No me acabo de adaptar ni de estar bien en mi trabajo

Prima, te recomiendo el artículo de José Manuel Esteve llamado La formación de profesores: bases teóricas para el desarrollo de programas de formación inicial. En uno de los apartados nos habla de que nos lo pintan todo genial en el máster de profesorado para que seamos muy dinámicos ante personas que no van a tener ningún problema (como "mucho" que tienen inseguridades propias de la edad) y cómo nos frustramos cuando entramos en una clase y vemos a esa jauría de adolescentes que, además, cada año que pasa están peor educados y provocan que, al final, solo nos interese entrar en clase, decir nuestras cosas y largarnos. No es que haya profesores malos per se, es que al final terminas siendo mal profesor cuando ya estás quemadísimo por todo. En otras profesiones el burn out se puede resumir en una cara larga durante la reunión, pero la enseñanza te obliga a estar al pie del cañón 24/7 (porque nuestra tarea no termina cuando nos vamos del cole).

También te voy a decir que la educación no es solo ser profesor. Puedes, como dicen por arriba, optar por un doctorado, por la investigación, por la creación de contenidos editoriales... Que parece que todo se reduce a estar delante de gente y no tiene por qué. Yo me dedico a la educación y la única persona a la que veo es mi jefa y, la mayor parte de las veces, a través del ordenador ;)

No descarto sacarme un doctorado algún día para ejercer a nivel universitario. He probado tanto a nivel Primaria y Secundaria y ya tengo claro que no son mi lugar. ¡Y eso no es nada malo! Hay muchas maneras de dedicarte a la docencia sin tener que pasar un mal trago, pues la docencia NUNCA debería ser un mal trago.

Te quiero, prima ♥
 
Sinceramente y pretender ofender, quizás deberías planteare cambiar de profesión.
Esa insatisfacción de no estar a gusto o/y realizada las vas a arrastras siempre y te va a afectar tanto a ti como a tu trabajo.
No es malo cambiar de profesión, no serías la primera ni la última. A veces es difícil dar con la tecla.
 
Buenas, chicas.

Tengo 23 años y hace cosa de dos meses he empezado a trabajar de docente. He estudiado una carrera junto con el máster que me lo permite.

La verdad es que siempre he sentido que no tengo vocación para ello, aunque he acabado optando por ese camino porque es la salida más rápida y también desde casa se me ha empujado a ello.

Me está costando mucho adaptarme. Además soy una chica Asperger y los cambios me cuestan muchísimo, quizás más que a otros. Tengo problemas con la gestión del estrés y la ansiedad, pero a la vez estoy desmotivada y tengo problemas para organizarme y gestionarme el tiempo. Además, soy una persona que necesita tenerlo todo controlado y a la que ve que no controla algo, ya siente que se le escapa todo de su control y se acaba desmotivando y hasta frustrando y bloqueando. También cuando son muchas cosas de golpe me saturo y agobio con muchísima facilidad y aún me cuesta más organizarme. Ahora siento que hay momentos en los que paso estrés y ansiedad pero a la vez que estoy como aletargada, desmotivada...


Y sumadle eso que a nivel personal tampoco estoy en mi mejor momento. A raíz de un desengaño que tuve con una chica en una red social (del que ya hablé por aquí alguna vez en un comentario), algo con lo que me obsesioné, llevo dos años que siento que me he quedado como estancada, que no avanzo, que me siento vacía, perdida, desmotivada, incluso a veces triste. Al final no pasaba nada con esa chica, no tiene nada en mi contra ni me guarda ningún rencor, cometí un error, pero yo me he autocastigado mucho, tanto que me he metido yo sola en una espiral incomprensible e insana a nivel psicológico de la que no sé cómo salir. Y siento que ya no es lo que hubiera pasado con esa chica sinó que soy yo que no estoy bien, que me he malacostumbrado a ello. Cabe decir que me he encerrado mucho en mi misma. Yo hace más de dos años era feliz, sonreía más, estaba en paz y tranquila conmigo misma. Fue pasarme esto de la chica, autocastigarme, aislarme del mundo y encerrarme en mi misma, cabrearme conmigo misma y con el mundo, hasta el punto de removérseme muchas cosas en mi volviéndolas mucho más negativas: pensamientos, opiniones sobre cualquier tema, sentimientos, meterme yo sola en un bucle de rumiación en el que me he hecho mucho daño y ha provocado que me sienta vacía y desmotivada. Ahora que ha pasado el tiempo y que se que esta chica no tiene nada en mi contra me siento estúpida por sufrir y por haberme metido en ese bucle yo sola, que pudiera haber sido muy feliz y no lo he sido, que he estado autosaboteándome yo misma dándole tantas vueltas a todo, y además por algo que no era ni real. A veces en nuestra cabeza nos creamos historias que realmente ni son y nos acabamos haciendo mucho daño. Pero así sigo, sin acabar de estar bien.

Y, bueno, esta experiencia como docente me está resultando dura. Me cuesta dar clase a adolescentes. Primero es fácil porque son más pequeños pero segundo ya bfff... No sé imponer autoridad, se me suben a las barbas, me resulta prácticamente imposible hacer clase con ellos. Además, siempre he sido una persona que le cuesta mucho defenderse y más bien débil de carácter y además muy poco social. Además si ya me cuesta tener control sobre mi misma, aun me va a costar más controlar un grupo de personas. A veces he puesto deberes y hay quien no me los hace, por eso ya les hago hacer la faena en clase, algo que me desmotiva aun más. También voy bastante lenta corrigiendo faenas, con los exámenes soy ágil, aunque con ciertas faenas ya es diferente. Siento que voy lenta en todo, que son muchas cosas de golpe y me está costando mucho. También sumadle a que me cuesta tener iniciativa para tomar decisiones sobre personas o cosas ajenas a mi por mi misma, y aún más no teniendo experiencia. Hay días que me levanto y me pesan mucho las mañanas... Siento que el mundo gira, la vida avanza y yo sigo estancada.

Lo que sí que puedo decir positivo es que tengo unos muy buenos compañeros y el director muy buena persona y a los que aprecio muchísimo y ellos también a mi, aquí por suerte ningún problema y por eso a la vez me siento mal por estar así porque les veo dispuestos a ayudarme, aunque tampoco puedo estar siempre pidiendo ayuda, tengo que espavilar yo sola. Aunque, ya os digo, a la vez me siento mal por estar así por eso.

Todo el mundo que me conoce y sabe de mi trabajo está muy contento conmigo y se me dice que tengo mucha suerte de estar donde estoy. Es que en el fondo es cierto, no todo el mundo está donde estoy yo ahora, y menos a mi edad y hay mucha gente que se ha quedado sin trabajo, y más con todo eso. Pero siento que todo el mundo está contento menos yo, que debería de valorar más las cosas y estar contenta y ser optimista y no lo estoy siendo lo suficiente. Además, yo nunca he sido una persona de presumir de tener estudios y un trabajo bien pagado, siempre he sido muy humilde. Pienso que todos los trabajos son útiles e importantes, con estudios o sin. Durante los veranos he estado trabajando en fábricas y la experiencia ha sido muy buena. Nunca hay que desmerecer ningún trabajo ni creerse más que nadie.

Me he matriculado al doctorado para poder dedicarme a trabajar en la universidad, ya sea de investigación o enseñando, ya que, obviamente, enseñar en una universidad no es lo mismo que enseñar en un instituto, ya es otro nivel y la gente ya es más adulta y está porque quiere estar. Quizás a mi me resultaría mucho más fácil.

Perdón por la chapa, pero necesitaba desahogarme.


Muchos besos a todas. ❤️
Hol, yo también soy Asperger y me siento un poco identificada contigo si me quieres escribir por privado. Creo que lo veo deade la misma perspectiva.
 
Hola! Quería aportar mi granito de arena, a ver si te ayuda.
Es normal que te sientas perdida, llevas dos meses en un trabajo nuevo, exigente y para el que hacen falta horas de vuelo que aun no tienes. Es una experiencia más y puede ayudarte a realmente ver que no es tu vocación o, puede hacer que te curtas y le saques el punto y te acabe gustando.
Lo que me parece que te hace mucho daño es la rumiación constante de la que hablas, es agotador darle mil vueltas a todo, cuestionarlo todo, cuestionarte a ti misma, lo que pasó o dejó de pasar, sentir que tienes que estar contenta con lo que tienes o agradecida y culparte por no estarlo... es una rumiación obsesiva que me imagino que te llenará de pensamientos intrusivos... en el momento que produce el malestar que comentas y no te deja hacer tu vida normal (según comentas, te sientes triste, desmotivada), es bueno buscar ayuda profesional, ya sea psicológica o psiquiátrica.
Por el tema de dedicación profesional, tienes 23 años en mi opinión es completamente normal que tengas dudas de qué hacer a qué dedicarte y empieces a cerrar puertas y decidas a qué no te gustaría dedicarte. No hay nada de malo en ello, es ir perfilando tu vida profesional y ello conlleva decisiones difíciles. Un abrazo
 
Siento si a alguien no le gusta mi respuesta pero la autora del hilo pide opinión.

Si no tienes vocación de docente, déjalo. Ya hay muchos docentes así y al final los perjudicados son los alumnos. Seguro que hay algo que te guste y te aporte más que lo que haces ahora. Y sobre todo, que te haga feliz.
 
Prim@ eres muy joven y siempre somos nuestros peores jueces.

Creo que te tienes que plantear el motivo por el que no estás bien, es decir si es porque de verdad no quieres hacer ese trabajo o no te sientes agusto o porque tu misma en tu cabeza te has metido que no lo haces bien y que no vales ( a pesar de que te están felicitando y tienes feedback positivo).

Yo no podría ser profesora de verdad me quito el sombrero por las personas que de verdad tienen vocación, ánimo y paciencia para dar lo mejor de si mismas y compartir con los demás sabiduría y mucho menos de adolescentes, me parece una de las profesiones más estresante y de alto riesgo.

Date un tiempo porque nadie nace sabiendo y aprende a disipar la duda si es que no te ves, o te piensas que no vales.

Otro consejo que te ha dado otra prima que me parece bueno es que te platees dar clases a personas adultas.
 
Piensa que ningún trabajo es fácil en sus comienzos, hablo por experiencia propia.
Reconozco que no sería capaz de soportar a adolescentes, Enhorabuena por tu carrera y tu puesto de trabajo, este puesto que conseguiste por tus méritos no debes tirarlo a las primeras de cambio,date tiempo para asimilar lo que vas a vivir, mi consejo seria que debes buscar motivos que a los adolescentes les puedan interesar de la asignatura que impartes,(si la clase no es buena lo tendrás más dificil, pero siempre debes hacerles ver que TU eres quien lleva el control de tu clase,) seguramente te ven demasiado jovencita e intentan el control de la clase ellos
No debes agobiarte, tienes que planificarte, no sé si se pueden hacer examenes orales o sólo escritos (soy analfabeta en el tema de enseñanza)
Solo decirte que si este trabajo al finalizar el curso no te convence, busca alternativas como decían otras cotis, clases de adultos, o cualquier actividad que puedas realizar con lo que has estudiado
 
Imagino que tiene que ser durísimo ser docente, y menos aún si no tienes mucha vocación. Te voy a proponer un enfoque distinto.

¿Y si te la suda? Me explico.

Siendo prácticos, a quien más afecta el no entregar los deberes no es a ti, es a tus alumnos, y más en la situación de confinamiento/pandemia/clases online/etc. Si no los entregan, no tendrás con qué evaluarles. Si no tienes con qué evaluarles, suspenden. Tu no vas a aprobar a nadie que no haya hecho el mínimo. Y yo se lo dejaría caer, de buen rollo, pero que tengan las cosas claras, par que nadie se sorprenda cuando pase. Si ves que hay algún alumno que recurrentemente no entrega las tareas o da por saco en clase, habla con quien esté a cargo de la jefatura de profesorado y/o avisa a sus padres.
En cualquier caso, el problema y la complicación lo tienen ellos. Tú limítate a dar clase y en cuanto salgas del instituto, olvídate.

Creo que es buena idea lo de orientar tu docencia a la universidad o doctorado. Algún subnormalito en clase siempre te va a tocar, pero son los menos. Las relaciones profesor-alumno en la uni son más adultas y se andan con menos gilipolleces porque saben que eres adulto y no van a tener a ningún padre dando por saco.
Estoy de acuerdo.
Decirle a los alumnos adolescentes que ése es precisamente el trato que se les va a dar en la universidad (al menos, cuando yo iba): llega el profe, da la clase, atiende preguntas y adiós. El que se enganche al carro, bien, y el que no, que se apañe.
Y por supuesto, al salir, desconectar.

Ah, y lo de intentar dar clases a universitarios o a adultos, también puede ser una buena idea.
 
Te entiendo al 100%. Doy clases de francés a adolescentes y es un infierno. Se te suben a las barbas en 2 minutos, todo son risas y como me ven joven es aun peor. También hay este lado en el que intentas ser una profe guay y eso al principio casi que es peor, hay que intentar imponer un poco de autoridad porque sino estas perdida. Y creo que también influye las nuevas generaciones...la mayoría son unos maleducados, se distraen con una facilidad increíble y eso lo hace todo más difícil , hace 5 años tenia menos problemas :LOL: . Asi que no seas dura contigo misma, no creo que seas tu la que no se adapta, solo que últimamente son mas difíciles los adolescentes. Asi que paciencia, y no dudes en ser clara y sincera con ellos, si se comportan mal exprésate, a veces funciona.
 
Hola, acabo de leer el hilo y me he sentido identificada en algunas cosas, ya que acabo de empezar en la docencia, pero ojalá tener 23 años, tengo muchos más y ha sido un giro laboral de 180 grados.

¿Cómo fue todo, @hegoak
Buenas, chicas.

Tengo 23 años y hace cosa de dos meses he empezado a trabajar de docente. He estudiado una carrera junto con el máster que me lo permite.

La verdad es que siempre he sentido que no tengo vocación para ello, aunque he acabado optando por ese camino porque es la salida más rápida y también desde casa se me ha empujado a ello.

Me está costando mucho adaptarme. Además soy una chica Asperger y los cambios me cuestan muchísimo, quizás más que a otros. Tengo problemas con la gestión del estrés y la ansiedad, pero a la vez estoy desmotivada y tengo problemas para organizarme y gestionarme el tiempo. Además, soy una persona que necesita tenerlo todo controlado y a la que ve que no controla algo, ya siente que se le escapa todo de su control y se acaba desmotivando y hasta frustrando y bloqueando. También cuando son muchas cosas de golpe me saturo y agobio con muchísima facilidad y aún me cuesta más organizarme. Ahora siento que hay momentos en los que paso estrés y ansiedad pero a la vez que estoy como aletargada, desmotivada...


Y sumadle eso que a nivel personal tampoco estoy en mi mejor momento. A raíz de un desengaño que tuve con una chica en una red social (del que ya hablé por aquí alguna vez en un comentario), algo con lo que me obsesioné, llevo dos años que siento que me he quedado como estancada, que no avanzo, que me siento vacía, perdida, desmotivada, incluso a veces triste. Al final no pasaba nada con esa chica, no tiene nada en mi contra ni me guarda ningún rencor, cometí un error, pero yo me he autocastigado mucho, tanto que me he metido yo sola en una espiral incomprensible e insana a nivel psicológico de la que no sé cómo salir. Y siento que ya no es lo que hubiera pasado con esa chica sinó que soy yo que no estoy bien, que me he malacostumbrado a ello. Cabe decir que me he encerrado mucho en mi misma. Yo hace más de dos años era feliz, sonreía más, estaba en paz y tranquila conmigo misma. Fue pasarme esto de la chica, autocastigarme, aislarme del mundo y encerrarme en mi misma, cabrearme conmigo misma y con el mundo, hasta el punto de removérseme muchas cosas en mi volviéndolas mucho más negativas: pensamientos, opiniones sobre cualquier tema, sentimientos, meterme yo sola en un bucle de rumiación en el que me he hecho mucho daño y ha provocado que me sienta vacía y desmotivada. Ahora que ha pasado el tiempo y que se que esta chica no tiene nada en mi contra me siento estúpida por sufrir y por haberme metido en ese bucle yo sola, que pudiera haber sido muy feliz y no lo he sido, que he estado autosaboteándome yo misma dándole tantas vueltas a todo, y además por algo que no era ni real. A veces en nuestra cabeza nos creamos historias que realmente ni son y nos acabamos haciendo mucho daño. Pero así sigo, sin acabar de estar bien.

Y, bueno, esta experiencia como docente me está resultando dura. Me cuesta dar clase a adolescentes. Primero es fácil porque son más pequeños pero segundo ya bfff... No sé imponer autoridad, se me suben a las barbas, me resulta prácticamente imposible hacer clase con ellos. Además, siempre he sido una persona que le cuesta mucho defenderse y más bien débil de carácter y además muy poco social. Además si ya me cuesta tener control sobre mi misma, aun me va a costar más controlar un grupo de personas. A veces he puesto deberes y hay quien no me los hace, por eso ya les hago hacer la faena en clase, algo que me desmotiva aun más. También voy bastante lenta corrigiendo faenas, con los exámenes soy ágil, aunque con ciertas faenas ya es diferente. Siento que voy lenta en todo, que son muchas cosas de golpe y me está costando mucho. También sumadle a que me cuesta tener iniciativa para tomar decisiones sobre personas o cosas ajenas a mi por mi misma, y aún más no teniendo experiencia. Hay días que me levanto y me pesan mucho las mañanas... Siento que el mundo gira, la vida avanza y yo sigo estancada.

Lo que sí que puedo decir positivo es que tengo unos muy buenos compañeros y el director muy buena persona y a los que aprecio muchísimo y ellos también a mi, aquí por suerte ningún problema y por eso a la vez me siento mal por estar así porque les veo dispuestos a ayudarme, aunque tampoco puedo estar siempre pidiendo ayuda, tengo que espavilar yo sola. Aunque, ya os digo, a la vez me siento mal por estar así por eso.

Todo el mundo que me conoce y sabe de mi trabajo está muy contento conmigo y se me dice que tengo mucha suerte de estar donde estoy. Es que en el fondo es cierto, no todo el mundo está donde estoy yo ahora, y menos a mi edad y hay mucha gente que se ha quedado sin trabajo, y más con todo eso. Pero siento que todo el mundo está contento menos yo, que debería de valorar más las cosas y estar contenta y ser optimista y no lo estoy siendo lo suficiente. Además, yo nunca he sido una persona de presumir de tener estudios y un trabajo bien pagado, siempre he sido muy humilde. Pienso que todos los trabajos son útiles e importantes, con estudios o sin. Durante los veranos he estado trabajando en fábricas y la experiencia ha sido muy buena. Nunca hay que desmerecer ningún trabajo ni creerse más que nadie.

Me he matriculado al doctorado para poder dedicarme a trabajar en la universidad, ya sea de investigación o enseñando, ya que, obviamente, enseñar en una universidad no es lo mismo que enseñar en un instituto, ya es otro nivel y la gente ya es más adulta y está porque quiere estar. Quizás a mi me resultaría mucho más fácil.

Perdón por la chapa, pero necesitaba desahogarme.


Muchos besos a todas. ❤️



Hola, acabo de leer el hilo y me he sentido identificada en algunas cosas, ya que acabo de empezar en la docencia, pero ojalá tener 23 años, tengo muchos más y ha sido un giro laboral de 180 grados.

¿Cómo fue todo, cambiaste a adultos o sigues con adolescentes? Espero que mejorase todo :)
 
Buenas! Yo tengo 26 y este año he empezado a rotar en institutos, pero como orientadora. No sé qué especialidad das, en la mía hay más diversidad de puestos de trabajo y en dos experiencias estuve encantada y feliz, pero cuando me tocó plantarme delante de adolescentes me sentí muy identificada con lo que comentas. En mi caso la educación si es mi vocación, pero nunca me vi dando clases, por eso escogí otro camino. No obstante, dentro de la función de orientación te puede tocar, y a mi me tocó. Depende mucho de los grupos y los cursos, para mi los más complicados fueron los de tercero. Entiendo esa sensación de no poder imponerte, es muy complicado, y creo que para conseguir eso en estos casos debes empezar por acercarte a ellos, conocerlos, comprenderlos y generar un vínculo. Cuando consigas esta base, verás que la autoridad ya la tienes (dentro de lo que son los adolescentes y que siempre te encontrarás casos complicados). Como te comentaba alguna prima, cambia dinámicas, prueba otras cosas y dale un enfoque distinto. No abandones a los que necesitan más ayuda, sea por capacidad o comportamiento, pero no te lleves las complicaciones a lo personal, o estarás perdida.
Ve hacia delante con el doctorado, e investiga otras opciones de docencia con otros colectivos con los que quizás te encuentras más cómoda. Como te digo, no sé qué especialidad das, pero seguro que tienes muchas más opciones si la docencia al final no es lo que te hace feliz.
Un abrazo enorme y mucho ánimo, los comienzos son complicados y desde luego, la docencia a adolescentes mucho menos, te tiene que gustar y tienes que saber o aprender cómo llegar a ellos.
 
A ver, varias cosas, que veo mucha ignorancia por aquí:
-ser Asperger por si mismo no te incapacita para trabajar
-se puede realizar tu trabajo perfectamente bien aún sin tener vocación, lo que importa es echarle ganas
-si te agobias cuando hay muchas cosas, hay una solución bien sencilla: dividirte el trabajo, empezar por una cosa, luego otra y después otra. No hay por qué pretender hacerlo todo a la vez
-aunque dices que no eres muy social, en un trabajo es conveniente serlo y si no, aprender a serlo. Tener cierta relación con compañeros es importante
 

Temas Similares

20 21 22
Respuestas
255
Visitas
16K
Back