P
pescadilla
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Sin embargo, lo que yo he visto, en varias regiones de la mitad norte (mi familia de tíos y primos está desperdigada), es que la mujer ha trabajado igual que el hombre, aunque sus ingresos eran menores. Servicio doméstico, ancianos, supermercados y trabajos así. Los sueldos del hombre eran mejor pagados, pero también más exigentes. Hablo de mujeres, a quienes les pillaron el final de la dictadura (años 70) y el R78, los 80 y los 90.
La vivienda se ponía a nombre de los dos, pero también hay muchas familias que la vivienda estaba a nombre sólo del marido. La mujer aportaba una dote, al casarse. Algunas eran tan pobres, que no aportaban nada.
Mis dos abuelas, pobrecitas, trabajaron como mulas toda su vida. Suerte que pudieron cotizar para la pensión mínima y que sus maridos eran buenos hombres (ni bares ni p***s). Lo normal era que la mujer trabajara fuera de casa sin cotizar. Los niños también, desde los catorce años y en las vacaciones escolares. Porque se necesitaba para subsistir y no pasar miserias. Incluso en los años 60 y los 70.
En cuanto a mis dos abuelas y mis tías abuelas. Las mujeres que no trabajaron eran porque hicieron buenos matrimonios, el marido ganaba lo suficiente, mientras que ella se quedó cuidando de los niños. Era una familia más solvente. Digamos que en los hogares solventes y los hogares privilegiados, la madre o la esposa no trabajaba fuera de casa, pero tuvieron más de dos hijos y cuidaron de los ancianos enfermos.
La familia de Manuel Díaz, pese a haber nacido en una época menos miserable y pese a haber sido chaval, durante los años 80, se puso a trabajar en limpiezas, siendo casi un niño. Que se j***n el padre y familia, el chico necesitaba dinero y los tuvo bien puestos para ponerse delante del toro.
Un saludo.
La vivienda se ponía a nombre de los dos, pero también hay muchas familias que la vivienda estaba a nombre sólo del marido. La mujer aportaba una dote, al casarse. Algunas eran tan pobres, que no aportaban nada.
Mis dos abuelas, pobrecitas, trabajaron como mulas toda su vida. Suerte que pudieron cotizar para la pensión mínima y que sus maridos eran buenos hombres (ni bares ni p***s). Lo normal era que la mujer trabajara fuera de casa sin cotizar. Los niños también, desde los catorce años y en las vacaciones escolares. Porque se necesitaba para subsistir y no pasar miserias. Incluso en los años 60 y los 70.
En cuanto a mis dos abuelas y mis tías abuelas. Las mujeres que no trabajaron eran porque hicieron buenos matrimonios, el marido ganaba lo suficiente, mientras que ella se quedó cuidando de los niños. Era una familia más solvente. Digamos que en los hogares solventes y los hogares privilegiados, la madre o la esposa no trabajaba fuera de casa, pero tuvieron más de dos hijos y cuidaron de los ancianos enfermos.
La familia de Manuel Díaz, pese a haber nacido en una época menos miserable y pese a haber sido chaval, durante los años 80, se puso a trabajar en limpiezas, siendo casi un niño. Que se j***n el padre y familia, el chico necesitaba dinero y los tuvo bien puestos para ponerse delante del toro.
Un saludo.