Veremos el futuro que tiene, si es su futuro soñado o le hacen soñar con ser la reina de España.Me sorprende la pregunta sobre que no pueda renunciar. Todo depende de que de verdad lo quiera, ahí no hay más.E insistes con la adolescencia y te pregunto ¿es que lo frecuente es tener una adolescencia al gusto de cada cual? ¿Desde cuando?
¿Quien puede hacer todo lo que le da la gana? O ?quien tiene al alcance de la mano hacer su santa voluntad? Te he puesto como ejemplo los años y años, no adolescencia, que Felipe hubo de atenerse a ciertas reglas de representación, ¿y...? Se recuperó con creces a cambio de una vida rica en sus labores, las que le gustaban, no precisamente productivas y de trabajo.
Solo un ejemplo. Sale la niña-adolescente con afanes de investigadora de lo que sea, hay mil cosas. En este santo pais lo de la investigación es tal lujo que quien tiene esa vocación ha de emigrar, eso es de cajón. Y atenerse a lo que se encuentre por el mundo. ¿Tendría esta niña-adolescente inconveniente alguno para trasladarse al lugar idóneo donde pudiera desarrollar sus capacidades? Sin esperar becas ni oportunidades de alta dificultad, Y lo mismo te diría con respecto a la música y otras muchas materias que en cuanto se quieren especializar los estudiantes ahí vienen los inconvenientes. ¿Tendría Leonor estos inconvenientes?
No me refiero a lo corto y efímero de una adolescencia, sino a un futuro de vida, a un proyecto de vida.