esperanza, Guadalupe, Lourdes, Fátima, Araceli. El resto, para salir corriendo por muy devoto que seas, como Regla, Antigua, Coromoto, Angustias, Soledad, Dolores...

Lo tremendo es que la protagonista se llamaba, sin más, María/Miriam, tan simple, tan bonito.
 
Yo ni hijos tengo, y tampoco lo entiendo. Aunque me da un poco la impresión de que antiguamente algunos padres no sentían demasiado apego por sus hijos porque los tenían porque la gran mayoría no eran buscados (me refiero a que no había acceso a anticonceptivos).


A tirar de parientes o de santoral. De aquellos tiempos en los que los hijos eran obligados y no muy deseados, se ven nombres repetidísimos, nada de deseo u originalidad, nada especial. Es normal ver a familias donde se repetía el nombre de parientes difuntos o porque nacieron en días señalados, pero a poca gente de antes se la escucha decir "yo es que tenía deseo de llamar a mi hijo tal porque el nombre me gustaba o emocionaba". No se andaban con muchas leches.
 
Todos estos nombres están vinculados a algún episodio de la vida de la Virgen. Que si Visitación (de María a Isabel), Asunción (de María al cielo), Presentación (imagino que cuando Jesús va a buscar a su madre y se la lleva viva al cielo), Anunciación (el ángel Gabriel le anuncia a María el marronazo que le acaba de caer), Encarnación (el ángel, tras contarle esto a María, le dice que está oficialmente preñada), Tránsito (el paso de María de la Tierra al Cielo en manos de su hijo).

Los que no son advocaciones, los nombres vinculados a pasajes de la vida de la Virgen son una movida y si te los ponen hoy día, una putada.

Advocaciones bonitas: Carmen, Almudena, Covadonga, Nieves, Rocío, Esperanza, Guadalupe, Lourdes, Fátima, Araceli. El resto, para salir corriendo por muy devoto que seas, como Regla, Antigua, Coromoto, Angustias, Soledad, Dolores...

Lo tremendo es que la protagonista se llamaba, sin más, María/Miriam, tan simple, tan bonito.

Dolores no me gusta pero su diminutivo si Lola
 
A tirar de parientes o de santoral. De aquellos tiempos en los que los hijos eran obligados y no muy deseados, se ven nombres repetidísimos, nada de deseo u originalidad, nada especial. Es normal ver a familias donde se repetía el nombre de parientes difuntos o porque nacieron en días señalados, pero a poca gente de antes se la escucha decir "yo es que tenía deseo de llamar a mi hijo tal porque el nombre me gustaba o emocionaba". No se andaban con muchas leches.

Mi hermanas se llaman como la patrona del pueblo de mi padre, la del pueblo de mi madre la otra, mi hermano el nombre de mi padre y mi, mi madre me puso el nombre que quiso porque mi padre quería llamarme como su abuela y mi madre le dijo que ni hablar que su abuela tenia un nombre muy feo.
 

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