En mi caso, las diferencias de trato son porque yo ya tenia establecido mi futuro de cuidadora, y no era necesario tratarme bien, y también porque soy la más parecida a mi padre (cosa que ella odia).Buf, buf, buf... Que sea maja, abierta, dicharachera y muy easy way cuando os veis; no quita que sea una HdP por la espalda. Esas diferencias destrozan, que es lo que le ha pasado a la pequeña. Muy raro semejante diferencia entre ambas, hay algo más, que es (a falta de más info), las diferencias en la forma de crianza, q son capaces de determinar el éxito o el fracaso de uno u otro. Me suena q hay estudios al respecto, a ver si cuando llegue a casa lo busco y te lo paso.
La prueba está en que nunca me llamaba por mi nombre. Me llamaba "oye tú", como hacía mi padre con ella.