Una noche yendo en metro con mi hermana vimos un caso de acoso: un hombre adulto estaba siguiendo a una chica de 18 años que casi llorando le pedía que la dejara en paz. Avisamos a seguridad, la chica se bajó, nosotras con ella y el tipo detrás. Los de seguridad fueron a hablar con el hombre y él dijo que no pensaba salir sin la chica, ni se pensaba identificar. Le pregunté a seguridad si llamarían a la policía y nos dijeron que no "como no ha hecho nada, no podemos llamar" y la única solución era esperar con ella hasta que el hombre se marchase. Estuvimos una hora de reloj hasta que se marchó (después de dedicarnos gestos de burla) y acompañamos la chica a casa.
Y hoy veo esta noticia:
https://www.periodicoclm.es/articul...r-demolicion-pueblo/20180608154515008405.html
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Los jóvenes que repoblaron Fraguas, condenados a prisión y a pagar la demolición del pueblo
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¿Qué tiene que ver una cosa con la otra? Nada, sólo me ha dado esta terrible sensación: cuando la víctima es una persona, la justicia es mucho más blanda que cuando los delitos son hacia conceptos o hacia cosas materiales. Apuesto mi casa que el tipo que acosó a la chica era un violador, que no era la primera vez que hacía eso ni sería la última. Y estaba en el metro, tranquilamente, cuando debería estar encerrado. No se puede llamar a la policía por un caso claro de acoso que puede acabar MUY MAL pero sí podemos meter condena de cárcel a un grupo de chavales por restaurar unas casas ¿Estamos locos?
Es que me atrevería a apostar que si hoy salgo a la calle y le meto un puñetazo a una abuelta tengo menos posibilidades de entrar en la cárcel que si salgo con un megáfono a cagarme en la monarquía. Y eso es un problema muy gordo, estamos totalmente desprotegidos. Parece que tengamos que ir a comisaria con un cuchillo en la espalda para que se considere actuar para protegernos, pero nos pueden detener y condenar por cualquier chorrada en la que no hay heridos ni si quiera daños sólo porque al juez conservador de turno le apetece. No sé si os da la misma sensación, pero la mía es así y más después de que aquella noche nos dijesen que no podíamos llamar a la policía porque aún no había pasado nada.
Y hoy veo esta noticia:
https://www.periodicoclm.es/articul...r-demolicion-pueblo/20180608154515008405.html
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Los jóvenes que repoblaron Fraguas, condenados a prisión y a pagar la demolición del pueblo
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¿Qué tiene que ver una cosa con la otra? Nada, sólo me ha dado esta terrible sensación: cuando la víctima es una persona, la justicia es mucho más blanda que cuando los delitos son hacia conceptos o hacia cosas materiales. Apuesto mi casa que el tipo que acosó a la chica era un violador, que no era la primera vez que hacía eso ni sería la última. Y estaba en el metro, tranquilamente, cuando debería estar encerrado. No se puede llamar a la policía por un caso claro de acoso que puede acabar MUY MAL pero sí podemos meter condena de cárcel a un grupo de chavales por restaurar unas casas ¿Estamos locos?
Es que me atrevería a apostar que si hoy salgo a la calle y le meto un puñetazo a una abuelta tengo menos posibilidades de entrar en la cárcel que si salgo con un megáfono a cagarme en la monarquía. Y eso es un problema muy gordo, estamos totalmente desprotegidos. Parece que tengamos que ir a comisaria con un cuchillo en la espalda para que se considere actuar para protegernos, pero nos pueden detener y condenar por cualquier chorrada en la que no hay heridos ni si quiera daños sólo porque al juez conservador de turno le apetece. No sé si os da la misma sensación, pero la mía es así y más después de que aquella noche nos dijesen que no podíamos llamar a la policía porque aún no había pasado nada.
Biipa.-